•°>VENDETTA<°•//OFFGUN//• [-Terminada-]

32

Carol siempre había amado mucho a mi padre, pero al enterarse de todo lo que hizo, se lleno de rabia.

Su madre y su padrastro vinieron en cuanto se enteraron que estaba en el hospital. La pobre se había roto el tobillo, ni siquiera recordaba cómo, pero tomando en cuenta que estuvo drogada y con unos tacones muy altos....no era de sorprenderse. Debían operarla esta tarde.

Recordé esta mañana, me había reunido con July y su madre, estaban muy asustadas por lo que podría a pasar, pero yo les dije que no debian preocuparse. Mi padre me había dejado una inimaginable herencia, y yo pensaba indemnizarlas por todo lo que pasaron. Además intente convencer a July que era joven y podía rehacer su vida, podía estudiar, viajar o lo que deseara.

-Siento haber sido dura contigo- Me dijo Samantha, la madre de July -Solo trataba de protegerte.

-Lo sé, lo entiendo- dije estrechándola entre mis brazos.

-Ojalá pudiera darte las respuestas que buscas sobre lo que le paso a tu madre- dijo acariciándome el rostro -Pero no volví a saber de ella cuando se mudó con tu padre, jamás respondió mis cartas y entendí que ni siquiera se las daban.

Eso era un hecho. El carácter dominante de mi padre jamás permitiría que mi madre tuviera una persona con quien desahogarse todo lo que le hacía. Volví a la realidad. La madre de Carol sacó algo de su bolso y se acercó a mi.

-Encontré este diario hace muchísimos años, estaba escondido entre las pocas cosas que quedaban de tu madre; ya que tu padre se estaba deshaciendo de ellas. Pero yo guarde esto porque crei que algún día querrías conocerla mejor. Yo nunca lo leí, no me correspondía, pero creo que ya llegó el momento para que puedas decidir qué hacer con él.

Me lo entrego y cuando lo tuve entre mis manos sentí como todo dentro de mi se removió. Lo abrace contra mi pecho como si fuera mi madre en carne y hueso.

-¿Sabes que siempre estaré para ti?- me recordó mi exmadrastra -Aunque tus padres ya no estén, en mi siempre tendrás una madre. Eso lo supe desde el primer día que te vi. Con tus pestañas largas y ojos brillantes mientras bailabas distraídamente en el jardín.

Me reí y se me soltaron unas lágrimas. Oir en voz alta que ya no tenía padres, era duro... Y aunque me alegraba de mi hermana tuviera la suerte de tener a su madre y un increíble padrastro que la amaba, tenía ganas de salir huyendo de allí. Porque yo nunca tuve aquel amor incondicional de padre.

De reojo observé que Off llegaba, asi que ir a recibirlo fue mi excusa para salir.

Enseguida me abrió sus brazos para recibirme, Sentir la calidez de su cuerpo me hizo muy bien, era lo único que necesitaba...

A él....

-¿Estas bien?- me pregunto besándome la cabeza.

-Lo estaré...- dije echando la cabeza hacia atrás para buscar su mirada -Estoy seguro.

-Te amo. Lo sabes ¿verdad?

Sonreí.

-Te amo más.

-Podemos discutir eso-dijo atrapando mi labio interior... despertando algo de mi.

-¿Cuándo volveremos a Nueva York?- le pregunté.

-La semana que viene- me tomo de la mano para dirigirme hacia la salida.

Fuimos hasta el estacionamiento y una vez que subimos al auto, me pasó una carpeta para que la revisara.

-Es la lista de nombre de las personas que gracias a ti han vuelto a casa.

-Gracias a todos querrás decir. ¿O es que tú no estabas ahí?- Él sonrió y se encogió de hombros.