Capítulo 9

830 152 5
                                        

—¿Listo para salir con el chico más encantador de todos, chérie?

Zhan solo esperaba tener la paciencia suficiente para estar soportando a Wang Yibo, cuando había terminado de mirar si se había vestido bien, por unos momentos se estaba arrepintiendo de haber aceptado salir con Yibo, pero no sabía si era correcto hacer aquello.

No le gustaba cancelar salidas porque sabía que también las personas a las que les decía que no podría, se ponían tristes, eso no le gustaba en absoluto.

—Será mejor que olvides ese apodo si no quieres que te cierre la puerta en la cara.

Yibo soltó una risa, le agradaba que Zhan fuera así, no le dejaba acceder rápido hacía él, y es que Yibo se aburría cuando las personas accedían rápido a sus encantos, cuando vió que Zhan no lo hizo le gustó mucho más.

—¿A dónde iremos?

—¡Te encantará!

Todo lo tenía planeado a la perfección, irían a un restaurante que tenía como menú especial solo para ese día, los platillos más típicos que se sirven en la gastronomía francesa.

Yibo estaba conciente de que Zhan al estudiar gastronomía internacional, sabría todos los nombres de los platillos que iban a servir, y solo esperaba que le gustara, Yibo no era de gastar mucho dinero cuando salía con alguien, pero sentía que con Zhan podía ser diferente y más porque sabía que aquel chico no se negaría a darle una respuesta afirmativa si es que le pedía que salieran.

—¿Un restaurante? — preguntó Zhan mirando a Yibo.

—Por algo estudias gastronomía, ¡te fascina la comida! ¿No es así?

—Por supuesto, es increíble saber el cómo se preparan algunos platillos, además de conocer las diferentes comidas del mundo — los ojos de Zhan mostraban un brillo especial cuando había dicho aquello.

—Se ve que en verdad amas lo que haces.

—Por supuesto, ¿quién no lo haría?

Yibo se señaló a sí mismo, lo que había desconcertado un poco a Zhan.

—¿Qué?

—Sí, ser abogado no estaba en mis planes.

—Pues pensé que sí, después de todo las razones que me diste...

—Son solo para darme algo de ánimos — interrumpió a Zhan —, así puedo pensar que trabajar con las leyes no están aburrido y agotador.

Zhan se quitó los lentes después mirar a Yibo, lo que más le gustaba a Yibo era mirar los ojos de Zhan y más sin esos lentes, se veían hermosos.

—Deberías estudiar lo que quieres, y no lo que odias.

—Dile eso a mi padre y te manda al demonio de inmediato — Yibo sonrió triste —, a mí me hubiera encantado estudiar artes plásticas, no derecho.

—Ya te lo dije, mi padre...

—¡El no tiene derecho a manejar tu vida!

Ambos se detuvieron, Yibo miraba sorprendido a Zhan, quién tenía el ceño fruncido levemente y los labios apretados, soltó un bufido apartando la mirada de Yibo.

—Yibo, debes entender, que nuestros padres no deben meterse en nuestras decisiones, porque aunque ellos no hayan logrado lo que hubieran querido, no deben hacer que sus hijos hagan lo que ellos no quieren.

De nueva cuenta Zhan se colocó sus lentes.

—Vamos antes de que se me vaya el apetito.

Cuando Zhan estaba a punto de comenzar a caminar, sintió como alguien lo tomaba del antebrazo y lo jalaba hacia atrás, vió como Yibo lo pegaba más a su cuerpo, tenía su brazo derecho rodeando su cintura, mientras con su mano libre acariciaba su mejilla y le quitaba sus lentes.

—No me equivoqué contigo, gracias, chérie.

—¡E-espera! ¿De qué...?

Zhan sintió como Yibo juntaba sus labios en un suave beso.

B L E UDonde viven las historias. Descúbrelo ahora