-Elógiame- (MitsuTai)- TokyoRevengers

-Hermanito-

-"me pregunto en qué momento las cosas se torcieron"-

Un pensamiento fugaz que cualquiera tendría frente a la situación actual entre los hermanos Shiba y el mayor de los Mitsuya.

pero

¿por qué? 

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Lo que inició como un simple desliz tratando con un chico problemático, germinó en una bonita amistad que perduraba con el pasar de los años, Mitsuya era prácticamente como un hermano mas de la familia, otro hermano mayor para Hakkai a quien admiraba y respetaba por su actitud siempre positiva y amable, confiable, capaz de hacer cualquier cosa, respetable e impoluto.

Desde hacían ya 10 años que se habían vuelto tan unidos, pasando festividades juntos, saliendo a pasear, pasando la noche en su casa o simplemente tomándose un tiempo para descansar de la abrumadora rutina. 

Pese a esto no solía ir muy seguido a la mansión de los Shiba, por alguna razón no querían que estuviese cuando el menor merodeaba, en todos estos años nunca le dijeron por qué.

Estaban paseando por Shibuya, comprando en el centro comercial unas nuevas prendas para la próxima fiesta de Yuzuha, Mitsuya estaba buscando unas camisas que pudieran combinar con los zapatos que el menor había elegido y se lucieran con su alargada figura. Lo hizo pasar al cambiador y se quedó pensativo a un costado, vio a todos lados y suspiró antes de hablar.

"Oye Hakkai" -se oyó un leve sonido de adentro- "ahora que será la fiesta de Yuzuha, ¿crees que podría ir a tu casa?" -conteniendo su frustración-

"...bueno" -murmuró abrumado- "no lo se... no creo que sea buena idea"

"¿ por qué no? yo también soy parte de la familia ¿o no?" -frunciendo levemente el ceño- "pero nunca me dejan asistir a las fiestas familiares, y eso que ustedes siempre van a mi casa en mi cumpleaños" 

"..." -frunció el labio, no se le ocurría que excusa inventar. No es que no quisiera que vaya, le dolía hacerlo sentir excluido, pero- "Taka chan... en serio yo-"

"olvídalo" -haciendo una mueca, no tenía ganas de lidiar con eso de nuevo. No era la primera ni la última vez que se lo planteaba y siempre era lo mismo, ambos hacían lo mismo, le decían que no era buena idea que se encontrara con su hermano menor, incluso evitaban hablar sobre él- "pruébate eso rápido, aun quedan estos dos" -haciendo una seña por debajo de la cortina del mostrador-

-guardó un breve silencio, conteniendo la culpa; era mas difícil ver como intentaba ignorar el tema y continuaba siendo amable- "si...tienes razón" -rió nervioso, cambiándose rápidamente-

Mas tarde, cerca de la mansión, Hakkai insistió en que podía llevar todas las bolsas con ropa por su cuenta pese a que se le estaban cayendo, cosa que le ponía nervioso; el pelilila rió e ignoró su capricho para tenderle una mano y acompañarlo, después de todo era su culpa que tuviese no solo ropa para la fiesta para ambos, sino que también otras prendas elegantes y casuales para lucir bien durante las vacaciones.

Todo parecía normal hasta que unas pisadas y un leve grito desde dentro de la casa llamó la atención del peliazul, por un momento lo había olvidado, cuando quiso advertirle a su invitado la puerta se abrió, revelando luego de tanto tiempo a aquel integrante faltante de los Shiba, Taiju, el hermano menor.

Un chico de contextura pequeña, un poco alto para la edad que suponía tener, cabello similar a su hermano, unos afilados ojos ámbar con un perpetuo ceño fruncido que lo hacía parecer molesto y una vestimenta algo formal. 

Como haría cualquier persona normal, Mitsuya se disponía a saludar extendiendo la mano hacia el desconocido menor cuando se vio obstaculizado por la espalda de su amigo.