Una Nueva Historia

Especial V (Parte 3)

Fueron una largas y arduas horas de viaje pero, como bien dijo Mingjue, a la mañana ya estaban en Fenghuang. Los discípulos apenas los vieron los dejaron entrar al salón para luego llamar a los grandes maestros y a su futuro líder, quienes enseguida le contaron todo lo sucedido la noche anterior

-¡ESOS MALDITOS PERROS WEN!- Exclamó su hermano mientras que golpeaba la mesa provocando que todo se cayera o saliera de su lugar, y el fuerte estruendo del golpe provoco que todos en el Salón se callaran.

-¿Seguro que estas bien, Wei-xiong?- Pregunto Huaisang mientras veía cada centímetro del contrario para ver si había algún indicio que indicara que el Wei estaba Recayendo en lo que fue en su vida anterior, suspiro aliviado cuando no noto nada y Wei Ying le diera a entender que estaba bien. Fue unos segundos después cuando vio como el Wei descargaba todo el dolor de su anterior vida en esta, cuando todos comenzaron a dudar de su capacidad, de su lealtad y de sus palabras. Y cuando vio como este se retiraba junto a sus hermanos no dudó ni un poco en seguirlos, y talvez, sin querer obviamente, término escuchando la conversación de los tres Fénix sobre el hecho de construir nuevamente en Amuleto Tigre Estigio

"No, no, no y no" Pensó el Nie, eso traería nuevamente los sucesos del pasado y sería en vano esta nueva oportunidad, así que se le ocurrió darle una nueva opción al Wei

- Ya lo veremos, pero algo vamos a hacer. Por ahora hay que centrarnos en el siguiente objetivo de los Wen, Qinghe Nie. Hay que hablar con el Líder y si es necesario mandar ayuda por si acaso -

La voz de Wei Ying le hizo volver a la realidad, interviniendo en la conversación para que El contrario no gastará más energía en algo en lo que ya se estaba ocupando.

- No lo creo Necesario Wei-Xiong - Los hermanos escucharon su intromisión y se giraron en dirección a la puerta para ver como Huaisang se adentraba a la habitación - Yo ya me estoy encargando de eso -

-¿Enserio?- Pregunto incrédulo Wei Ying, él asintió -¿Y que es lo que haras?-

- lo único que debes saber es que ya me estoy encargando de todo, si es necesario te mandaré una carta - y con esto aclarado se fue directamente a su Habitación, donde busco uno de sus libros donde hablaba detalladamente sobre lo que necesitaban en esos momentos. Al encontrarlo, busco una página en específico para luego arrancarla y enrrollarla.

- A-Cong - Dijo aquel nombre para que, en cuestión de segundos, aquel joven se asomara por su ventana - Tengo que pedirte que hagas algo -

- Estoy a su servicio -

- Necesito que le entregues esto - le entregó di ho papel al espía - al heredero Wei -

-¿Puedo preguntar por qué?-

- Digamos que...le será de mucha ayuda en un futuro - y dicho esto el joven asintió y se fue entre la oscuridad de la noche. Huaisang se sorprendió al ver cómo había oscurecido tan rápido pero lo agradeció ya que estaba muy cansado y permitió que de ahora en adelante todo siguiera su respectivo curso

Adivinen que objeto le habrá mostrado Huaisang a Wei Ying que haya sido importante

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Muchos Días después

(Luego de que Lan Zhan volviera con su forma de dragón y todos se hayan despedido para ir directo a la guerra)

¿Recuerdan eso de "dejar que todo siguiera su respectivo curso"? Bueno, él no, y eso quedo claro cuando, al ver cómo todos se alejaban sobre aquella criatura, veía a Meng Yao, quien también veía aquel dragón con añoranza, para luego llevárselo adentro de la cueva

-¿Huaisang?- pregunto este al ver como el nombrado esta tenso y muy ansioso -¿Que te sucede?-

-¿Que estarías dispuesto a hacer por tu pareja y tus amigos?- le pregunto de la nada, sorprendiendo al contrario

-¿Disculpe?-

-¿Que estarías dispuesto a hacer por las personas que te importan?- Meng Yao pareció pensarlo muy profundamente, después de todo era la primera vez que le preguntaban algo tan personal y con una respuesta que podría cambiar hasta lo mas mínimo toda su vida

- Yo podría matar a cualquiera si así lo requiere la situación - respondió seguro Meng Yao

-¿A cualquiera?- Pregunto el Nie, el contrario asintió -¿Hasta llegarías a suicidarte?-

- Si es lo necesario para que todos vivan bien, lo haría - Respondió con el pecho alto, después de todo, el hombre frente a el le brindo varias oportunidades y le dio varas cosas que nunca antes pensó que iba a tener, pagarle con su vida u era requerido era menos de lo que podía hacer -¿A que viene esa pregunta?-

- Si mi instinto y mi fuente no fallan, tenemos una probabilidad de que la persona que ayuda a Jin Guangshan va a utilizar a uno de los nuestros como método de chantaje para ganar si es que en la batalla nuestro lado tiene ventaja, te pido que vayas y que si eso pasa, intervengas y acabes con el - Meng Yao asintio

- Espere, si eso era lo que me iba a pedir entonces ¿Por que me pregunto eso de suicidarme?-

- Lo sabras cuando lo veas tu mismo. Un caballo te esta esperando en la base de la montaña, ve  - Y con eso aclarado, el contrario se retiro a gran velocidad de la cueva dejando al Nie pensativo.

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-¡HUAISANG!- Un grito ya conocido para él junto con el sonido de pasos ingresaba a la cueva, se giro y vio que solo su hermano estaba entrando en la misma -¿Es cierto eso de que fuiste tú el que mando a Meng Yao al Campo de batalla?, ¿Acaso sabes el riesgo que corrió?-

- Pero funcionó ¿o no?-

-¿Y si no lo hubiera hecho?, ¿te habrias hecho cargo de su muerte?- pregunto furioso Mingjue al ver cómo Huaisang minimizada la situacion

- No lo se, y como eso no sucedió, ninguno de todos nosotros lo sabrá - con eso dicho tomó camino a la salida de la cueva bajo la atenta mirada de su Da-ge

-¿A donde vas?- pregunto Mingjue

- Ahora que terminó toda esta guerra, creo que ya es hora de ocuparme de mi ¿o no?- hablo con un tono con un cierto toque sensual pero sin llegar a ser asqueroso o repulsivo, y con aquella conversación finalizada por parte de Huaisang salió de dicha cueva