Señorita Desesperada _ Naraku x Lectora

Cap. 9: Enfrentamiento amistoso

Ya habían pasado tres días y nuestros viajeros se encontraban pasando por un bosque hasta que Kagome sintió fragmentos de la perla.

Kagome: Siento dos fragmentos de la perla, está por allí. - comentó señalando a una parte del bosque.

En esa dirección varios árboles estaban destrozados y un sendero se había formado.

Kagome: Se están acercando.

Inuyasha: Este olor ...

De pronto un remolino se fue acercando hasta que se detuvo mostrando a un chico de cabello negro y piel morena.

Inuyasha: Koga - dijo en un gruñido.

Koga se acercó a Kagome.

Koga: Mi bella Kagome, me alegra que estés bien.

El hombre lobo desvió la mirada a la castaña y frunció el ceño.

Koga: ¿Quién eres tú? Desprendes una potente aura demoníaca. - exigió con el ceño claramente fruncido y amenazante.

Nozomu rió, Kagome le había comentado de él en una ocasión. El hombre lobo Koga, sumamente rápido principalmente por los fragmentos de la perla incrustados en sus piernas.

Nozomu: Un gusto Koga, soy Nozomu ... No me mires así, no muerdo, tampoco le haría daño a tu bella Kagome así que puedes relajar esa expresión.

Koga: ¿De dónde saliste? Llevas una ropa muy extraña, muy ajustada al cuerpo, que vulgar.

Nozomu: Jaja, pero bien que no hablas de la corta falda de Kagome. - bromeó sonriente.

La azabache se sonrojó por eso, parecía un tomate. Koga se quedó callado y sin argumentos.

Kagome: Ella es una amiga Koga, no pretende enemistarse con nosotros.

Koga: Aún así, ¿no se dan cuenta de el nivel de su presencia?

Los presentes lo miraron con duda a excepción de la castaña.

Koga: ¿Es en serio? Desprende un aura maligna muy poderosa, es imposible que no lo hayan notado, se siente tan, tan ...

Nozomu: ¿Intimidante? ¿Aterrador? ¿Mortífero? ¿Opresivo? - su mirada se afiló y miró al Moreno con una expresión de sadismo.

Koga: ... Si. - tragó fuerte y se puso delante de Kagome.

La ojiverde sonrió con una expresión amable que desconcertó a Koga.

Nozomu: No soy tan mala como parezco.

De pronto otra presencia demoníaca se hizo notar, era inconfundible, Naraku. Provenía de más adelante así que fueron lo más rápido que pudieron hasta llegar a un lo que parecía ser un campo de amapolas. Allí estaba, y no como marioneta, era el real, el verdadero Naraku. Se encontraba de pie sin hacer nada hasta que a una velocidad sobrenatural lanzó uno de sus tentáculos en dirección a Nozomu, pero ella lo sostuvo con la mano antes de que pudiera hacerle nada.

Los demás la miraron sorprendidos. Ella apretó tanto el tentáculo que descuartizó la punta sin esfuerzo. De manera calmada dio varios pasos adelante hasta quedar a unos 5 metros del azabache. Todos observaban atentos y se confundieron aún más cuando los dos se reverenciaron al mismo tiempo. Al erguirse nuevamente Naraku hizo un ademán con la mano indicándole a la chica que le daba el honor de ofrecer el primer golpe.

Ella ni corta ni perezosa corrió en dirección al medio demonio y saltó a escasos centímetros de él para estirar una de sus piernas en el aire y regalarle una patada en el costado del cuello que impulsó hacia la izquierda con fuerza arrancándole la cabeza.

Él se regeneró y ahora era su turno, con esa reverencia habían decidido una pelea a puño limpio, solo ocupando su fuerza Física, nada de tentáculos o trucos. Se apresuró hacia la chica con el objetivo de darle un puñetazo el estómago pero ella lo esquivó y aprovechando la cercanía tomó sus brazos con cada mano y con los pies lo volcó tirándolo al suelo a gran velocidad.

Él se levantó y fue ahí cuando la pelea se puso intensa. Saltaban, se pegaban patadas en el aire, la mayoría de las veces el más afectado era Naraku, quien no tenía la misma experiencia que Nozomu en el combate cuerpo a cuerpo. Había golpes que no era capaz de predecir y como consecuencia acababa en el suelo, pero siempre se levantaba. A pesar del largo período de tiempo que llevaban peleando ninguno de los dos se notaba cansado.

Los demás presentes sólo podían observar he intentar seguir inútilmente los ataques con la mirada. Inuyasha no tenía ni oportunidad de sacar la espada. Pero durante la pelea, Kagome se percató de algo que los demás no. Los ojos de ambos oponentes brillaban como nunca, incluso sonreían en cada golpe, no importaba si terminaban en la tierra. Las flores se marchaban constantemente de sangre y aún así ellos continuaban con energía y la sacerdotisa podía jurar estar viendo algo que nadie conocía de ninguno de esos dos. Deberían odiarse, deberían querer matarse, pero no luchaban con ese objetivo, ellos ... se divertían.

Cuando menos lo esperaron, Naraku usó sus cuerdas vocales para entablar una conversación con Nozomu durante la pelea.

Naraku: Es usted sumamente increíble señorita.

Nozomu: Y usted no se queda corto, pero debería de buscar la manera de dejar de acabar en el suelo. - otra vez lo estrelló en la tierra, esta vez posando su pie sobre él.

Naraku la tomó veloz de una pierna invirtiendo los papeles, pero ella se levantó dando una grácil voltereta que dejó encantado al medio demonio.

Naraku: Sus movimientos me deleitan.

Esta vez ella no respondió. Lanzó un puñetazo al aire en dirección al pecho del contrario y fue tan potente que le destrozó la parte superior de la ropa y le dejó algunos rasguños. Él sonrió divertido.

Naraku: Tú ... ¡Tú sí vales la pena! - dijo alzando la voz y sonriendo con los ojos abiertos como si hubiera visto el más preciado tesoro.

Ella se le acercó, quedando nuevamente a 5 metros. Los dos se pararon derechos y caminaron en dirección a su oponente. Se miraron de manera afilada y acto seguido se despidieron dándose las manos. Se alejaron un poco y Naraku desapareció de allí en su esfera gigante.

El equipo se quedó perplejo. ¿Qué acababa de suceder? Corrieron rápidamente hasta Nozomu.

Inuyasha: ¿¡Qué fue eso!?

Nozomu: ¿Eso? Eso, Inuyasha, fue una batalla de verdad, una pelea con términos y respeto. Fue mi primera vez peleando así. - sonrió sosteniendo su mentón con una mano - Jamás pensé que alguien podría mantenerme en posición de combate por tanto tiempo ... fue divertido.