POR BESAR A MI HERMANA

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Me despierto con la molesta alarma de Clarie, la cuál parece que es inmune al espantoso sonido que emite ese cacharro. Sin más dilaciones le tiro su despertador por la ventana mientras ella sigue durmiendo.

Al final, cuando todas estamos despiertas y arregladas, nos disponemos a bajar a almorzar.

-Chicas -Empieza Clarie en mitad del pasillo -¿Alguien sabe que ha pasado con mi despertador? Hoy no me lo he encontrado en la mesilla de noche.

En ese momento me empiezo a reír como una histérica lo que hace que me delate en el primer momento.

-Bueno da igual, ya me compraré otro -Dice con poca importancia.

-No es necesario -Corta rápidamente Rose.

-Pero si da igual, como si te ponemos una bocina en la oreja y la hagamos sonar, tu no te despiertas -Dice Aria inexpresiva.

-Bueno... Pues nada...

Continuamos por el pasillo hasta llegar al comedor. Nos sentamos en una de las mesas y poco después llegan los chicos, me fijo y me doy cuenta de que falta Will, lo que hace que pregunte a mi hermano poco después de sentarse.

-Escucha Simon.

-Dime -Me responde.

-¿Donde está Will? -Pregunto extrañada por que no estuviera con ellos.

-¿A caso te importa? -Me pregunta de forma borde

-Pues si, es mi amigo

-¿Solo eso? -Me pregunta con doble sentido

-¿A que te refieres? -Pregunto esta vez enfadada

Antes de dar tiempo a que me respondiera, las puertas del comedor se abren revelándome una pésima imagen de Will lleno de moratones por la cara.

-¿Pero que ha pasado? -Me pregunto para mi misma, sin pensármelo dos veces, corro hacia él y de un tirón lo vuelvo a sacar del comedor para llevármelo a mi habitación y curarle las heridas.

Durante el camino nadie dice una sola palabra yo voy delante y él solo se dedica a seguirme.

-¿Se puede saber donde te has metido? -Le pregunto una vez hemos entrado en mi habitación, donde nadie nos puede escuchar.

-En ninguna parte -Dice indiferente, mientras yo no puedo sacar la vista de sus espantosas heridas.

-Claro... Y ahora me dirás que esas heridas te han salido solas -Bromeo enfadada.

-Escucha, esto no tiene importancia -Dice mientras se sienta en mi cama.

-¿Desde cuando no tiene importancia que te den una paliza? -Le pregunto.

-Desde que hay una razón en medio.

-¿Que razón puede haber para que te peguen? -Empiezo a ponerme histérica.

-Pensar que te besé ayer -Dice bajando la mirada -¿¡Qué?!

-¿¡Qué!? ¿Cuándo?

-Ayer por la noche en el pasillo.

-Pero si tan solo me besaste la mejilla.

-Ya, bueno...

-¿Fué mi hermano verdad? -Pregunto minetras empiezo a curarle las heridas. Lo que sé de él, es que por que tenga una cara tierna no sugnifica que sea indefenso.

-No -Dice intentando ocultar la mentira.

-¿Sabes que? No te dediques a contar mentiras -Aconsejo.

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