Izuku el tirano de los mares ~Poseidon~

Prologo: Una Nueva Oportunidad

*1000 años antes*

-RAGNAROK-

—L-Los ganadores son los humanos...—La voz del presentador fue apenas un susurro al hablar

Del lado de dioses no podían creer lo sucedido, los humanos habían obtenido la primera victoria. Estaban muy asombrados y enojados, en especial porque la pelea la consideraban absurda en un inicio.

Del lado de la humanidad su representante era Sasaki kojiro, conocido por ser el mayor perdedor, ya que en vida nunca ha ganado una pelea.

Mientras que a los dioses los representaba Poseidón, considerado el dios más temido o como lo llamaban Zeus del mar.

La situación era delicada, cuando aceptaron el Ragnarok pensaron que esto iba a ser muy sencillo, pero después de la pelea de Adán, las cosas se estaban complicando.

Zeus ya intuía que algo así podría pasar, por eso mismo mando a Poseidón, nunca había perdido, la victoria debería haber estado asegurada, pero al parecer eso no era así, Poseidón perdió y nunca lo volvería a ver, ese era el destino para los que morían en Ragnarok, desaparecer.

*Arena de combate*

(pensamientos) No...este maldito humano no pudo matarme, es sólo un humano, ¡YO SOY UN DIOS! ¡SOY PERFECTO! ¡NO PUEDO PERDER CONTRA EL!...

­­- Que miserable existencia chico... -

(Pensamientos) ¿Miserable? Soy un dios, no soy miserable

Poco a poco Poseidón fue cerrando los ojos hasta que al fin murió...por ahora...

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-Lugar desconocido-

– ¿Dónde estoy? ¿Qué es este lugar? –

– Bienvenido Poseidón –

Poseidón al escuchar esa vos, sintió una paz absoluta, y como su cuerpo se relajaba poco a poco. Aun así su mente seguía en alerta

La voz era femenina, tranquila, y maternal, transmitía confianza, comodidad y paz.

– ¿Quién eres? –

El Dios miró a los lados buscando el lugar o la persona de quien provenía aquella voz. La paz transmitida era algo que nunca antes había sentido, no tan claramente al menos.

-Soy todo y nada a la vez

Eso era confuso y para ser sincero no tenía la paciencia para lidiar con algún tipo de broma. Pero...esto no se sentía bien, en general no sentía su cuerpo y su propia voz sonaba muy lejana.

De repente, los recuerdos del Ragnarok lo abrumaron. La pelea contra aquel humano y como este lo había vencido.

La furia se empezó a apoderar de él, dejando poco a poco aquella tranquilidad de hace unos momentos. El ego de un dios es enorme y que un ser mortal venza a un "inmortal", era un golpe duro para este.

Pero... ¿Qué podía hacer? Estaba muerto o eso se supone. Podía tener un ego alto pero tampoco era estúpido, sabía que, aunque de alguna forma está vivo, no podía hacer algo contra Sasaki Kojiro.

­– Estoy muerto... –

– Si... –

– Entonces ¿Dónde estoy? –

– Es una pregunta difícil de responder –

– ¿Porque estoy aquí? –

– Me pareciste interesante, asique decidí venir a dar una oportunidad –