final hope

# | tercer capitulo

Xiao's Pov:

Otra vez mas pensando en mis acciones, me habían llevado a dirección el otro día por primera vez, toda la universidad me miraba perpleja, ¿es que acaso ellos nunca habían cometido alguna falta?, después me di cuenta de lo que pasaba a mi alrededor y me dije a mi mismo

"Ah, Xiao, es la primera vez que vienes a dirección, cierto que eres el tranquilo del salón"

¿Bueno y es que acaso los tranquilos no pueden tener sus secretos también?, luzco de una forma en este tremendo lugar, pero fuera de aquí puedo sentirme realmente como soy.

Había peleado con Albedo, el cual las chicas llaman "el bonito que sabe química", ni que fuera el mejor de toda la clase, aunque bueno a mí no me va tan bien, pero ese no es el caso, a mi parecer él es un chico insoportable y raro, no entiendo para que se comporta de manera pasiva frente a los demás si cualquier día saldrá a la luz como realmente es.

Básicamente hace unos días estaba sentado en el parque de la universidad leyendo uno de mis libros favoritos, observe pasar a Albedo pero no le di mucha importancia, él estaba en una llamada telefónica demasiado ruidosa, él y su afán de ser presumido, hasta que en medio de su conversación escuche que mencionaba al chico rubio de trenza en mi clase, no es que este muy familiarizado con él, pero la voz de Albedo sonaba en un tono burlesco, y tenía una sonrisa maliciosa, seguramente estaba tramando algo otra vez.

El Parque

15:45

- ¿Viste que Aether se está volviendo más liviano últimamente?, el otro día me toco cargarlo en actividad física, creo que nos puede servir de algo - decía Albedo con un tono burlesco mientras reía- Mis grandes dotes del coqueteo podrán traerlo a nuestros pies, quien sabe, quizás también sea un menso que cae por el primer hombre que lo mire.

Mis ojos se abrieron curiosos ante lo que acababa de oír, no es que fuera de mi incumbencia, pero si al peliblanco menso se le ocurría gritar a los cuatro vientos todas esas ridiculeces sin respeto alguno, no se lo iba a permitir.

- No sé si eres tonto o te haces, pero si quieres gritar tu llamada todo lo que quieras puedes irte a otra parte - solté un resoplido molesto mientras seguía ojeando mi libro.

-Colgare la llamada espérame en línea, ugh, pero si no es más que el mismísimo Xiao quejándose, ¿el parque es público no?, puedo hacer lo que se me dé la gana aquí. -Albedo ríe de forma exagerada mientras observa al peli verde.

-Lo siento tanto, pero hay personas como yo que se molestan con tu ruidosa voz y preferirían que aquella persona se fuera a perder lejos, si me permites mostrarte, la salida esta por allá -le digo apuntándole con mi brazo, pero creo que eso no fue de su agrado, unos segundos después me tenía agarrado como si de eso dependiera su reputación.

-Haber amigo mío, ni siquiera pienses que puedes hablarme de esa manera, solo sigue siendo el característico Xiao que con solo verlo te dan ganas de vomitar - Albedo lo miro con asco y le respondió con un tono más alto.

-Eres tú quien me está gritando y sujetando, suéltame, me agarras con mucha fuerza, pareces que estas aferrado a mí, ¿qué, acaso te gusto? -le sonreí burlonamente, realmente me encanta agotar su paciencia.

Ni siquiera alcance a reaccionar cuando Albedo lanzó un puñetazo a mi cara, el golpe fue tan de la nada que llegue a tambalear, la multitud que estaba alrededor comenzó a observarnos, claro, en vez de decir que me habían golpeado decidieron quedarse de espectadores por ahí.

- ¿Ahora tienes miedo niñito?, vuelve a decir cosas así porque tengo miles de razones para dejarte tirado por aquí - el rubio dio la vuelta para irse, pero no espero que Xiao siguiera molestándolo

-Bueno rubiecito, así que no solo eres un subnormal, ¿sabes pelear también?, de alguien como tú, así de arrogante y horrible no me lo esperaba, ¿o es que acaso tu papi te enseño a defenderte para que no se dieran cuenta de lo imbécil que eres?, vaya que le funciono.

Venia directamente hacia a mi otra vez, por suerte aprendí una que otra cosa sobre pelea que me había enseñado Zhongli, esquivé como pude el segundo golpe y me dediqué a torcer su brazo mientras pateaba su estómago, cayó en el suelo, como si hubiese recibido la peor paliza de su vida, pensé que sería más fuerte, pero ahí estaba, parecía un saco de papas, se lo merecía.

-No tendré tanta comunicación con Aether, pero nadie merece ser tratado así, no entiendo que quieres provocarle, si sigues con tus estúpidos planes, entonces no tendré más remedio que proteger al otro chico, ¿me oíste?

"Proteger al otro chico", pero ¿cómo?, ni siquiera compartíamos juntos, acaso llegaría donde él y le diría, ¿te protegeré de todo lo malo que pase?, lo dije así por el momento supongo. 

-Albedo, deberías empezar a, uh - no alcancé ni a terminar, ¡estos malditos llamaron al superior justo cuando estaba dando mi discurso y el otro estaba tieso debajo mío- Él fue quien empezó! - les grité, pero de nada sirvió, me metí en un lio bien grande.

Después de pasar las horas en dirección escuchando los regaños y obligados a disculparnos entre nosotros salí por fin de ahí, me dirigí hacia la biblioteca, al menos encontraría algo de tranquilidad luego de este día tan estresante, al entrar tome un libro de mi gusto y fui a sentarme, no sé cuantos minutos habrán pasados desde entonces, solo reaccione cuando estaba casi terminando mi lectura, escuché unos pasos a mi lado, fue cuando entonces desvié un poco mis ojos y veo a aquel chico rubio ir hacia la salida, miró lo que estaba haciendo eso si pude notarlo, intente hacer el mayor esfuerzo de verme concentrado pero me temblaban los ojos, quizás él lo noto, o simplemente estaba despistado.