Conclusiones parte 2

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Pov Narrador

¿Que hace nuestra protagonista en estos momentos? La respuesta es: está cocinando, hace como tres horas quiso saber ¿Cuál será el sabor de esto? ¿Sabrá bien?; Por eso mato al pobre animalejo, este animal en especial despertó su curiosidad, pues parecía una clase de cerdo, pero su piel, pezuñas, orejas y cola parecían el de una vaca, asi que una vez muerto, hizo lo que pudo con el poco conocimiento que tenía, lo desangro, lo limpio, le quitó las viceras y lo corto en partes, separó un poco de carne y guardo el resto, ahora está guisando a su gusto.

Mientras ella cocina les contaré cómo llego a las conclusiones restantes; primero, su cuerpo es más joven de lo que recuerda, si bien ella nunca fue realmente delgada, cuando creció y entro en el colegio militar se ejército y se puso en forma, pero el cuerpo que tenía ahora estaba más llenito, como cuando estaba en sus años de adolescencia, tampoco tenía los malestares regulares, como la lumbalgia y el dolor de pies causados por su mala postura corporal y trabajo excesivo en el hospital, después de pensarlo saco un espejo del la bolsa, y al mirar su reflejo encontro su joven rostro de 12 años, en el reconoció la pequeña cicatriz de su frente, está parecía de unos pocos meses, por lo que debería de ser la edad correcta, cuando ella era adulta la cicatriz era casi imperceptible, sin embargo ahora le alegraba verla, le traía cierta tranquilidad y nostalgia, ya que de cierto modo era prueba de que había protegido a alguien que amaba, su hermano lloraba cada que veía la cicatriz, y aún cuando creció la veía con culpa, por lo que cuando empezó a ganar dinero intento borrarla comprando y probando distintos productos para la piel.

Segundo, la bolsa es realmente útil y multifuncional; como dedujo esto, bueno si bien tener un objeto que te permita guardar lo que te plazca y que no pese más de 300gr no es suficiente, agreguemos que puede transformarse, nuestra chica que se aburre fácilmente lo descubrió mientras divagaba en sus pensamientos, pensaba en cosas como "esto es realmente útil, pero.... le falta estilo, uno de mis pocos placeres antes de que esto ocurriera era mi colección de bolsas y zapatos", en cuanto pensó en ello, la bolsa sencilla de manta se convirtió en en bello bolso Chanel, después de descubrirlo estuvo horas jugando y transformando la bolsa a voluntad, Chanel, Prada, Louis Vuitton, Gucci, Dior, en fin, bolsas que solo había visto y añorado en fotos, pues nunca le hubiera alcanzado para comprarse una, no solo intento con bolsas de marca, también mochilas, cangureras, bolsas para las compras y hasta en una bolsa de plástico de las que dan el super. Transformaciones que no tenían más uso que la moda, pero que le daban placer al portador, por su puesto que podía transformase en algo que no fuera una bolsa, pero es algo que por el momento no le interesa a nadie. Una cosa más, que si fuera poco todo lo mencionado antes, descubrió que siempre y cuando conozca el mínimo funcionamiento de algo podría sacarlo de la bolsa, con la condición de que sean cosas que haya probado en la tierra, por ejemplo no puede duplicar una de esas extrañas frutas, porque son algo de este mundo no del otro, así fue como consiguió la navaja y la pistola. Aunque como todo en todos los mundos, las cosas tienen un precio, ya que mientras más complicado o menos explícito es un objeto hay mayor gasto de energía, y esto lo descubrió a la mala cuando intento sacar un celular, sabía cómo funcionaba, pero de ahí en fuera sus conocimientos eran nulos, por lo que después de sacarlo quedó inconsciente por seis días.

Tercero y último; tiene más habilidades de las que creía, ella descubrió que le era más fácil apuntar y disparar que en sus años en el colegio, en un principio esto lo atribuyó a que todo era una fantasía creada por su mente, ahora cree que es más una habilidad, pues si bien tiene la edad mental de una adulta, su cuerpo sigue siendo el de una niña de 12 años; su habilidad no era exactamente la de puntería, más bien era la de los sentidos amplificados, es decir oído, vista, tacto e incluso el gusto; en cuanto a mejoras físicas esa era toda su habilidad, su poco conocimiento en defensa y ataque era por lo que recordaba del colegio y su año de servicio; no tenía superpoderes como el correr rápido sin cansarse, ni el de levantar 100 kg de una sin sudar un gota, tampoco podía saltar super alto o manejar una espada sin antes haber empuñado una, ni ninguna otra habilidad salida de algún manga isekai, y esto lo descubrió intentando todo sin importarle la vergüenza, después de todo nadie la estaba viendo; pero para su sorpresa si tenía lo que ella llama una habilidad extraña, pues sin querer descubrió que puede transformar la materia y manipularla hasta cierto punto. Todo paso cuando en otro de sus momentos de aburrimiento empezó a recordar el proceso del vidrio que vio en un documental mientras jugaba con la arena que tenía en sus manos, de un momento a otro la arena se solidificó y ella al sentir esto abrió su puño encontrando una pieza de vidrio sin forma, se dio cuenta que de  podía manipularlo, pues entre ratos podía moldearlo como plastilina y entre ratos volvía a ser sólido, fue de gran ayuda que fuera buena en manualidades; pero como regla inquebrantable, todo tiene un precio, lo que volvió a descubrir a la mala, pues intento transformar un baso de agua a uno de chocolate caliente, no lo negaré, lo logro pero quedó inconsciente por casi 2 días. Pero bueno, ella misma descubrirá sus límites, sino pues pasará más tiempo dormida que despierta durante toda nuestra historia.

Volviendo al presenté, ella se encuentra disfrutando de su arduo trabajo, lo que al parecer está muy bueno, porque come como si no existiera un mañana

Otra historia de una chica en One PieceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora