Heaven [ inso's law x oc ]

[24] La mia musa

Ya iban de camino a la sesión fotográfica.No les hizo falta siquiera tomar un vehículo. El recorrido era breve desde 'la casa de la sagrada cocina' .

Como un paseo de 30 minutos hasta el lugar acordado.

Durante este tiempo, unos disfrutaban de una charla amena, mientras otros como Chun Young, YeoDan y Sena, escuchaban música. Estos también intervenían de vez en cuando, pero solo si eran preguntas directas.

Lo cierto es que de ser el caso preferirían estar en completo silencio, y disfrutar de sus respectivas canciones junto con la brisa del mar.

Hoy la morena estaba de un humor bastante tranquilo. No deseaba cantar o bailar, pero no porqué estuviera triste ni nada. Quizá estaba un poco cansada, así que.... supongo que estaba ahorrando energía?

"Nhg.... la bateríaaaa ..."

Era la segunda alerta que sus airpods le daban, así que como mucho durarían 10 minutos más.

".....no importa"

Ante el vago comentario por parte de su compañero de auricular, Sena que iba con los ojos cerrados, se obligó perezosamente a abrir uno.

Al hacerlo, terminó formando una mirada apática en su rostro.

El pelivioleta también iba con los ojos cerrados, por tanto, ninguno de ellos había estado vigilando el camino para evitar que uno de los dos se pegase una ostia.

"..."

" Traje los míos."

"....en serio? (=_=)?? Pudiste decirme eso hace 20 minutos, cuando me escuchaste quejarme por haber olvidado cargar estos apropiadamente."

"Seguirás hablando o me dejaras conectarlos?"

"Tsk...... Están en la mochila, cierto? "

"Si."

"Minibolsillo?"

"Uhum."

"Aguántame el móvil."

"Bien. "

Aunque para ellos ya era normal hablarse tan informalmente. El resto de muchachos no opinaba lo mismo.

Cabe recordar que en Corea, lo 'apropiado' era hablar de forma respetuosa a un mayor, incluso si la diferencia de edad era solo un año. Y más aún si no eran familia.

Sin embargo, esta 'tradición', poca importancia tenía en la vida de Hyong Sena.

Primero, porqué no creció aquí. Segundo, toda su vida la han llamado 'señorita' acompañado un habla respetuoso que usaban con ella, el cuál la hacía sentir enferma y vieja.

Y tercero.

Lo más IMPORTANTE : Se negaba a referirse a sus 'mayores' cercanos con el ,vergonzoso, termino 'oppa'.