EXQUISITA VINDICTA © [+18]

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Martes 23 de marzo

Palm Island, Miami Beach, Florida, EE. UU.

Narrador Omnisciente

La mirada de Ian se encontraba fija, completamente perdida en algún punto; cualquiera que lo viera, podía decir que simplemente contemplaba el inmenso mar azul, pero la tensión de su cuerpo y su pesada respiración, delataban lo que verdaderamente sucedía a pesar de portar aquella tranquila expresión facial.

'No juegues con tu vida, Julieth.' Fue el pensamiento de Ian mientras presenciaba tal escena.

Julieth deleitaba en la respuesta de su amado mientras provocativamente miraba al moreno frente a ella, quien, siendo honestos, apenas le prestaba atención. Actuaba así porque sabía que Ian la amaba, aunque se negara a sí mismo. En realidad, era consciente de que una de las cosas que más molestaban al rubio era el incumplimiento de sus reglas.

>>Mientras esto dure, tu no estarás con nadie más, porque no estaré metiéndome con una tipa que se deja tocar por cualquiera. << Aquella había sido una de las reglas de Ian.

'Veremos si con esto no te das cuenta de que es a mí a la que amas.' Pensó la castaña mientras pasaba sus brazos por el cuello de su "conquista".

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Julieth e Ian (18 años)

En este camino de la vida, una lección que se yergue con claridad es: precaverse ante la zancadilla de la traición, pues a menudo proviene de aquellos llamados "amigos" en vez de los "enemigos".

Aunque creamos conocer a las personas, sus recovecos y secretos, la realidad nos golpea con la certeza de que nunca llegamos a conocerlas por completo. En esta senda, aprendemos que la confianza debe ser otorgada con sabiduría y cautela, reservada solo para aquellos que la merecen.

La confianza de Tara hacia Ian Davins y Julieth Borkowski era inquebrantable, después de todo, ¿cómo no confiar en tu mejor amiga de la infancia y en el chico que tanto amor te ha demostrado? Cegada por la lealtad, Tara confiaba en ellos sin reservas, dispuesta a hacer cualquier cosa por ellos. Sin embargo, su fe en ellos no fue suficiente para evitar la primera mentira y traición hacia la candorosa chica.

Ian no tenía la intención de terminar acostándose con la mejor amiga de su novia, aunque no podía negar que había notado las miradas que ella le lanzaba. Pero, por otro lado, Julieth sí tenía planeado llevarse a la cama al novio de su mejor amiga.

Recapitulemos un poco los hechos de la primera traición que recibió Tara por parte de su novio y su mejor amiga.

— ¿Has visto a Tara? — preguntó Ian a la castaña que bebía de su vaso, con suma calma.