Hoy y Siempre - Dave Grohl

Hospital

Bajó mi falda junto con mis panties y me dio la vuelta bruscamente, haciéndome más daño del necesario. Intenté resistirme pero solo logró ponerlo más violento, ya que me metío un puntapie en una de mis piernas, aprovechando esto para abrirlas y lograr entrar en mi. Cuando lo hizo sentí un dolor desgarrador, cada embestida era peor que la anterior, el dolor se estaba volviendo cada vez más insoportable. Intenté apartarlo sin mucho éxito, ya que el tenía el triple de fuerza que yo.

-Ni creas que te vas a escapar pedazo de zorra- susurró en mi oído para seguidamente meterme un rodillaso en el muslo derecho. No tenía caso, mientras más me resistía, más me pegaba y me insultaba. Ya no podía hacer más que llorar. Después de aproximadamente 5 min, cuando por fin terminó, me tiró al suelo de un golpe y comenzó a darme patadas repetidas veces.

-Para, por favor, para- dije como pude entre llantos mientras me retorcia de dolor en el suelo.

<3

-¡Para, para, para!, por favor-. Estaba quedandome dormido cuando escuché a Cam pronunciar estás palabras. Rapidamente mi mirada se conectó con la de Kurt, y sin pensarlo nos levantamos y nos sentamos uno a cada lado de ella. Vi que Kurt tomó una de sus manos así que repetí el gesto para luego acariciarle suavemente la cabeza.

-Eh, linda, estás segura ya, despierta- dije lo suficientemente alto como para intentar despertarla, y funcionó. Cam abrió sus delicados ojos encontrandose con los míos.- Ya pasó, ya estás bien.

-Eh, hola princesa- dijo Kurt cuando se percató de que Cam había despertado para seguidamente dejarle un beso en la frente de forma paternal.

-Hola chicos...- dijo en un susurró.

-¿Cómo te sientes?, ¿necesitas algo?- dije mientras le acariciaba la cabeza.

-Agua, por favor- dijo con voz algo seca. Rápidamente Kurt se levantó para alcanzar una jarra con agua que había en una mesa cerca de la camilla, se la dió a Cam y esta la bebio casi completamente.

-¿Mejor?- preguntó Kurt.

-Si, muchas gracias- respondió con una sonrisa, o al menos un intento de esta.

-¿Cómo te sientes?- pregunté preocupado.

-Me duele todo el cuerpo- respondió mientras cerraba los ojos.

-¿Quieres dormir un poco más?- preguntó Kurt.

-No, he dormido demasiado.

-Un par de horas nada más- dije mirando mi reloj.

-¿Cuántas?- preguntó curiosa.

- Unas cinco horas y media, quizas seis- respondí sonriendo.

-Eso no es un par- se quejó.

-Lo sé, pero necesitas descansar- respondí sin dejar de acariciarla.

-¿Cómo llegué aqui?- preguntó después de unos minutos de silencio.

-Erin te encontró y nos llamó, luego llamamos a una ambulancia y te trajeron aquí- respondió Kurt.

-¿Quién más lo sabe?- indagó.