1. Todo comenzó aquí.

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MACERATA, ITALIA (ACTUALIDAD)

Quedan cuatro lunas llenas para que sea invierno, eso es en lo único que pasa por mi mente mientras recojo un puñado de ropa y las meto en una maleta, sin ordenarlas, sin doblarlas, porque simplemente me da igual. Siempre he sido una persona calmada, sin preocupaciones, solo me importaban mis hermanos, pero hasta en eso fallé.

Me llamo Destiny Blame, terminé la Universidad hace un par de años y desde la adolescencia trabajo en algo de lo que debería estar orgullosa debido a que es mi legado familiar, pero a veces siento que no merecía esto. Y si se preguntan en qué mierda trabajo, les diré: soy asesina a sueldo. ¿Qué quiere decir eso? Básicamente me pagan por quitarle la vida a personas inocentes que simplemente estuvieron en el lugar equivocado en el momento equivocado, pero no puedo dejar de hacerlo, porque se lo prometí a ella antes de que se fuera.

Soy hija de la pareja de asesinos más conocida y temida en todo el mundo, nadie se atreve siquiera a pronunciar mi apellido, porque Blame... siempre ha significado problemas.

Desafortunadamente, mis padres murieron hace un par de años en un accidente automovilístico, aunque yo sé que hay algo oculto detrás de esa historia, y algún día lo averiguaré aunque sea lo último que haga.

En realidad somos tres hijos: Hell, Karma y yo. Crecí aquí, en Italia junto con el hermano del medio, Hell, pero Karma creció en España junto a una familia que estoy segura de que la educaron bien, pero más tarde les contaré eso, ahora prefiero terminar de organizarlo todo.

En un par de horas sale mi vuelo hacia Madrid, y es lo que me tiene preocupada. En unas horas estaré en su tierra, pero no solo la de ella, sino la de los otros tres individuos, quienes son mejor no mencionar por ahora. No sé en qué momento decidí no esperar más e ir a buscarla, pero aquí estoy, mirando mi pasaporte como miran los universitarios su examen de admisión.

—¿Ya has terminado de empacar?—pregunta una voz a mi espalda.

Me doy la vuelta y me encuentro con esos ojos marrones que tantas noches me han consolado. Ya no es la misma de antes, por supuesto ninguno de nosotros lo es, pero a pesar de los años que la acompañan, sigue siendo igual de guapa, sigue llevando a su niña interior de la mano. Su cabello cada mes se vuelve más blanco y las bolsas bajo sus ojos crecen y se hacen más notables. Parece cansada de la vida, sin embargo, no lo está, y esa es una de las cosas que más admiro de ella.

Hace un par de años, después del accidente de mis padres me vi obligada a dejar a mi hermana menor lejos de mí y huir a un país extranjero, y ese país fue Italia. Aquí conocí a Ro, quien no dudó en acogernos a Hell y a mí, así que es como mi segunda madre, o abuela, como ella prefiere que la llame.

Ro es de origen español, pero cuando se casó con su marido, actualmente fallecido, Kyle, vinieron a vivir a Italia. Tuvieron una hija, la cual se casó con un italiano, pero desafortunadamente ella murió al traer al mundo a la menor de los LeBlanc, y sí, digo menor porque son tres nietos, como nosotros.

Adam, Lucien, y Avril LeBlanc. Los tres italianos, los tres diferentes, los tres víctimas de aquello... pero de eso ya hablaremos después. En conclusión, esta familia es especial, pero todavía no sé si es en el buen sentido o en el malo, supongo que lo averiguaremos ahora que pienso vivir en su misma ciudad.

—Solo necesito buscar una cosa más— le aseguro y ella me sonríe.

—¿Estás nerviosa?— pregunta sin dejar de mirarme.

¿Estoy nerviosa?

—Estoy aterrada.

Ro sonríe ante mi comentario, pero no dice nada más. Aprovecho su silencio para buscar lo único que queda en mi posesión que me mantiene conectada a mi familia. Abro el cajón de la mesilla de noche y tomo en mis manos el colgante que tiene grabado mi nombre, lo observo por un par de minutos y me lo coloco en el cuello. Volteo nuevamente hacia la anciana y suspiro.

Entre las dos siempre ha existido una enorme diferencia. Ro siempre está llena de luz, de esperanza, de vida, en cambio, yo soy solo oscuridad, sombras, mentiras, y todo gracias al legado familiar del cual no puedo safarme.

—Ya estoy lista— sentencio segura.

—¿Y Hell?— pregunta ella—. Sospecho que ya debe estar impaciente.

—Sí— sonrío—. Me va a esperar en el aeropuerto para recogerme. Hace mucho que no voy a Madrid, casi que puedo perderme.

—No se parece en nada a Italia, ¿eh?

—Tú no estarás allá.

Ro me dedica una de esas miradas que solo las madres saben dar y me sonríe de una forma tan cálida que hace que una lágrima ruede por mi mejilla.

—Shh, no llores, mi niña. Ya te hice una carta incluso, no me hagas decirlo todo ahora porque ayer me desvelé haciéndola.

Me río ante lo último y con el dorso de mi mano limpio las lágrimas rebeldes que salieron sin pedir permiso.

—¿Qué les diré cuando los vea?— pregunto—. Seguro ni se acuerdan de mí, y él nunca va a perdonarme.

—Seguro que sí, todavía tiene mis genes.

La anciana de ojos cansados se acerca hacia mí y deposita un beso en mi mejilla antes de entregarme la carta que escribió en la oscuridad de la noche anterior, y se marcha tras ese simple acto. No tiene ni idea de lo que me cuesta alejarme de ella, pero necesito enmendar el error que cometí hace años cuando abandoné a esa bebé en la puerta 522, necesito recuperar a mi hermana, solo espero que Ro siga en esta vida cuando lo consiga.

Con un nudo en la garganta guardo la carta que me dio en un bolsillo de la maleta y cierro la puerta de la habitación para después marcharme hacia mi destino, deseando con todo mi corazón que el juego entre dioses y mortales no sea el primero en recibirme.

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Nota de la autora: Hola, chimichurriiiiissssssss. Perdón por la espera, de todo corazón pero estoy muy liada con la escuela. Seguramente pensarán que este capítulo fue aburrido y de mucha palabrería, pero es que toda esa introducción es muy necesaria para las cosas que van a pasar, así que tengan paciencia, les prometo que les va a gustar.

Ahora... ¡¡¡¡RO SALE, RO SALE, RO SALEEEEEE!!!!!! ¿¡Se acuerdan de Ro y de Kyle!? Por supuesto el que solo ha leído este libro no va a tener ni la más remota idea de qué estoy hablando, pero Ro es un personaje muy querido por mí.

En fin, no me extiendo más, espero que les haya gustado el capítulo y que me tengan paciencia porque las cosas buenas comienzan cuando Destiny llega a MADRID 😎🖤

Déjenme saber qué les pareció el capítulo y si tienen ya alguna sospecha sobre lo que hay entre Destiny y los LeBlanc... y por qué Des abandonó a Karma...

Los amo y los leo, chimichurris 🧡☕

Amor Imprudente (Blame II) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora