Pueblo Yiling

1 : Un Desastre

Notas del autor:

Elaboré la mayor parte de la trama en mi cabeza y la mayor parte la capturé digitalmente. La importancia de una familia encontrada y la salud mental son temas clave.

--------------

"¿¿Por qué eres así??" ladra Jiang Cheng desde la pantalla, al ver cómo una bolsa de café le explota en la cara a Wei Ying cuando éste ejerce demasiada fuerza al intentar abrirla. Los finos granos llueven sobre Wei Ying, los mostradores y el suelo, como nieve negra.

Sin inmutarse, Wei Ying vierte los granos de café que quedan en el fondo de la diezmada bolsa en la cafetera, y pulsa el botón de preparación con un suspiro de alivio. Mientras escucha el mágico sonido de su café haciéndose, apoya la cabeza en su brazo y mira la pantalla de su portátil. "Didi, ¿por qué eres así? Sabes que no tiene sentido que me llames antes del mediodía, es un castigo cruel e inusual para los dos". Los ojos de Wei Ying comienzan a cerrarse mientras murmura su respuesta.

"¡Es esto o hacer una visita a domicilio, ya que respondes selectivamente a los textos y correos electrónicos!" El gruñido de Jiang Cheng hace sonreír a Wei Ying, echando leña al fuego de su frustración. "¡En serio! Despierta, imbécil. ¿¡Recibiste la invitación o no!?"

Wei Ying se mueve para verter el espeso líquido negro en su taza favorita, declarando: "¡Salva un caballo, monta un vaquero!" Solo después de consumir la mitad de la taza mira a su hermano a los ojos: "Sí".

"¡No me hagas ir para allá y romperte las piernas! Sabes que se espera que hagas una aparición, ¿por qué no respondiste?" Jiang Cheng fluctúa entre un gemido y un gruñido, consciente de que carece de poder para doblegar a su hermano, apenas mayor, a su voluntad, lo que lo obliga a sacar la gran pistola. "Yanli quiere saber si su hermano pequeño viene a celebrar su debut culinario".

Los ojos de Wei Ying se abren de par en par antes de estrecharse de forma acusadora: "Eres malvado. Tengo un compromiso conflictivo, si quieres saberlo, pero por Yanli encontraré la forma de visitarla".

Jiang Cheng volvió a ladrar: "¡Qué tipo de compromiso es más importante que tu familia! Te dije que te alejaras de las malas relaciones públicas, ¡coquetear con esos mítines públicos es pedir que te explote una bomba en la cara!"

La respuesta de Wei Ying es clara, mientras cierra en silencio la tapa de su portátil, negándose a recorrer ese camino, pues sabe que solo conduce a la tristeza y al dolor. Apaga las luces y vuelve a su cama, cayendo de bruces sobre las almohadas y las sábanas enredadas.

Horas más tarde, a la una, se despierta con el sonido de la música a todo volumen que suena en su sala. Entra a trompicones en el espacio, ofreciendo una mueca de culpabilidad cuando descubre a Wen Ning limpiando el desastre de su cocina. Acepta agradecido la taza de café recién hecho, antes de desplomarse en la barra. "Lo siento, Wen Ning, fue una batalla feroz pero al final perdí".

"¿Por qué tan temprano?" Continúa limpiando mientras recompone el mundo de Wei Ying.

Un fuerte gemido acompaña su respuesta, "¿Por qué más? Mi hermano exige que asista a lo del próximo aniversario de la empresa".

"Programé que estuvieras ahí para la presentación de la última obra maestra de tu hermana, antes de hacer una salida rápida para la reunión del comité de planificación. Voy a reservar tu asistencia hoy, enviaré tu respuesta a Yanli directamente". Wen Ning está muy familiarizado con la política de la familia Jiang.

Rodeando el cuello del otro hombre con sus brazos, lo abraza como un koala: "¿Por qué eres tan bueno conmigo?"

Wen Ning se mantiene pacientemente de pie mientras Wei Ying se cuelga de él: "Mi hermana me asusta, es mi trabajo a tiempo completo mantenerte produciendo poesía conmovedora y tramas que buscan el alma".

Se desplaza para desparramarse en su sofá, Wei Ying toma un diario para dárselo a Wen Ning, "Un trozo de mi alma, la próxima entrega de Sanren para apaciguar la ira de mi familia, el pago de una deuda sin fin".

Pasando por alto el tono dramático, Wen Ning se acomoda en el sillón junto a Wei Ying. Abriendo el diario para disfrutar de los últimos poemas de su amigo, publicados bajo el seudónimo en honor a su difunta madre, le indica: "La agenda de hoy es presentar trabajos artísticos, consumir fideos y una prueba en el sastre".

Mientras Wen Ning lee, Wei Ying esboza la última aventura de su álter ego, un querido y retorcido chico que está a punto de empezar su primer año de universidad. Reflexionando sobre su propia experiencia, se estremece al recordar su torpeza al tratar de equilibrar su verdadera naturaleza, las expectativas familiares y las presiones de la universidad. Ninguna cantidad de dinero podría hacerlo retroceder en el tiempo y revivir esos primeros años. El poder de su serie de novelas gráficas es que puede reescribir su historia, con la esperanza de ofrecer a los jóvenes de hoy una luz en la oscuridad.

"La hora de los fideos", afirma Wen Ning, "Sanren es temperamental pero conmovedor, estoy seguro de que los fans agradecerán la nueva obra".

Wei Ying no ve la necesidad de una respuesta, no le importa expresarse utilizando la poesía, es el intercambio mercenario de sus palabras por la aprobación de la familia lo que lo deja vacío. ¿Cómo será ser suficiente? ¿Qué se siente al tener valor tal y como se es, sin engaños ni alteraciones, encontrando apoyo y amor sin condiciones? Estas son las preguntas que explora en sus novelas gráficas, la lucha que libra su álter ego en cada edición.

****