18: Arrepentimiento

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Lan Zhan identifica el sentimiento persistente de que algo no está bien, es el arrepentimiento. Se arrepiente de haber dejado pasar la oportunidad de conocer a Wei Ying, la versión honesta y animada del hombre. Volver al silencio de su apartamento después del evento publicitario fue como ver una película en color desvanecerse en blanco y negro. No hay nada malo en su vida, pero tampoco hay nada bueno.

Quiere conocer todas las voces de Wei Ying, investigar las profundidades de su alma. Quiere que Wei Ying lo ayude a encontrar sus propias voces, más allá del mundo seguro que siempre habitó. Se arrepiente de no haber reconocido la importancia del momento, de las honestas palabras de Wei Ying ocultas en sus bromas. Está decidido a evitar nuevos arrepentimientos, está más decidido que nunca a conseguir el acceso a la poesía de Sanren para su documental. Las palabras de Wei Ying. Es imposible olvidar el momento en que Wei Ying se presentó como el autor favorito de Lan Zhan, el poeta que articula las emociones que Lan Zhan no puede describir.

Envió su propuesta a Luo Qingyang esbozando el proyecto de documental y la visión que tiene de utilizar la poesía de Sanren como audio. Incluye la oferta de donar todos los beneficios a Pueblo Yiling, aunque no puede imaginar cuál será la respuesta de Wei Ying. El primer contacto que recibe es un paquete que contiene la nueva edición de la novela gráfica y el libro de acompañamiento de la poesía de Sanren. Se acomoda en su sofá, dedicado a leer ambos para el final del día, curioso por experimentar tan extraño acoplamiento.

No está preparado para el efecto de ambos libros en sus emociones. La trama de la novela gráfica sobre un adolescente LGBT que trata de navegar por su primer año de universidad resucita recuerdos que creía desaparecidos. La batalla por considerarse digno es mucho más difícil que aprender a usar las reglas para negarse a sí mismo. El arte de Wei Ying tiene la capacidad de transmitir sentimientos, las palabras que regala a su protagonista hacen rebotar esos sentimientos en el corazón del lector. Es la primera novela gráfica que Lan Zhan lee en su totalidad, y ya encargó la colección completa en Amazon. Se toma un descanso para el té antes de sumergirse en el volumen de poesía, temeroso de lo que hay entre las líneas.

Termina antes de empezar, una vez que descubre la sencilla dedicatoria, "a un hermoso chico", cierra el libro. No es casualidad que este volumen haya sido escrito recientemente y que ese sea el nombre que Wei Ying le dio a su plan para distraer a Lan Zhan. Tomando un muy necesario descanso, Lan Zhan prepara su cena, escucha música relajante y prepara una nueva tetera. Con renovada intención, se acomoda en su sofá y comienza a leer. Al final, se siente iluminado. Se arrepiente de haber causado dolor a Wei Ying, se arrepiente de que sus acciones hayan desencadenado una espiral mental para Wei Ying. La poesía es tan bella como el poeta, una digna compañera del arte de Wei Ying, con la esperanza de que sea una herramienta que ayude a los jóvenes con problemas a expresarse.

Lan Zhan sabe ahora que se esconde detrás de su estructura, en lugar de aprender a establecer el suficiente orden dentro del caos para coexistir. Lamenta que su estilo de vida haya impedido que experimente todo lo que la vida puede ofrecer. Su casa es demasiado tranquila, se imagina cómo se sentiría compartiendo su espacio con alguien, una pareja. Es un concepto extraño, siempre mantuvo su liberación física temporal de su vida cotidiana a largo plazo. Se imagina que con la persona adecuada puede ser satisfactorio, lamenta haberse alejado de la persona adecuada por razones equivocadas.

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