Quédate... - Ace x Sanji -

Ocho

-¡Y me besó!

Era de noche, ese mismo día en el que Sanji había conversado con Ace y habían terminado en un dulce beso como postre. El rubio estaba con Usopp quien deseaba dormir pero escuchaba a su amigo relatar tan emocionado que no podía decirle que le contará otro día.

-Espera... Me perdí, ¿No que no te gustaba? - Usopp ladeo la cabeza.

-Bueno... Ya lo acepté. - Dijo mordiendo su labio el cocinero. - Es muy dulce y es atractivo... Me ha empezado a gustar un poco... Solo digo que podría ser que le de una oportunidad...

-Me alegra que por fin te dieras cuenta. - Usopp sonrió frotando sus ojos. - ¿Qué tal estuvo el beso?

-Genial. - Sonrió Sanji sonrojándose un poquito.-Es muy dulce hasta para eso. - Suspiró enamoradizo. - Ahora que me gusta es mas fácil mantenerlo aquí para que no muera, ya tengo otro motivo además de Luffy.

-Eso es genial. - Usopp sonrió. - ¿Todos los problemas se fueron, no?

-Me encantaría que fuera así, pero aún siento algo de culpa por como lo trate inicialmente... Y además me da mucha vergüenza cuando estoy con él, Usopp... Somos hombres, me apena admitir que hay dudas en mi sexualidad...

-Ya veo... Así que seguiremos teniendo estas charlas nocturnas... - Dijo lo último soltando una lagrimitas y sonriendo. - Pero relájate, tu lo has dicho, Ace es un joven muy tierno, seguro que te ayuda a sentirte tranquilo contigo, con él y con su relación.

-Aún no tenemos una de esas. - Sanji frotó su nuca.

-Oh, pero la tendrán. - Afirmó Usopp. - Pido padrino de boda. - Y se dio la vuelta para poder dormir.

-Jeh, idiota...-Sanji sonrió por su estúpido amigo que estaba ahí como siempre, en las buenas y en las malas... Se dio la vuelta también. - Pero por ahora debes mantenerlo en secreto... Temo como lo tomarán Luffy y los demás.

-Trato, ahora déjame dormir. 

Y tras una risa suave de Sanji los dos se durmieron.

* * *

-¿Por qué tanto escándalo?  - Un joven de pecas frotaba sus ojos mientras bostezaba, salía del comedor del Going Merry, se había quedado dormido en el desayuno y ahora había despertado por todo el ruido que hacía la tripulación en cubierta.

-¡Ace! - A Sanji le brillaron los ojos al verlo, su corazón latió rápido. Se aproximó a él. - Te guardé tu desayuno y bocadillo para cuando despertaras, ¿Dormiste bien ? - Sonrió dulce que Ace también sonrió, le encantaba ese chico que ahora era tan tierno con él, nada comparado con el joven que lo evitaba... Quizás estaba raro porque no sabía cómo portarse antes.

-Muchas gracias Sanji-San. - Dijo el pecoso frotando su nuca. - Si, dormí bastante bien. Lamento causar problemas con eso de dormirme en medio de la comida...

-¡No es ningún problema! Guardar tu comida es algo fácil, el problema es Luffy que se come todo. - Vio mal al chiquillo que sonreía ampliamente y Ace rio.

-¡Ace-San, Onii-San! ¡Por favor, haz algo con Luffy! - Nami llegó a abrazar a Ace suplicando.

El pecoso sonrió por cómo había sido llamado, todos lo veían como un hermano mayor por ser el hermano de Luffy, era divertido. Nami en verdad deseaba que Ace pudiera convencer a Luffy de cambiar de opinión, por ello se aferraba suplicante al torso del mayor. Pero Sanji... Bueno, el rubio no lo tomaba bien; quería a Nami, la adoraba, pero Ace debía ser suyo, le ponía un poco celoso que ella lo abrazara...

-Jeje, vale, vale, Nami-San, dime qué hizo para que lo arregle. - Sonrió acariciando la cabellera naranja de la joven. Escucho a Sanji gruñir y levantó una ceja imaginando que pensaba su chico.