Capitulo 42

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Se desperto con el trinar de los pájaros, nada raro, el parque a unas cuadras tenía una gran variedad de pájaros madrugadores

Levantarse por otro lado podía ser complicado, entre  el peso de sus acciones ayer y la comodidad de la cama, no quería moverse

Una mirada al reloj le confirmó que tenía el tiempo justo (clásico) si ganas se incorporó hasta que sus pies tocaron el suelo, tomó su estuché y colocó los tapones, cuando quiso tomar el de lentes de contacto dudo, sus ojos no estaban sensibles pero la incomodidad seguía ahí, ¿podrá aguantar los de contacto?

Negó con la cabeza

Tomó el estuche más grande y sacó sus lentes de armazón

Un día con los lentes normales no sería malo

Alistar su mochila y ponerse el uniforme no tomó mucho tiempo

Colocó la gargantilla en su lugar y bajo las escaleras para tomar un desayuno antes de irse en su precio...sa....

Se congelo
.....No
....no
....no podía ser

Palpó sus bolsillo en busca de las familiares llaves
....
....
Nada

Solo basurillas

¡No tenía sus llaves!

¡Había olvidado a hina!

Bajo corriendo, ¡tenía que llegar a la escuela!

Pero chocar con alguien no estaba en sus planes

-¡guau! Despacio pequeño oyente- Hizashi lo saludó- ¿que te tiene tan apurado en la mañana?-

Quería correr, pero dejar a Hizashi sin contestar era imposible

-olvide a hina- bajo la cabeza avergonzado, su mano automáticamente fue a su cuello -tengo que ir a por ella-

-¿tu motocicleta?-

Asintió

Una palmada en la cabeza acompañado de una risa lo confundió

¿Que era tan gracioso?

"Sorpresa"

¿Tenían una sorpresa?

¿Por fin se habían artado de la motocicleta y la llevaron al chatarrero?

-nezu la envió esta mañana, al parecer "no se atrevería a privarte de los pequeños placeres de la vida"- le sonrió - haci que no te preocupes y vente a desayunar-

Su preciosa estaba bien

Hina.... No estaba perdida

Asintió tontamente, el alivio lo inundaba,

No la había abandonado

Llegar a la mesa flotando de alivio fue esclarecedor, se sentó sin problema frente a un típico desayuno

-come-Aizawa lo apunto con su taza - tienes el tiempo justo-

Se encogió de hombros

-lo se-

Aizawa le lanzó una mirada

-espero que no corras como loco-

Eso lo ofendió

-nunca corro como loco-

-y yo soy la reina de Inglaterra, ten cuidado-

-seeeee-

Comieron en un silencio comodo
Se despidió de ellos y salió con la mochila a cuestas

Admiro a hina un momento susurrándole promesas una tarde de revisiones por su error

buscando la libertadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora