Narrador omniciente:
Con el tiempo Soobin y Yeonjun crecieron mucho; sus padres estaban asombrados del estirón que habían pegado, aún así Soobin era un poco más alto que su Hyung, llegando a medir 1.85 metros y su amigo 1.81.
Pero el cambio de estatura en los jóvenes adolescentes no fue lo único nuevo en sus vidas; también ahora tenían dos amigos nuevos, apesar de los celos característicos del pelinegro por su amigo, llegó a tomarles cariño también, sobre todo a Kai, quien le daba ternura por ser el maknae del grupo y sentía que debía protegerlo de alguna manera. Pero con él pasar de los años, Soobin tuvo que enfrentarse a una difícil decisión, una que lo descolocaba totalmente: al cumplir los 18 años debía convertirse en vampiro. El joven, paso toda su vida siendo un humano normal, oh al menos eso era lo que el creía.
Los padres de Soobin eran vampiros, por lo que él había nacido siendo un poco diferente a las personas comunes y corrientes, pero sus padres habían decidido no presentarlo como un vampiro oficialmente hasta que no cumpliera los 18 años; eso significaría que esos deseos de probar sangre humana y la fuerza sobrenatural que tenían, junto con él detenimiento del envejecimiento comenzarían a apartir de esa edad; pero él pelinegro no quería ser un ser malvado tan pronto, les pidió a sus padres el favor de que esperarán a que el cumpliera 20 años de edad, esa era la edad justa para él para adquirir tal responsabilidad. Así que, sus padres tuvieron consideración con él y le dijeron que esperarian dos años más hasta que tuviera 20.
Así fue, el tiempo siguió pasando igual de rápido que siempre; el alto no quería convertirse en realidad en alguien así, no le agradaba la idea de dejar de ser un inofensivo humano para pasar a ser una especie de animal con instintos asesinos, temía por la seguridad de las personas que lo rodeaban, dudaba de lo que él pudiera llegar hacer después de eso, ¿que les pasaría a sus amigos por su culpa?, ¿Que sería capaz de hacer?.
¿lastimaria a Yeonjun?.
La situación no parecía ser nada fácil; sobre todo porque algunas cosas habian cambiado. el pelinegro había descubierto que sus sentimientos por su Hyung habían cambiado, que ya no lo veía como su mejor amigo de la infancia que lo protegía y estaba ahí para él; ahora era él quién queria estar ahí para él, quería ser el quién lo cuidara, quería ser el a quien su mayor necesitara, pero, no sólo quería estar ahí como su amigo. No. Soobin tenía planes mucho más personales con él, mucho más profundos e íntimos. Justo cuando noto las mariposas en su estómago cada vez que lo veía, justo cuando noto sus celos cada vez que este estaba cerca de alguien más, cuando noto que era tan malditamente egoísta cuando se trataba de él y que deseaba tener toda su atención y tiempo, fue entonces que su padre los había visto juntos a la salida de la universidad. Jamás había visto al amigo de su hijo.
- tienes que alejarte de él-. Le advirtió su padre mirándolo con sus severos ojos atraves del espejo retrovisor- no es seguro para él que te tenga cerca- le aclaró, Soobin lo miro desde el asiento trasero del auto con él seño fruncido, su madre estaba más sería que de costumbre y eso también le resultaba extrañó al joven
- es mi amigo, jamás podría lastimarlo- les explico, no entendía porque de repente sus padres estaban actuando así
- es un humano, es peligroso para él tenerte cerca- insistió está vez su mamá-. Quizás ahora no le hagas nada, pero en cuanto cumplas los veinte años y obtengas los instintos de un vampiro, todo va ser muy diferente- le explicó mirándolo con preocupación desde el asiento de copiloto
- lo dudo- le contradijo
- hijo, escuchanos por favor- su papá intervino-. Entiende, no deberías relacionarte con humanos- le advirtió
