-- Todos se encontraban bien, felices de que estaban a salvo, felices porque su amigo aún seguía convida y aquella deidad había sido derrotada para siempre, Sanemi se le había dibujado una sonrisa para luego irse ya que recordó a su compañero caído --
- ¡Gyomei! diria Sanemi preocupado dándose la vuelta y viendo en dirección a la Aldea
- ¿Qué sucede con el? diria Tokito
- Pero que estúpido fui diria Artorias, Ciaran por favor debes curarlo está gravemente Herido
- Debemos apurarnos la ultima vez que lo vi estaba demasiado débil, no creo que resista más diria Sanemi
- Sanemi correría hacia el bosque donde dejo al Pilar de la Roca siendo seguido por los demás en unos minutos los presentes frenarían en seco ya que su compañero paro de repente
- ¿Qué sucede Sanemi? diria Artorias
- La ultima vez que lo vi fue aquí, aquí lo dejé diria el Pilar del Viento mirando que su compañero no se encontraba reposado en el árbol, ¿A dónde se fue?
- Artorias se acercaría al lugar el cual para su sorpresa había demasiada sangre, pero vio a un costado como un rastro se iba por la derecha, Alguien se lo llevo diria Artorias serio
- ¿Cómo? diria Sanemi
- Hay un rastro de sangre, pero eso no es algo de lo que tengamos que preocuparnos, Himejima al parecer estaba perdiendo demasiada sangre
- Espera Artorias, dices que puede estar muerto diria Mitsuri preocupada
- No, pero no descarto la idea, si aún no murió debe estar a punto ahora tenemos que irnos antes de que lleguemos demasiado tarde diria Artorias el cual seguiría el rastro de sangre seguido por el grupo de cazadores
- Luego de unos minutos llegarían a una pequeña casa, donde se podían escuchar las voces de dos hombres
- Haganezuka no creo que sobreviva, mira sus heridas decía una voz masculina, no creo que podamos salvarlo
- Pero en eso las puertas se abrirían viendo a Artorias con los demás cazadores de Demonios
- ¡Sir Artorias! diria sorprendido Haganezuka, me alegra que todos estén bien, pensé que estábamos perdidos cuando vi a ese ser monstruoso pensé que todos moriríamos, pero les tengo una mala noticia, Su amigo el Pilar de la Roca esta muy mal herido, no creo que sobreviva diria el herrero dejando ver al pilar que estaba recostado en el piso pálido como un cadáver, con los ojos cerrados y con sudor ya que parecía que le había agarrado fiebre por su estado
- Maestro.. diria Genya que se ponía a un lado y agarraba su mano mientras una mirada triste aparecía
- Pupilo eres tú.. veo que sobreviviste me alegra saber eso
- Oye estúpido te dije que no murieras decía Sanemi poniéndose a un costado desesperado
- Ja... así que derrotaron a la deidad diria Gyomei con una pequeña sonrisa
- Si diria Artorias acercándose, pero no te preocupes tus días como guerrero aun no terminan
- Ciaran se acercaría para decir Te pondrás bien Himejima, así quitándole la manta que lo cubría para inspeccionar donde estaba vendado; sus heridas son profundas confesaría Ciaran, además tiene quemaduras de tercer grado pero no se preocupen el estará bien, ahora déjenme lugar así todos apartándose y la mujer sacar su talismán así empezando a recitar un canto apareciendo un circulo dorado con runas los dos herreros se asombrarían pero para los demás ya era algo común pero aun así asombroso ya que era algo que no se veía todos los días
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Artorias en Kimetsu no Yaiba
FanfictionEl joven Artorias es un extranjero el cual aprendió las artes de la lucha con espada desde muy pequeño El propio rey Gwyn le enseñó algunos trucos de cómo asestar los mejores golpes Su disciplina, y arduo entrenamiento le llevaron a convertirse no s...