❛Me encanta el olor a gasolina,
prendó los cerillos para saborear el calor.
Siempre me ha gustado jugar con juego❜
...
Donde Alex Summers llega a Midtown
y se cruza con Peter Parker, un chico
extraño que no para de aparecer a
cual...
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LA MANERA EN QUE SU PIERNA TIEMBLA contra la alfombra de la oficina del director se hace molesta y le empieza a doler el pie en el proceso, no le gusta la escuela, para nada y mucho menos las familias que lo obligan a ir a una por el acuerdo legal. Continua esperando que el hombre termine de leer por tercera vez su expediente, seguro que lleva en esa silla desde el inicio de las clases hasta la segunda campana.
Gira la cabeza hacía los reconocimientos colgados con orgullo en la pared, muy buenos para el sueldo que debe ganar el hombre, que está a una graduación estudiantil en cinco años de quedarse calvo.
Casca sus dedos de nuevo y recibe un gruñido del adulto, quien ya había dicho algo como "Hacer eso desgasta tus huesos".
—Alex Summers, entonces —baja su expediente por fin brindando un poco de alivio a su aburrimiento —. Midtown tiene cierta política con los nuevos ingresos, pero parece que cumples con todo. La señorita Tanner te dará tu horario en recepción, así que ve por el y no causes problemas, por favor.
Tenía una pequeña nota por peleas escolares en su expediente, en su defensa fue una provocación causada por otro estudiante y no por él.
Asintió con la cabeza poniéndose de pie a la par del hombre adulto. Alex era considerablemente más alto que el director.
—Bienvenido.
—Gracias —dijo de mala manera recogiendo sus cosas.
Se detuvo en la recepción, la mujer era joven, con risos castaños hasta los hombros y un maquillaje francés tal vez demasiado bien pulido para hacerlo ella misma todas las mañanas. Levanto la vista ante la presencia de Alex.
Esta era su quinta escuela en los últimos dos años. Varios hogares de acogida y varias salidas de ellos, los adultos querían tres cosas. Un niño, un chico que cargara su herencia o alguién a quien maltratar solo para obtener el dinero del estado por aceptar cuidarlo. La última pareja acabo dando declaraciones que los llevaron a ambos a un psiquiátrico.
Alex no era callado, ni se dejaba mangonear por gente, mucho menos los adultos. La mujer de la casa quiso ponerle la mano encima, fue cuestión de segundos que una descarga de energía la empujo contra la cocina, dejando una quemadura profunda en su brazo. Alex se sintió casi culpable cuando la escucho llorando y chillando por ayuda mientras las llamas que quedaron del ataque se esparcían por la casa.
Nació con algo en sus genes, una anomalía sobre humana. Anillos de energía salían de su cuerpo, que entraban en combustión al entrar en contacto con cualquier cosa. No lo controlaba, los anillos siempre iban a distintas direcciones y en el último caso, alguién terminaba en el hospital. Preferiría estar en aislamiento, sin embargo, luego de lo sucedido con los acuerdos sokovia y los problemas legales de los vengadores lo hicieron cambiar de opinión. Lo diseccionarían antes de buscar ayudarlo. Era mejor mantenerlo en secreto.
