Te esperaré. [Luffy x tu].

⚓Capítulo III⚓

Siete años después.

Me senté a descansar, la transpiración recorría todo mi rostro, el calor era insoportable en esta época.

Estar en la cocina era muy pesado pero la comida era más importante, además había invitado a Ace y Luffy a comer y conociendolos comeran todo. En estos momentos compadezco a Dadan.

Rato después había terminado de cocinar así que me fui a dar una ducha de agua fría, salí después de tomarme mi tiempo y miré mi cuerpo en el espejo.

Me da un poco de vergüenza, tenía unas cuantas cicatrices por ahí, me cuerpo no era el más lindo ni el mejor pero me gusta, obviamente no podía usar traje de baño libremente ya que daría de que hablar. Sacudió mi cabeza, por qué estoy pensando en eso ahora.

Seque mi pelo y me puse un vestido de mangas larga simple y salí de mi habitación. Mire la hora y ya casi era tiempo, saque los platos y ordené para que todo este presentable.

Tocaron la puerta, miré el reflejo en la ventana y abri la puerta, frente a ella estaban unos muy golpeados Ace y Luffy y un sonriente Garp, mi cara se iluminó y los hice pasar.

—Abuelo, no me dijiste que venías— dije sorprendida mientras buscaba otro plato y cubiertos.

—Lo siento, quería darles una sorpresa— dijo en tono jovial.

—Y si que nos la diste— dije mirando al par que lo miraba con ganas de matarlo.

El solo sonro y se sentó en la mesa, de su capa de Marine sacó un papel, yo negué repentinamente —Ya te dije que no lo necesito— dije en tono de reproche.

—Bwahahahaha. Tonterías, es lo menos que puedo hacer ya que cuidas a estos tontos cuando no estoy—.

"Diría que es alreves pero es lindo que piense eso". Yo sonreí servi la cena. Sus caras al probar la carne me decía que estaba deliciosa.

—¿Y _____-chan hay algún chico que te interese?— pregunto divertido. Escupi el jugo que estaba tomando, Ace se ahogó con la carne mientras se golpeaba el pecho y Luffy siguio comiendo de todo lo que había.

—¡¡Abuelo!!— grite con vergüenza —No me gusta nadie, eso es un impedimento para mi sueño—.

Hablamos un poco de todo y de cuando volvería a trabajar, para mi suerte y mala para el par de hermano, esta vez se quedaría una semana entera, ya que pronto es mi cumpleaños y quiere pasarlo conmigo.

—¿Puedes enseñarme a defenderme?— pregunte una vez que los hermanos se durmieron.

—Hmh ¿hay alguien que te está molestando?— preguntó serio. 

—No, no, Ace y Luffy se encargan de que es no pase— aclare rápidamente —Es solo que ellos no van a estar para siempre conmigo y quiero poder defenderme si es que algo pasa—.

—Oh, si ese es el caso ¿qué te parece empezar mañana?— mi rostro se iluminó y asentí con vehemencia.

Al día siguiente me levanté temprano por la emoción, estaba terminando de comer unas bolas de arroz que había hecho la noche anterior cuando mi puerta es tocada, me levanto y la abro, del otro lado esta Garp junto a unos dormidos Ace y Luffy.

Sonreí y salí junto a ellos, llegamos a la playa, para despertarlos los golpeó con su puño del amor, ambos gritaron y se lanzaron con ganas de golpearlo.

—Lo que te voy a enseñar tienes que prometer que lo usaras solo y solo cuando de verdad lo necesites además de no mostrárselo a nadie— me dijo serio.

—¡Lo prometo!— dije decida. El me sonrió con ternura.

—Te voy a enseñar el Tekkai y el Shigan, son habilidades específicas de marines—. Me explico la teoría y lo básico, también que tengo que entrenar todos los días a partir de hoy para mejorar.