De un día para otro tienes un nuevo hermanastro. ¿Qué ocurre cuando no es tan inocente como parece?
Taehyung lo tiene difícil tanto con tu novio Yoongi, como con tu protector mejor amigo Jungkook, interponiéndose en su camino.
¿Pero y qué hay del re...
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[ TAEHYUNG ]
Taehyung no sabía como había sobrevivido estos últimos días, el beso que os disteis la primera noche que os conocisteis fue el último contacto físico que tuvo contigo. Esta vez, quería sacar algo más, algo que pudiera darle una descarga de adrenalina para el resto de la semana.
Inclinándose más, te pasó la lengua por los labios, a lo que tú te viste forzada a separarlos. Mientras ladeaba la cabeza hacia el otro lado, rozó dulcemente sus labios contra los tuyos para después unirlos en un beso y acariciar tu lengua con la suya.
Antes de que pudiera empezar a liarse contigo, sonó el timbre, provocando que te pusieras de rodillas, con las mejillas sonrosadas, y te cubrieras la boca con las manos.
Taehyung se incorporó, doblando la pierna y descansando el brazo sobre la rodilla. Apretó los labios en un amago de sonrisa e inclinó la cabeza en dirección a la puerta.
—¿Vas a abrir?
Antes de que pudieras preguntarle sobre el beso, el timbre empezó a sonar frenéticamente. Taehyung movió la cabeza mientras te observaba correr para abrir la puerta, echó la cabeza hacia atrás para ver a un Jungkook aterrorizado en la entrada. Se rio por lo bajo, conocedor del motivo por el que el chico estaba igual de blanco que un fantasma.
—¡Hay un perro suelto ahí fuera! —Te rozó al pasar por tu lado y corrió hacia el interior, agarrando su bolsa del gimnasio firmemente. Una vez dentro hizo contacto visual con Taehyung y ambos se miraron fijamente por un largo minuto, hasta que llegaste al lado de Jungkook. Taehyung sonrió internamente mientras miraba inocentemente a Jungkook.
—Ah, ese es Kongi Kong —Taehyung cogió otra barra de chocolate y la abrió para poder deleitarse con ella.
Con los ojos como platos, todavía al lado de Jungkook, pestañeaste.
—¿Kongi Kong?
Taehyung asintió y se incorporó aún más.
—Kongi es el perro de la vecina. Estuve jugando con él y pensaba que lo había encerrado, pero... supongo que se ha salido.
Taehyung desvió la mirada hacia Jungkook y mientras levantaba los brazos, se encogió de hombros.
—Lo siento~
Convencer a Jungkook siempre era mucho más difícil que convencerte a ti. Apretó la mandíbula y murmuró algo rápido entre dientes.
—NiñatoDeMierda.
Habiendo escuchado cada palabra, Taehyung se mordió el labio inferior y reprimió una gran carcajada. Se levantó sonriente y dijo:
—Supongo que se lo tendré que decir a la vecina.
Empezó a salir caminando del salón mientras canturreaba algo, pero antes de que se fuera completamente, te agarró de la muñeca y te acercó a él de un tirón. Usó su hombro como barrera para que Jungkook no escuchará lo que te iba a susurrar mientras se inclinaba más cerca.
