𝑷𝒂𝒔 𝒅𝒆 𝑫𝒆𝒖𝒙

Noche de apertura - parte 1

─────24 horas para el estreno─────

POV Nathalie

Todavía no puedo creerlo.

En 24 horas el cascanueces que llevamos preparando la mitad del año escolar finalmente saldrá a la luz; si bien esto no es un parto, se asemeja a ello.

Volver a participar de un gran montaje como este, independiente de la diferencia de roles, significaba lo mismo que cuando era étoile. La alegría que siento era insuperable... excepto, que esa felicidad si podía ser mayor cuando pensaba en el debut de mis bailarines.

Las horas críticas comienzan, y solo puedo imaginar lo nerviosos que deben estar. Tanto Marinette como Adrien han trabajado tan duro por esto que se merecen mucho y mas.

Solo 6 horas atrás mi pequeña bailarina era un nudo de nervios en el ensayo general, pude sentirlo, ese miedo al fracaso, su tierno rostro contraído ante la perturbadora mirada del director de la ópera sobre ella.

Flashback

Los aplausos eran de victoria tras finalizar el ultimo ensayo, la alegría persistente que emanaba desde cada bailarín hasta la producción se sentían como años no lograba enternecer el ánima de mi interior.

Mire alrededor captando este momento para la eternidad, sin embargo, detuve a medio camino mi recorrido cuando una cara destacaba dentro de tanta felicidad. La lúgubre máscara de una niña de 8 años que debiese estar contenta por su perfecta presentación.

- ¿Qué sucede Marinette? - pregunte al llegar donde ella pero no respondió - ¿Marinette?

Tan pronto toque su hombro dio un leve salto, sus ojos abiertos de miedo se giraron para verme, trayendo consigo además un imperceptible deseo de ayuda.

- Maître, disculpe, no la escuche llegar - rápidamente note como su postura adoptaba un posición mas estable, su columna se erguía demasiado alto y sus manos dejaron de hacer ese repetitivo gesto entre ellas.

- No te preocupes - le sonreí mientras bajaba para estar a su altura - ¿Te encuentras bien? No te veo muy contenta.

- No me malentienda, si estoy feliz, muy feliz - por un segundo vi como sus labios se curvaban en una perfecta "U" - Y siempre estaré agradecida con usted por esta oportunidad, pero...-

Hizo una pausa, tomando al aire que al parecer no me había dado cuenta que le faltaba mientras observaba su mirada apagarse, como me dolía verla así.

- Tengo miedo - me dijo.

Miedo.

Como no lo pensé antes, por supuesto que ella tendría miedo. A veces la vida adulta puede ser tan abrumadora y absorbente a la vez que solemos olvidar la experiencia de vida adquirida con los años donde las primeras veces quedan marcadas en el infinito.

- Siento que nada de lo que hice hoy fue perfecto. Y todo debe ser perfecto para mañana, odiaría fracasar - noté que se esforzaba porque la voz no se le quebrara.

- Ey, mírame.

Logre que levantara su cabeza pero no por mucho tiempo antes que la desviara a un costado.

- Y se que me dirá que lo hice perfecto como todos aquí lo han hecho pero es que...-

- Marinette - trate de intervenir.

- ... solo yo...-

- Marinette.

- En verdad no lo siento así.

- Esta bien - con mi mano ahueque su mejilla captando su sorpresivo pero deprimido rostro - Esta bien tener miedo, es normal.

- ¿Enserio? - su voz estaba perdiendo compostura.