Sabores // Genya x Aoi

Carmesí

Los rayos del sol al amanecer les quemaban la cara. Sentían que no habían descansado por completo pero no se decían nada, sólo se sonreían mientras arreglaban sus cosas para irse.

— Lo lamento mucho— Dijo Giyuu apenado, levantando su futón para llevárselo a alguna de las esposas de Uzui— Por mi culpa están tan serios. No creí que fueran a hacer "eso" tan deprisa.

Aoi y Genya se avergonzaron y voltearon a ver a Tomioka

— ¡No íbamos a hacer eso!... O no sé— Genya se dio cuenta de que dejó salir sus verdaderos pensamientos. Se cubrió la cara con sus manos. Aoi se sorprendió por lo que había dicho Genya, él también esperaba algo más. Tenía que mantenerse recta para hacerlo ver como si fuera algo gracioso.

— ¿Qué dicen? Hay que apurarnos, ya deben estar todos comiendo y nosotros seguimos aquí. No es momento de bromas. No se preocupe Tomioka-sama, se ve que pido dormir mejor.— Genya notó por el nerviosismo de Aoi que ella tuvo que cambiar el tema por lo que él había dicho. Sonrió. Quizás pronto tendrían nuevamente una oportunidad.

En la puerta principal de las aguas termales de Uzui, Tanjiro convocó a sus amigos cercanos para invitarlos a pasar el festival de fuegos artificiales juntos, sería esa misma semana, el jueves. Todos estuvieron de acuerdo con notable alegría. 

Sanemi comenzó a darse cuenta de que su hermano lo jalaba a absolutamente todo lugar que lo invitaban y, así mismo, Sanemi llevaba a Genya. Dudó de si debería ir, el mismo caso se daba con Tomioka a quien invitaban porque estaba aparentemente solo.

— ¡¡Voy a gastar todo mi dinero en los juegos!! ¡¡Comeré de todo y ganaré muchas cosas!!— Gritó Inosuke con decisión levantando el puño hacía el cielo, el joven estridente lo sacó de sus pensamientos y supo cuál sería su función junto a Tomioka ese día.

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— ¡Te ves muy linda Nezuko! — Le dijo Aoi mientras la veían en el espejo

— Deberías peinarte así más seguido, para resaltar más tu belleza— Le acomodó un arreglo para el cabello Kanao

— Gracias por todo chicas, ustedes también se ven muy bonitas— Nezuko parecía nerviosa. Miró a Aoi — ¿Eh? ¿No te pondrás labial? 

— No lo sé — Se avergonzó

— ¡Pintate los labios!— Le insistió

— Es que… No sé me ven bien si los pinto, ya lo he visto— Bajó la mirada. Kanao se acercó y le comenzó a poner. Al principio mostró resistencia pero después cedió porque quería que la vieran y le dijeran si debía dejarlo.

— ¡Oh! — Las dos chicas se asombraron al ver a la ojiazul con el labial puesto

— Les dije que se me veía mal— Aoi se volteó hacia el espejo para quitarse la tinta pero Kanao y Nezuko la detuvieron.

— Ya es tarde, no hay tiempo para eso— Kanao la llevaba de la muñeca hacia la puerta 

— ¡Esperen! ¡Me lo tengo que quitar!

— Confía en nosotras, te queda muy bien Aoi— Le sonrió Nezuko. Ese gesto hizo que se tranquilizara ¿En verdad se veía bien? Aún lo dudaba un poco.

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Llegaron al templo donde estaban todos los puestos de comida y juegos. Se encontraron con los chicos quienes halagaron a todas por su belleza.

Aoi desviaba su mirada de la de Genya. Él sonrió un poco, pensó que quizás era por cómo se habían vestido esa vez, se veían distintos a como siempre y era algo incómodo. Era un caso similar el de Tanjiro y Kanao, quienes se veían más nerviosos hablando entre sí.