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Donde Sunoo es un porrista, un poco torpe fuera de las rutinas, amante de los chocolates y cosas femeninas.
y
Donde Ni-ki es el capitán del equipo de fútbol americano.
o donde un Ni-ki enamorado convence a Sunoo de fingir una rela...
Jay y Ni-ki estaban en la habitación del menor, al Riki hacer su vomito verbal lo único que se le ocurrió fue citar a Jay en su casa para tener un plan que no esté cegado por unas caderas anchas y unos ojos azules.
Ni-ki estaba incómodo en su habitación.
Claro que ha tenido fantasías como el omega.
Claro que su mente ha divagado de más y creando escenarios en que uno de ellos es el personaje principal.
Se siente avergonzado, pero no puede evitarlo, algo en Sunoo lo hace temblar y hace que su alfa lo quiera tener para él mismo.
Ni-ki se esfuerza demasiado para no ser un imbécil y seguirlo con la mirada cuando va pasando o embobarse con su aroma o incluso perderse en su suave voz.
—Tienes que decirle que se cancela el plan. — Jay estaba alterado y vió a Ni-ki de una forma decepcionada.
—¿Qué? —el alfa se levantó de la silla de su escritorio y se acercó a Jay.
—No.
—Ni-ki, ¿sabes que esto no es una comedia romántica y Sunoo se enamora de ti al final, verdad?
Ni-ki vió apenado a Jay. —¿Qué tal si me esfuerzo?
—Ni-ki, solamente tenías que ir a hablar con él y créeme que tu relación con él hubiese comenzado mejor. ¡Quieres que tu relación con él empiece como una mentira!
—¡Pero no quiero decepcionarlo! ¡tampoco quiero esperar más! —Ni-ki dijo exasperado. —¡Quiero tomar su mano, abrazarlo y besarlo, tal vez sea falso, pero quiero que seamos algo, que estemos juntos de una forma u otra! ¡y créeme que al final lograré que se enamore de mi!
Jay suspiró.
—Está bien, Ni-ki. Te ayudaré. —el alfa se acosto en la cama del menor boca abajo. — enserio a veces me sorprende tu vomito verbal, te ha llevado a muchas partes.
Era verdad, el vomito verbal de Ni-ki era un problema muy grande (en este caso no es tan malo el escenario), lo llevaba a tener que participar en eventos benéficos de la escuela, en citas aburridas y muchas veces lo ha llevado a tener momentos muy incómodos con maestros.
—¿Cuál es el plan? —Jay vió a Ni-ki.
—No lo sé, ¿ser encantador? —Jay rió.
—¿Sabes cuántos alfas son encantadores con Sunoo?
Ni-ki pasó sus manos por su rostro, frustrado.
—¡¿Qué más puedo hacer?!, ¿Cómo enamoraste a Jungwon?
—Jungwon y yo no estamos enamorados. — bufó el alfa con gracia. —Solo somos buenos amigos.
Ni-ki rió.
Los dos siguieron hablando de cosas triviales sin tocar el tema de Sunoo hasta el que celular del alfa empezó a sonar con la extraña canción de payphone de maroon 5 estilo timbre de celular.
—No puedo creer que pagaste 5 dólares por ese ringtone tan estúpido. —rió Jay.
—Maroon 5 es una buena banda, ¿okay? — rió el alfa y atendió la llamada del número desconocido.
—¿Aló?
—¿Ni-ki? hola, soy Sunoo. —claro que Ni-ki lo supo desde que dijo ese dulce y melodioso "¿Ni-ki?". sin pensarlo Riki colgó la llamada lanzando su celular a la cama, vió a Jay aterrado.
—Era Sunoo. —confesó y Jay lo vio confundido.
—¿Le colgaste?
—Me puse nervioso.
—¡Llámalo, idiota!
Ni-ki respiro y llamó al número de Sunoo.
—¿Ni-ki?
—Hola, Sunoo. Mi señal era muy mala y y-ya sabes... teléfonos. —la dulce risa del omega se escuchó del otro lado.
—Claro, claro. T-te llamaba para poder hablar de... ya sabes... oh dios qué vergúenza. —el omega se escuchaba preocupado. —De seguro ya no quieres hacer esto, soy patético.
La voz triste del omega preocupo a Ni-ki y salió al balcón a seguir con la llamada sin tener a Jay como un chismoso escuchándolos.
—Sunoo, te ayudaré, tal vez no somos los mejores amigos, pero quiero ser tu amigo. —El alfa sonrió. —Tú solo preocúpate en seguir siendo el mejor animador que tiene esa escuela y yo me encargare de lo demás.
—Gracias, Ni-ki.
Gracias a ti por hablar conmigo, pensó Ni-ki.
Los dos siguieron hablando de su plan y como harían que las cosas fueran naturales y sencillas.
Las elecciones de capitán de porristas serían en 3 meses por lo cual consideraron que la mejor idea sería que se les viera juntos durante unas semanas, Ni-ki haría un gesto romántico pidiéndolo salir y después salir como si fueran la pareja más adorable en este mundo.
—Haremos que el tonto de Beomgyu vomite brillantina por lo tiernos que vamos a ser.
Ni-ki rió por lo que dijo el omega. —haremos que vomiten arcoíris, Sunoo.
Ni-ki estaba decidido a conquistar a ese omega.
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