Estrategia

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Pov Lauren

Camila se va del despacho de reuniones, yo me sigo sentada pensando en todo esto.
Sin poder evitarlo, las dudas empiezan a venir a mi cabeza.
¿Cómo de cerca estaba Jack de nosotros?
¿Como sabía cuándo nos iríamos para atacar a tantas aldeas?
Y la más importante. ¿Cómo sabía cuáles eran los hombres que formaban parte del escuadrón de emergencia en caso de guerra?
Eso era imposible que lo supiese. Pocos lo sabían. Ese pensamiento no se va en ningún momento de mi cabeza, se queda alojado en ella en todo momento.

Petan a la puerta y por ella entra Normani.

N- Todos los aliados de las manadas están avisados, los que pueden vendrán y los que no, lo harán por videollamada, ya que saben que es importante y que si pierden esta reunión corren mucho riesgo de ser atacados de más gravedad. Se les informó sobre los últimos sucesos y las amenazas que recibió directamente la manada de Blue Moon. Están de acuerdo con trazar un plan nuevo- yo asiento- ¿Me envía donde será? -yo niego.

L- No sé dónde hacerlo todavía, estoy pensándolo, cuando lo sepa ya les aviso yo. Ya que no tengo mucho que hacer, debido a que liberé mi agenda. - Normani asiente y sale de la sala, me levanto suspirando y salgo de allí.

Me voy a la casa de mis padres, siempre que entro aquí es, como... Entrar en otro mundo diferente, una energía más ligera, familiar, sin duda, cada vez que entro me llena de tranquilidad. Veo a Camila que había salido antes dejándome sola como se lo pedí, con mi madre y mi hermana. No me molesto en acercarme ya que se les nota muy entusiasmadas en su conversación. Me voy al despacho de mi padre, toco la puerta y entro cuando escucho un adelante.

L- Papá. - entró al despacho, el levanta la mirada, me observa atentamente.

M- Hija, - se acerca a mi- ¿No deberías de estar ya de luna de miel? - frunce levemente el ceño, yo niego con la cabeza.

L- Me negué a ir padre, los ataques de Jack son continuos y demasiado graves como para pasarlos por alto y aún más poner en juego la vida de mi esposa. - el me abraza.

M- No sé me hace justo que tengas que pasar por esto hija, merecían disfrutar su luna de miel, solo la compañía la una de la otra, sin nada más, sin temer por nada. - suspira frustrado, sentía su rabia, por su frecuencia cardíaca, sus latidos eran extremadamente fuertes y su respiración un poco pesada, demostrando su molestia.

L- Lo sé padre y podría hacerlo, pero también valoro a mi manada, no voy a dejarlos cuando más me necesitan. No es propio de una buena líder. - ambos nos sentamos y sirve dos copas de burbon, me pasa una copa, yo la acepto gustosa dando un sorbo- No huiré como rata y os dejaré solos cuando es más que claro que nos está declarando una guerra, que no ganará, primero, me mata a mí. Antes que dejar que otros de los míos mueran, me quedaré aquí, en mi lugar. Donde pertenezco, protegiendo a los míos, aunque muera en ello, pero de lo que estoy segura. Es de que él. - pongo énfasis en la palabra él - Se viene al infierno conmigo- chocamos los vasos y bebemos un trago.

Después de un buen rato hablando, salgo y me acerco a Camila.

T- Hola Lau. - me sonríe mi hermana mientras sirve un poco más de limonada, lo cual Camz acepta gustosa ya que es una bebida que adora.

L- Hola hermanita. -le sonrío, le doy un beso en la sien, me siento al lado de Camz y acaricio su cintura.

C- ¿Todo bien? - yo asiento, aunque sé que ella podía deducir que no era así, pero prefería que lo habláramos en la cabaña, no tendremos una luna de miel, pero, al menos disfrutamos de la cabaña unos días más antes de mudarnos a nuestra casa.

L- Si cariño, todo bien. - le doy una sonrisa débil.

Ellas hablan, de diversas cosas, si algo hay que apreciar, es de que mi hermana, mi madre y mi esposa siempre tengan algo de lo que hablar. Nunca se quedan sin tema de conversación, es como... Magia.

Me quedo pensando en que cuando nos mudemos a la casa, tendré que poner seguridad, ya que el bastado de Jack es capaz de utilizar cualquier oportunidad para atacar en contra de Camila, ya que es la que más le interesa. Sólo por su maldita venganza hacia los dioses. Si tan solo estos hicieran su jodido trabajo.

C- ¡LAU! - chasquea los dedos delante de mi cara y la miro confusa- Por fin, te quedaste pasmada mirando un punto, llevo un rato llamándote. - se ríe un poco.

L- Lo siento, simplemente estaba pensando en unos asuntos. -ella asiente sin cuestionar nada.

C-Solo te decía que ya es hora de ir a la cabaña. -asiento, nos levantamos y nos despedimos, salimos de la casa de mis padres, nos vamos de vuelta caminando a la cabaña sin decir una palabra, pero gracias a los dioses ya no tenemos silencios incómodos.

Llegamos a casa y me siento en el sofá.

L- Camz ¿Dónde quedarías para hacer una reunión y que nadie lo supiese? Solo las alfas de las manadas, los cuáles sabes que nunca en su vida delatarían nada, ya que les afectaría. - Camz se sienta a mi lado, me mira extrañada pero no duda en responder.

C-Aquí, es un lugar donde nadie espera que vengan, solo tendrías el problema de que los guardias de las manadas detecten que los extraños traspasan la frontera y dijiste que nadie entrara ni saliera. -asiento- A no ser que estén muy ocupados con una reunión diferente.-la miro atenta- Puedes reunirles para darles una serie de indicaciones y en ese momento que los alfas aprovechen para atravesar la frontera, debe ser un rango de 30 minutos para que no se sospeche, si alguien los detecta en casa, simplemente nos vinieron a visitar, porque estaban preocupados ya que se enteraron de las amenazas, es algo que saben, para salir simplemente salen por el pasadizo de este jardín, lleva al bosque ese lado solo es custodiado por 3 personas por ahora antes de que cambies la orden, los llamo vienen y aprovechan para irse.- me dice tranquilamente.

L- No suena mal cielo, pero tal vez podemos hacer algo más tranquilo y ¿Menos riesgoso? - Camz me mira mientras se cruza de brazos.

C-Lau, sé que sospechas que hay un traidor entre nosotros, no es difícil darse cuenta de ello. - alza una ceja.

Suspiro, porque realmente tenía razón, sospechaba que había un traidor, pero entre tanta gente cercana no sabía quién era, tenía miedo de que podía pasar, que nos deparaba el futuro, solo podía rezar que los dioses protegieran a Camila y que el mismo dios del infierno me preparara para la guerra que cada vez, se veía más cerca. 








¿Que os pareció este capítulo?

📎Tengo muchas ganas de hacer un directo con todos vosotros y hablar.

Saludos a:
AngelesGarcia736
CamrenIsLove1000
Nicolebeltran997
VanessaPine
PaulinaHerrera296
PaulaEsther79

Muy pronto dejaré mi usuario de twich, por ahora Siganme en mis redes para saber más de mis historias y hablen me por dm si quieren saber más.

Un beso platanitos y nos leemos poronto❤️❤️❤️

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Mi mate una sirena- Camren GipDonde viven las historias. Descúbrelo ahora