Capitulo [11]

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(...)

Cómo se había dicho, ellos tenían una reunión programada en la oficina del Director. Un lugar un poco espacioso, pero lo suficiente para albergar una pequeña biblioteca con registros a los que solo el Director mismo tenía acceso. Misma que se dividía en ambos lados de la pared que conforma la oficina. También se hallaba un gran escritorio de roble, con unos cuantos adornos y suministros de oficina colocados en ella. Justamente atrás había una silla de cuero negro que completaba el conjunto. Por último, la oficina contaba con un gran ventanal que daba hacia atrás del escritorio. Gracias a ella, una gran vista podía contemplarse hacia una gran parte del jardín principal. Afortunadamente, un poco más allá, el bosque Emerald podía observarse en su mayor esplendor, siendo la luna que lo alumbraba.

Tanto Glynda cómo Izuku esperaban sentados, mientras que el lugar se había llenado de un ambiente bastante tenso entre las partes. Todo lo contrario del comportamiento profesional que se esperaba en una oficina importante. Desafortunadamente para ambos, dadas sus circunstancias y pasado, les era inevitable llegar a este punto.

Cada uno tenía su perspectiva. Un diferente modo de ver el pleito que les involucraba a ambos. Por un lado, estaba el punto de vista de Glynda, quien tenía varias cosas que decir, entre ellas sería la palabra en la cual definió a Izuku durante años....

(...)

"Idiota..."

Ella no podía dejar de insultarlo dentro de sus pensamientos íntimos. Aun cuando se había tranquilizado al tomarse un momento a solas, todavía su molestia al estar cerca de él persistía. Dándose cuenta de que necesitaba aferrarse a la poca actitud profesional que le quedaba, si no quería caer en la inmadurez que la caracterizaba en su juventud.

"Maldita sea, realmente no puedo mantener la compostura, ¿eh?" Dijo pensativa, mientras caía en la frustración.

Para ella se supone que sería un semestre regular, alumnos regulares, situaciones cotidianas, y un ambiente de trabajo donde ella tendría el control de las situaciones que ahí se presenten. Después de todo, odiaba que las cosas se salieran de control y que hubiera un caos a su alrededor. Por lo cual, era su deber como subdirectora el mantener el orden de la Academia y obligar a Ozpin a ejercer con propiedad su cargo.

Desafortunadamente, los eventos recientes de antes que iniciarán las convocatorias para los de primer año, le habían comunicado lo equivocada que ella estaba. Comenzando con el "milagroso" fortalecimiento económico del grupo terrorista Whitefang y sus recientes movimientos dentro del Continente. Dejando en claro que podría tratarse de otra organización detrás de este inesperado resurgimiento de un grupo en decadencia.

Para su desgracia, despues de una exhaustiva operación de inteligencia, todo indicaba que ellos habían vuelto. Empeorando las cosas, estaban más fortalecidos luego de una larga inactividad por más de una década.

Nada bueno salía cuando antiguas sombras empezaban a actuar bajo el radar.

Sumando a la cadena de eventos sumamente desastrosos. Uno de los hijos  de Summer Rose, su antigua alumna y una excelente amiga durante sus días en batalla fuera de la academia, había arruinado una operación para emboscar al peligroso terrorista "Román Torchwick". Ella había ido directamente hacia el peligro, sin medir las consecuencias del nivel de poder con quién se estaba enfrentando.

Aunque también, pudo observar lo que llegó a ser capaz en combate aún con los conocimientos mínimos en una Academia de formación básica de Cazadores. Admitiendo en el proceso que ella era tan talentosa cómo su madre, si no que más. Lastima que lo testaruda era algo inherente por genética.

El nuevo maestro de Beacon (Izuku x RWBY)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora