8.- Nueve meses

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La vida de Ariel Del Valle siempre fue color de rosa

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La vida de Ariel Del Valle siempre fue color de rosa... desde niño fue educado en el seno de una familia adinerada para convertirse en un complaciente doncel esposo y madre... y así hubiera sido, pero la rebeldía juvenil le llevó a fugarse el día de su boda con un joven al que creía amar.

 y así hubiera sido, pero la rebeldía juvenil le llevó a fugarse el día de su boda con un joven al que creía amar

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Ese error pintó el mundo de Ariel de color gris... las consecuencias de su errada decisión lo llevaron de vuelta a su hogar, donde una madre resentida lo culpó de la desgracia familiar... con 19 años, Ariel seguía siendo un doncel ingenuo y cometió un nuevo error, buscar el perdón y compasión del hombre al que plantó AL PIE DEL ALTAR.

Ese hombre, Gilberto Manrique y Alvarado, robó cualquier color de la vida de Ariel, pues en venganza secuestró y abusó sexualmente del doncel, quien después de escapar de su cautiverio, huyó nuevamente de su pueblo natal con la esperanza de iniciar una nueva vida... pero hoy cualquier esperanza ha sido derrumbada ante la noticia de estar esperando un hijo del hombre que lo violó.

Hoy Ariel ve el mundo de un solo color... ¡NEGRO!... tan negro como la oscuridad de la noche que lo acompaña mientras camina completamente solo por las calles de San Cristóbal, un pueblo costero muy lejano a Santo Tomás.

Con el rostro empapado en llanto, Ariel vaga por las calles sin saber qué hacer... hace solo unas horas fue echado como un perro de la casa donde había conseguido trabajo como sirviente y las crueles palabras de la mujer que lo despidió aún resuenan en sus oídos.

"agarra tus cosas y te me largas ahorita mismo... yo no quiero a un doncel como tú en mi casa... ¡UN DONCEL PREÑADO NO ME SIRVE PARA NADA!"

Al pie del AltarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora