BETTER THAN REVENGE, Vance Hopper (terminada)

Vance & Sidney.

Sidney le había pedido a Vance quedarse en su casa, no quería regresar a la suya.
Su novio no se negó obviamente.

—Entonces, ¿este es tu santuario? —dijo la chica mientras entraba y veía la habitación del chico.

El cuarto era color gris con pósters de bandas de rock y metal, había dos guitarras eléctricas en la esquina y vinilos pegados en la pared.

—Eres la primera chica que traigo a mi casa. —dijo el.

Sidney negó y rió. —No te creo.

—Te lo juro. —aseguró.

Ella sonrió y lo abrazo por la cintura. —Gracias por dejar que me quede en tu santuario. —susurró.

—Cuando quieras.

—No digas eso por que lo tomaré enserio.

—Lo digo enserio Sid. —dijo el.

—Bien, entonces me verás aquí todos los días. —dijo ella.

—Me parece buena idea. —asintió el.

Sidney se alejo de el y se sentó en la cama, palmeó a su lado para que el la acompañara.

—¿Que pasará con tu hermano? —preguntó Vance.

—Lo evitare lo más posible, no puedo creer que me traicionara. —rió con amargura.

—Bueno, hasta entonces te puedes quedar todo lo que quieras. —aseguró el.

—¿Y tus padres?

—No se donde están y la verdad no me interesa, la mayoría del tiempo estoy solo así que. —se encogió de hombros.

Pasaron un rato sentados platicando de cualquier cosa, después de eso ambos se cambiaron para dormir.
Vance le había dicho a Sidney que el dormiría en el sillón pero ella se negó.

Ambos se acostaron en la cama, veían el techo sin poder dormir.

—¿Escuchaste que están secuestrando niños? —preguntó ella mientras se volteaba hacia Vance.

—Si, dijeron que ya secuestró a dos. Billy Showalter y Griffin Stagg.

Sidney se quedó en silencio mientras acariciaba el cabello de su novio. —Cuídate, no estaremos todo el tiempo juntos y no quiero que te pase nada mientras no estoy. —dijo ella en voz baja mientras sus ojos brillaban al hacer contacto visual con los de el.

—Te prometo que si lo veo le daré una paliza. —aseguró. —Estaremos juntos siempre Sid. —sujeto su mejilla. —Te amo Sidney Weller.

—Te amo Vance Hopper.

(...)

Sidney se removió incómoda ante la luz que entraba por la ventana, sintió un peso en sus piernas. Volteó y la pierna de Vance estaba sobre las suyas y el tenía puesta toda la sábana, su piel se erizó ante la ráfaga de aire que entró.

Empujó la pierna de Vance y le jalo la sabana y le dio la espalda, Vance gruño y la abrazo por la cintura dejando su cabeza en el hueco de su cuello.

—Pateas mucho en las noche. —dijo ella.

—Mjm. —murmuró el.

—Tengo que hacer pipí. —se removió y quito a Vance.

—¿Te acompañó? —preguntó medio dormido.

—No cariño puedo ir sola. —quito los mechones rubios de su frente y le dejó un beso. —Sigue durmiendo.

Salió de la habitación y entró al baño, hizo sus necesidades y lavó su cara, agarró enjuague bucal.
Por mera curiosidad empezó a ver los cajones de Vance, no buscando nada raro si no para ver que más podía usar.

Estaba revisando el anaquel del espejo y encontró una caja de condones...¿extra largos?

—Wow Vance. —rió ella mientras veía la caja casi nueva. —¿Por que está abierta? —dijo confundida mientras los contaba.

Se que dirán que parecía loca revisando los condones pero cuando encuentras una caja CASI nueva en casa de tu novio no piensas lo mejor.
Al ver que faltaban CINCO sobres salió del baño dejando la caja donde estaba, Vance aún dormía así que reviso su pantalón, soltó un suspiro de alivio al ver 3 sobres sin usar ahí. Reviso su chaleco y encontró otros 2. Su corazón dejó de latir con intensidad y se relajó, se volvió a acostar con mucho cuidado y dejó que Vance la abrazará de nuevo.

Sentía la respiración tranquila de su novio y eso la hizo sonreí, el sentirse protegida en sus brazos era la mejor sensación del mundo.

—¿Que tanto piensas? —preguntó el con la voz ronca.

—Pensé que todavía estabas dormido. —bromeó.

—Aún lo estoy. —dijo provocando una risa por parte de su novia.

Sidney se volteó quedando boca arriba dejando a Vance acostado en su pecho.

—¿Me invitarás a desayunar? —preguntó ella con diversión.

—Mejor aún, haré pop-tarts. —dijo el.

—Adoro las pop-tarts.

—Lo se. —dijo el con tono divertido. Vance se incorporó en la cama. —Vamos. —la jalo de las muñecas y ambos salieron a la cocina.

Vance saco las pop-tarts de la alacena y las metió a la tostadora.
Sidney estaba sentada en la isla de la cocina comiendo cereal directo de la caja, aunque sonara extraño Vance disfrutaba su compañía. El tan solo verla con la camisa de el lo hacia sonreír, su cabello desordenado y sus ojos verdes brillaban más que otros días.

El ruido de la tostadora llamó la atención de ambos, Vance puso las tarts en un plato y se las tendió a Sidney.

—Gracias. —dijo y se las comió, cuando salieron las otras el plato de ella estaba vacío. —No debí comer cereal, voy a vomitar. —se quejó mientras se acostaba en la isla.

Rodó y se dejó caer al suelo sin lastimarse. —Moriré. —se extendió.

Vance agarró sus tobillos y la arrastró hacia el, la agarró de la cintura y la levantó. —No morirás, toma agua. —le dio un vaso y ella lo bebió.

—Recuerda que te amo Vance. —dramatizó y se quejó caer en sus brazos. Vance comió dejándola en sus brazos. —¡Acabo de morir y tu comes!

—Los muertos no hablan Sid. —dijo Vance.

Sidney volvió a "morir" y así se quedó hasta que Vance termino de comer y ambos fueron al cuarto y se durmieron otra vez...toda la tarde.

N/A:

Algo corto pero cursi, en fin.
Sidney & Vance mis papis<3

Lxs quiero!