Un corazón por un alma.

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-Hola Jungkook- Saludo Taehyung entrando a la habitación del castaño para entregarle su bandeja de comida.
Al no obtener respuesta de Jungkook siguió hablando -No sé porqué te sientes mal pero, te ayudaré a sentirte mejor- Sonrió.

-Tae, déjame solo por favor- La idea de otra quimioterapia en su semana era terrible, estaba harto de estar lleno de agujas.

El pelinegro se sentó en la camilla de Jungkook -Kook, no sé qué tienes pero sé que debe ser difícil, no entiendo porqué no me quieres decir tu enfermedad pero, por favor permiteme ayudarte.-

Jungkook pareció pensarlo un rato, él sabía que Taehyung se estaba esforzando en ser amable con él, no quería parecer mal agradecido. Estaba cansado, pero también estaba aburrido.

-Tae...no te he dicho mi enfermedad porque no quiero que me mires como los demás, tú eres diferente conmigo, eres amable, atento, agradable y no me miras con lastima. Sé que esto viene de la nada pero, por favor nunca cambies conmigo.- Ni siquiera Jungkook entendía el porqué había dicho eso, simplemente sé quería desahogar.

Taehyung lo miraba ,muchas emociones encontradas...ternura, tristeza y felicidad -Yo no voy a cambiar Jungkookie, te lo prometo- Dijo mientras tomaba la mano del castaño.

-¿"Jungkookie"? Que cursi- Un leve sonrojó por aquel apodo estaba en sus mejillas. Definitivamente Taehyung era diferente.

-¿Te parece si pongo una canción?- Al observar que Jungkook asintió, saco su celular y busco su canción preferida, "Ripitide - Vance Joy".
Se levantó con la mano de Jungkook todavía sujetada ,obligando al menor a levantarse con él.

Taehyung empezó a bailar buscando hacerlo reír, Jungkook empezó a bailar con él mientras reía.

Un baile sin sentido había alegrado el día de Jungkook.