Chuu Muraroki - [Terminada]

Juntos.

¡Por fin viernes!

El fin de semana se acerca y con ello el descanso de los estudios infernales.

Sin embargo, lo más infernal le estaba sucediendo ahora a Todoroki Yosuke.

Aunque ha empezado a hacer ejercicio, y trata de volverse más fuerte, las cosas siguen sin ir tal y como le gustaría.

Por supuesto que no va a aprender sobre defenderse de un día para otro, pero igual lo intentó, y el resultado es:

Él en el suelo con dos tipos golpeándolo sin piedad.

No puede hacer nada más que cubrirse. Sin embargo, siente que pronto se cansará y lo más probable es que termine por desmayarse.

Aún aturdido, escucha unos pasos, al principio normales, para después escucharlos venir más y más cerca con mayor velocidad.

La persona corría hacia él.

O más bien, hacia sus agresores.

El ruido de ambos chicos cayendo llamó más su atención, descubrió su rostro tapado por sus brazos para echar un vistazo a lo que sucedía, pues ya no sentía los golpes.

—¿Puedes pararte? -preguntó la ya conocida voz.

Todoroki miró a Murayama con duda.

—¿Qué pasó con el “No voy a defenderte nunca más”? -dijo con una sonrisa que no pudo evitar. Intentó levantarse y solo logró darse cuenta de lo realmente adolorido que se encontraba.

Ante el audible quejido que soltó el de lentes al caer de nuevo, Yoshiki se acercó hasta él para ayudarle.

—Lo siento, no está en mi naturaleza el dejar que otros se aprovechen de alguien cuando puedo hacer algo.

—Ya veo... -no supo cómo reaccionar a tales palabras. Pero conforme o feliz no estaba.

—Oigan, ustedes. -les habló a los chicos que seguían tirados.

—¡...! -solo uno de ellos seguía consciente.

—Largo. -ordenó con aquel tono frío.

El de cabello naranja, aún con su cuerpo doliendo, se levantó y arrastró a su compañero con él, huyendo lo más rápido que podía.

—Nadie nos está viendo ahora, déjame ayudarte. -dijo Yoshiki a Todoroki, quien no entendía a qué se refería el de bandana, si él ya se estaba apoyando en sus hombros para caminar. —Aquí vamos. -expresó antes de cargar al de lentes de forma nupcial.

—¡¡Hey!! -se quejó Todoroki al instante. —¡¿Estás demente?!

—Me lo preguntan seguido. -respondió con indiferencia comenzando a caminar. —No te muevas o me caeré contigo.

—¡¡Entonces ponme abajo!!

—¡¡Por Dios!! ¡¡Guarda silencio un rato!! -gritó enojado. Detuvo sus pasos y puso su mirada molesta sobre Todoroki. —¿Por qué no puedes ver que solo estoy tratando de ayudarte? Esos malditos te golpearon en el estómago muchas veces, ¿Cómo mierda puedo cargarte sin causarte más daño, si no de esta forma? ¡Solo quédate quieto un puto momento y después agradece la ayuda!

—... Si alguien nos ve...

—Ya lo sé. Ahora cállate y déjame llevarte rápido para evitar algo como eso.

—... Bien. -cedió, sujetándose de los hombros del otro para no caerse.

No entendía cómo podía ser posible que un chico más bajo que él pudiera cargarlo como si nada.