ANTI - ROMANTIC [Minjeong]

Capítulo 2

Sin embargo, como un hermoso monstruo, el amor aún está por atacar los corazones más cerrados de aquellos que dicen estar dañados. Todo está por suceder sin avisar.

Esperando por algo tan mágico nunca antes visto ante sus ojos. Por algo que los llene de la cabeza a los pies. Conociendo una nueva faceta, sentimientos que no creían reales por alguien. Alguien al cual ambos chicos tendrían en común. Y eso que nunca habían tenido algo como ello. Pero el mundo es tan raro, que te trae sorpresas cuando menos te lo esperas.

[...]

Minho: Hey —menciona al estar sentado frente al menor, pasando su mano por delante de sus ojos con una sonrisa.

Jeongin quien lo mira, toma de su jugo.

Sin embargo, cuando se fija bien, nada ha sido un sueño, y ahí está el pálido al frente suyo, rodeando los hombros de su primer amor. Pero, ¿cómo es que terminó todo así? Si siempre estuvo enamorado de él, incluso antes que Bang, incluso cuando Minho era aún más tímido, aunque claro, ya no lo es ahora.

Aun así, ¿por qué?

¿Por qué no es él quien lo abraza y besa en una de sus mejillas?

Minho: ¿Estás bien? —palmea su hombro luego de sentir el amor de su novio.

Un bello monstruo. Así es el amor. Ataca cuando menos lo esperas, y en la persona que menos tenía que suceder. Pero ahí estás, terminando de tomar tu bebida para sonreír y negar como si no pasara nada en tu corazón.

Como si no importase que te rompan en pedazos.

Jeongin: Estoy bien, no te preocupes —sonríe de lado— ¿se reconciliaron?

Divisa esas manos entrelazadas encima de la mesa. El mayor que lo ve asiente con una sonrisa y une aún más cada una de ellas mirando a su mejor amigo. Cómo siempre es tan impredecible que hace doler el amor de Jeongin.

Pero no hay nada más que sonreír.

Si él está feliz, ¿debería estar igual, no?

Ambos sonríen. Chan y Minho están sonriendo, y eso es todo lo que necesita para darse cuenta que no puede hacer nada. Seguir estando detrás de esa espalda mirando como ambos se besan, esperando atrás siendo la tercera rueda de cada cita.

El martirio es tan grande. El amor a veces duele.

Como un hermoso monstruo.

Minho: ¿Tanto se nota? —lleva algunos cabellos atrás de su oreja.

El aire juega en contra, en contra de Jeongin.

Traga saliva. No quiere hacer algo de lo que este le llegue a odiar.

Jeongin: Lo hace. —responde.

En el fondo quiere arremeter con todo. El amor es quién te hace feliz. El amor eres tú. Pero, ¿qué viene después? Ganas de morder el anzuelo del silencio. El rechazo a la vuelta de la esquina, o un amor imposible que te ve como un niño en vez del hombre que eres en verdad.