Querida Violeta.
Hoy he tenido el gusto de conocerte ¿y sabes?, hace un tiempo descubrí de ti, de tus gustos, de una pequeña parte de tu forma de pensar. Y eso me ha gustado.
Hoy en cuanto te vi me sorprendí, antes de ver tu rostro intente imaginarte con mil caras distintas, quién diría que tú no serias igual ni parecida a ninguna imagen que te di. En tus ojos había un fuego que me atraía y consumía del mismo modo que no puedo sostenerte una mirada.
He tenido tanto miedo ha hablarte para saber más de ti, ha enamorarme. Trato de evitarte del mismo modo que trato de estar cerca, he visto en tu rostro varias sonrisas por mi causa por lo que no estoy decepcionado, pero cada día me gustas más. Quisiera que te detuvieras, me causa tanto dolor ver que en ti esta lo que tanto desee, pero si doy un paso, puedo caer al abismo y dejar un corazón herido; y si me detengo, puedo contener mis latidos y dejar que otro muera por ti.
Ha sido un gusto y un placer conocerte, y aunque trate de ignorarte, créeme que me es difícil entender aún que la felicidad más importante nunca ha sido la mía.Con cariño e interés, Emmanuel.
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Un loco escribiendo de amor...
Short StoryTodo comenzó del mismo modo que enamora una flor, que sin una mirada, su fragancia ya te conquistó. Así era ella, no tenía rostro, ni siquiera su fragancia conocía. Por un tiempo eso me bastó, sabía que si le conocía mi fantasía caería en pequeños...