sobre ruedas ー •Litiago•

☪ 2

El morocho estaba conduciendo sin dirección alguna, ya que el chico se lo había pedido, pero por qué tenía que hacerle caso? lo que le pasaba al otro no era su jodido problema

estuvo a punto de preguntarle varias cosas, cuándo de repente frenó en un semáforo, giró su cabeza y vió al chico durmiendo placidamente, y ahora que se supone que iba a hacer?¡

no lo sabía

llegó a un motel para que pudieran dormir un rato, ya que Tiago no vivía en la ciudad, su vida estaba en otra ciudad, la casa la cuál compartía con su ex pareja, pero esta había expulsado a Tiago de ahí debido a una discusión que tuvieron, pero eso ya pasó hace meses

no tenía a sus padres presentes, solamente tenía la herencia de su abuelo, el cuál ya no estaba vivo, pero Tiago estaba verdaderamente perdido

siempre dormía de motel en motel solo, ya que un hotel sale bastante caro, y no se arriesgaría a mal gastar su dinero, su trabajo no era estable, era en un supermercado, pero de seguro ya no lo estaban llamando por su apariencia, la cuál no tenía nada de malo, era un buen muchacho, pero la gente es una basura cuando quiere

y para el colmo ahora tenía a Mauro con él

lo miró por un largo rato y apagó el auto guardando la llave en su bolsillo izquierdo, y tocó el hombro del más chico

''Mauro, despertate''  lo sacudió un poco, notando cómo este abría sus ojitos

Mauro: miró para todos lados y luego al más grande ''hola''  le saludó despacito

Tiago: ignoró el saludo y le indicó que se bajara del auto, y Mauro así lo hizo. Tiago pagó una habitación con dos camas, el más bajito miraba el lugar un poco...asustado ''no voy a pagarte un hotel cinco estrellas, conformate con esto, o si no dormí en la calle'' dijo secamente

Mauro: se sorprendió con lo que dijo Tiago y negó ''no gotti, yo no dije nada'' contestó preocupado a lo que Tiago rodó los ojos

se adentraron a la habitación y Mauro se sentó en la cama, mientras el otro se tapó apagando la luz

Tiago: ''mañana vamos a pensar en que vamos a hacer'' dijo desde la otra cama y Mauro asintió, pero obvio que fué inutil ya que por la oscuridad no se veía nada

Mauro: ''si, hasta mañana Tiago'' le dijo dulcemente pero el otro no le respondió nada

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pasaron las horas y el rubio solamente respiraba mirando la oscuridad de la fría habitación, no tenía ni siquiera su celular, ya que su madre se lo había quitado. Faltaban dos meses para su cumpleaños número 19, y él penso que iba a ser su mejor cumpleaños....pero se había equivocado, no sabía que hacer, sólo tenía a su....SU SKATE¡ él no podía alejarse de su patineta, la quería, y recordó que estaba en el auto de Tiago

no quería despertarlo, asique optó por buscar las llaves por su cuenta, estaban en el bolsillo de Tiago, asique sólo tenía que sacar las llaves e ir hasta el auto para destrabarlo y ya

buscaba entre los bolsillos ajenos hasta que un fuerte agarre en su muñeca se hizo presente sorprendiéndolo bastante

Tiago: ''qué estás tratando de hacer?'' le preguntó frunciendo el ceño, y su voz sonaba molesta

Mauro: ''Tiago, mi skate quedó en tu auto''  le dijo desesperado

Tiago: ''y a mi que me importa''  le restó importancia al asunto soltando su agarre del chico

Mauro: ''por favor, sólo quiero las llaves, lo buscaré y ya no te voy a molestar, lo prometo'' contestó despacito, ya que por la lluvia y la humedad que tenía su remera le dió dolor a su garganta

Tiago: ''no quiero que toques mi auto, yo voy a ir por tu skate'' dijo levantandose de la cama. Una vez afuera del motel, se dirigió a su auto destrabándolo y abriendo la puerta en la cuál el objeto de madera se encontraba

y se le ocurrió una idea, la cuál consistía de agarrar sus llaves, encender el auto y lárgarse de ahí, dejando que ese chico ya no sea su responsabilidad

pero no pudo, porque de alguna manera él ya no tenía nada ni a nadie por quién correr, y por más de que odiaba al rubio, era bueno no sentirse tan solo

agarró una remera de su bolso limpia, agarró el skate acomodándolo bajo su brazo y trabó el coche

llegó de nuevo a la habitación y entró en esta, topándose con la luz prendida y a el rubio sentado como indio en la cama, quién después de ver su skate sonrió

Mauro: ''gotti muchas gracias¡ mi skate¡'' dijo agarrando el objeto entre sus brazos cómo si fuera lo más valioso del mundo

Tiago lo observó y le pareció demaciado....tierno? negó sacando cualquier pensamiento fuera de lugar y llamó la atención del skater ''tomá'' le lanzó su remera ''cambiate''

Mauro: ''pero es tuya'' le dijo observando la remera que de seguro que si se la ponía iba a quedarle cómo si fuera un vestido

Tiago: ''ya sé idiota, yo te la estoy prestando'' le contestó rodando los ojos

Mauro: ''Tiago gracias'' le sonrió y fué al baño, el morocho contestó un suave ''de nada Mauro'' pero este no logró escucharlo