La rendición de las brujas

ACTO TERCERO

Escena I

Templo de las hijas de Milena

Interior del templo consagrado a las tres hijas de Milena. Estatuas de orden jónico y decoración con velos blancos colgados por el sitio. También se visibiliza velas. WILLOW y ROHAB están arrodilladas en el centro, meditando en una oración interior. YELDA aparece en escena, con expresión seria. La miran estupefactas.    

ROHAB.- Ya veo… Tampoco va a venir esta vez.

YELDA.- Dice que se encuentra todavía sin fuerzas.

ROHAB.- ¡Han pasado tres días desde lo sucedido! (Se levanta enfada hacia YELDA.) ¿De verdad que aún no se encuentra capaz de volver a la normalidad? ¿De contar con nosotras? ¡Es increíble! (WILLOW se mantiene al margen, en reposo.)

YELDA.- No vamos a forzarla.

ROHAB.- Te recuerdo que se despertó de los altares del sueño en un estado alterado. Pasó del silencio a la histeria. Y no pudimos movernos de allí hasta que consiguió calmarse. ¡Todavía nos debe una explicación!

YELDA.- Se perdió entre la confusión. Sabíamos que era arriesgado ir a Somnus con ella, recién adquiridos sus poderes como bruja del agua.

ROHAB.- ¡Eran las órdenes! (Grita.)  

YELDA.- ¡Lo sé! (Se posiciona en su nivel de estado.) Por eso mismo asumamos las consecuencias y dejemos que las cosas fluyan naturalmente hacia delante. Melany nos acabará contando lo que le pasó, o más importante, cómo se siente para poder ayudarla. Esta es mi forma de ver las cosas. Ojalá pudieras ser paciente. Tus gritos no harán nada con ella, pero sí atosigarla y que acabe odiándote.

ROHAB.- Siento que no me entiendas, Yelda. Procuro ser práctica.

WILLOW.- ¡Ya es suficiente! (Cesa a las dos, levantándose y mostrando autoridad.) Hemos cumplido con el mandato de las tres hijas de Milena entregando el material, a pesar de lo sucedido. Le daremos a Melany un día más de reposo hasta que vuelva a entregarse por completo al Cuádruple Sagrado. Comprendo lo que dices, Yelda, pero si en algún momento volvemos a tener otra orden necesitamos contar con Melany lo antes posible.

ROHAB.- Imagínate que crecen sus miedos de lo enclaustrados que están... ¿Qué clase de bruja sería? ¿Cómo le repercutiría?

YELDA.- Os entiendo, pero busquemos una forma adecuada para dirigirnos a ella.

WILLOW.- Será cuidadosa. No dejo de preguntarme qué le habrá podido suceder para que las piedras de su máscara se rompiesen. Tendremos que reponerla lo antes posible. El zafiro y la cianita son fáciles de localizar. Pero para la aguamarina tendremos que desplazarnos más lejos.

YELDA.- El viaje será rápido usando los portales: aún tenemos objetos de aquel lugar.

ROHAB.- También las piedras necesarias para abrirlo.

WILLOW.- Bien.

YELDA.- Saldré yo a por ella.

ROHAB.- Prefiero ser yo: necesito movimiento para despejarme. (YELDA asiente con la cabeza.) Podremos tenerla en poco tiempo.

WILLOW.- ¿Cómo estaba Miralda esta mañana? (le pregunta dirigiéndose a YELDA.)

YELDA.- Atenta a cualquier necesidad de Melany, pero sabe que prefiere estar sola en la cama y mantiene la distancia. Rosella está con ella haciéndole siempre compañía. Las vi a las dos cuidando el huerto cuando venía aquí. También he podido sentir algo agitado en el viento y en el vuelo de las aves. Intuyo que esta manifestación es obra del latir del Núcleo.