TU Y YO EN EL APOCALIPSIS

CAPITULO 6: la joya escarlata (parte 1)

La chica seguía llorando, me percate que aun le estaba apuntando con la escopeta así que la retire y le dije:

-no te preocupes, no te haré daño, perdona por entrar así y apuntarte, tenia que asegurarme que no eras un..., bueno, no importa, estas bien?-

levanto la cabeza y pude ver su rostro, era hermosa, sus ojos eran de color azul claro, su piel blanca y sus labios rojos, el color de su pelo era rojo escarlata, aunque estaba llorando se veía tan hermosa, entonces le pregunte:

-cual es tu nombre?- a lo cual respondió con una voz dulce -me llamo scarlett-

su voz había entrado en mis oídos y había tocado mi corazón, pero debía calmarme, no era prudente utilizar los sentimientos, seguí preguntando:

-por que estas aquí?- entonces me respondió -me escondo mientras mis tutores regresan con la comida y con las medicinas- a lo cual respondí -medicinas para que?- entonces scarlett dijo -a mi tutor lo había lastimado un hombre en el brazo y se estaba enfermando, así que fueron por algo de alcohol, y me dijeron que me escondiera y que no abriera la puerta, pero se fueron hace un dia y estoy preocupada-

en ese momento andres entro por la ventana y scarlett se encogió de hombros y bajo la cabeza, entonces le dije:

-no te preocupes el viene con migo, te vamos a ayudar a buscar a tus tutores- entonces scarlett dijo -enserio?, muchas gracias- salio del closet y al fin pude detallarla completamente, era una chica mas o menos de mi edad, llevaba una camisa a cuadros roja, que combinaba con su cabello, y llevaba un jean azul oscuro y unos zapatos converse, entonces dije:

-primero enséñanos la casa, mañana iremos por tus tutores- a lo cual scarlett respondió secándose las lagrimas -esta bien-

salimos por la puerta de la habitación y caminamos por un pasillo, al cual estaban conectadas 3 habitaciones, al final del pasillo habían unas escaleras que llevaban al primer piso, continuamos con nuestro recorrido bajando por las escaleras, habían muchas botellas llenas de agua, así que le pregunte a scarlett:

-porque tienes tantas botellas- entonces respondió -mis tutores las empezaron a llenarlas hace una semana, trate de preguntarles por que lo hacían pero no me respondieron, pero ya veo el porque- suspiro, entonces le dije - no te preocupes, los encontraremos-

fuimos a la cocina y vimos en las alacenas que no había mucho, solo unos cuantos enlatados y especias, fuimos a la parte trasera de la casa y había un pequeño huerto de sandias, estas aun no estaban muy maduras, pero no podíamos esperar, mientras estábamos viendo mi estomago gruño de una manera que nadie esperaba, rompiendo el silencio incomodo que había desde que salimos de la habitación de scarlett.

scarlett y andres soltaron una carcajada, entonces les dije:

-hey, no como nada desde ayer y he corrido mucho, tengo hambre-

entonces scarlett avanzo y tomo la sandia que se veía mas grande y fue hacia la cocina, puso la sandia en la mesa y cogió un cuchillo que estaba en lo cajones y empezó a cortarla en varios pedazos, luego de unos cinco minutos termino y nos dijo:

-vamos a la entrada- llevando un plato con las rebanadas de la sandia

andres y yo la seguimos, scarlett abrió la puerta todos nos sentamos en los escalones de la entrada, el hambre se apodero de andres de mi como si fuera una bestia salvaje se hubiera apoderado de nosotros y enviamos la mano al plato rápidamente, la mano de andres cogió una rebanada y la llevo rápidamente a su boca, mi plan era el mismo pero de repente mi mano toco la suave mano de scarlett, iba a coger la misma rebanada que yo, recogí mi mano y scarlett hizo lo mismo, entonces dije:

-lo lamento, tómala tu-

se que estaba sonrojado, lo puedo asegurar, scarlett también lo estaba, así que cogió la rebanada y empezó a comerla lentamente pero con clase, con pequeñas mordidas, por el contrario andres comía violentamente, enviándose gigantescas cantidades de sandia a la boca, embarrándose la cara, pero no lo culpo, estaba hambriento y cansado, también agarre una rebanada y empece a comer, no tan salvaje como andres pero tampoco con tanta clase como scarlett.

terminamos la sandia y nos sentimos satisfechos, así que decidimos dormir un poco para recargar las energías, las necesitaríamos cuando fuéramos a buscar a los tutores de scarlett

cada quien durmió en cuartos separados, en las tres habitaciones que había en el segundo piso de la casa

desperté a media noche, sabiendo que no podría volver a dormir, ya que había dormido mucho, no quería incomodar a los demás, así que abrí la ventana de la habitación y empece a mirar a través de ella

era una noche estrellada, no había ni una sola nube, había luna menguante, era una noche hermosa, todo estaba sutil mente iluminado por la luna

observe que la ventana estaba pegada al techo de la casa, así que pensé en subir al techo, para contemplar mejor la noche

agarre mi escopeta y mi pistola, por si uno de ellos (escribo ellos porque no se como llamarles) aparecía y arruinaba la vista

puse la correa de la escopeta al rededor de mi hombro y la pistola en mi pantalón y subí.

me sorprendí al ver que sobre el techo estaba scarlett, la luz de la luna se reflejaba en su hermosa piel blanca, su cabello rojizo ondeaba con las brisas de viento que pasaban y sus ojos azules brillaban, se veía tan hermosa