[9] Cambiante

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Nunca me atrevería a decirlo pero la mejor parte de mi vida fue tener que ser el encargado de separarlos y regañarlos por cada locura que hacían.

Alguna vez te has preguntado ¿Existe algo mas haya de la muerte? ¿Qué es lo que hay más haya de la vida? ¿A donde vamos cuando morimos? ¿Cada quien va a un lugar diferente dependiendo su especie?

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Alguna vez te has preguntado ¿Existe algo mas haya de la muerte? ¿Qué es lo que hay más haya de la vida? ¿A donde vamos cuando morimos? ¿Cada quien va a un lugar diferente dependiendo su especie?

Todas estas preguntas habían habitado un lugar en la mente del mayor de los hermanos de la Orden Arcana.

Haber vivido una gran cantidad de siglos te permite poder adquirir una gran cantidad de conocimiento, sin embargo aquel gran conocimiento no era en ocasiones suficiente para lograr obtener las respuestas de las preguntas más comunes.

Y ahora más que nunca Bellroc se sentía sumamente molesto por no encontrar aquella solución.

Hubo un momento en el cual se preguntó ¿Qué respuesta le hubiera dado su madre?

Talvez una respuesta tan compleja la cual el no lograría comprender o simplemente una respuesta simple la cual no le daría nada.

Pero... ¿Por qué deseaba encontrar aquella respuesta con tanta insistencia?

Esto era debido a que durante la visión que obtuvo gracias al báculo de su hermana había logrado percatarse de la existencia de no una, sino dos versiones de su hermana.

Sabia que podía existir la posibilidad de lo que había visto no fuera real y fuera solo un truco, sin embargo aquel escenario había sido proyectado por el propio báculo de su hermana.

Siendo esta razón suficiente para que así Bellroc decidiera intentar dar con el paradero de esta nueva versión de su hermana.

La cual, solo con verla le bastaría al mago para darse cuenta de que aquella versión era la pequeña semidiosa que sonreía con cierto grado de ingenuidad.

Pero no solo era eso lo cual tenía al mago tan alterado, sino también la existencia de aquella otra variante que había visto hablar con su hermana.

No sabía con exactitud que era ella, talvez un ente nacido de los más bajos sentimientos de Nari, una parte suya corrompida o en el peor de los casos la verdadera personalidad de Nari.

Miles de preguntas y tan pocas respuestas para solo un problema.

Esto era sin duda algo que ninguno de los dos magos habia logrado prevenir, pero si algo debía de decirse era que aquello ya era razón suficiente para que la Orden Arcana regresara al juego.

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 [Lo siento hermanita]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora