Phillip: The Virus.

"Sigilo."

Día 871. Noche.
Vídeo 4; Cámara de Phillip Coul-son
9 Septiembre 2.020.

No sé si habéis tenido ocasión de haber jugado alguna vez en alguna consola; Xbox, Playstation, Wii. A un juego muy bueno del novelista Tom Clancy que se llama "Splinter Cell".
Es un juego de un espía cuya base se basa en el sigilo, determinación, sangre fría y saber esconderse bien evitando enemigos. Yo hoy he sido mejor que esa mierda.
¡OCHO! No uno, ni dos, ni tres. Sino ¡OCHO! Ocho malditos phillips he tenido que esquivar, me he ocultado que no me hubiese encontrado ni el chucho de Rastreator, es que lo recuerdo y Uff... Los vellos de punta.
Os explico vale, así para que entendáis lo que ha pasado:

Emprendí camino a través del bosque de Noveras. Un lugar tan difícil por el que andar, que hasta las cabras serían capaces de lesionarse.
Cuando estás huyendo de los Phillips ni siquiera te paras a pensar en elegir el camino; si te será mas llevadero o no, si debes cruzar un río o superar alguna alta valla. Y la verdad, cuanto mas oscuro, cuanto mas te adentres en la espesura, mejor. Los Phillips no repararán en buscar en un bosque oscuro y peligroso. Por que están hambrientos, pero no son tontos.

Eso siempre me ha quedado claro; no son para nada tontos, su agudeza visual. Su oído y su olfato... Malditos cabrones, son mejor que un halcón Joder, no se puede jugar con ventaja.

Iba en la espesura, adentrándome en el camino cortando hojas y ramas con este machete;
El machete enfocado a la cámara desde esa perspectiva, se veía raramente enorme, con un baño de sangre en su hoja y con restos verdes que debieron ser de esas ramas. El mango; marrón, y rodeado de cinta americana o esparadrapo, claramente hacía entender que lo llevaba así para que no se le resbalase de la mano.
Y bueno, ocurrió... Mis tocayos se están adaptando. Un grupo -como siempre de cinco- se adentró en el bosque de Noveras y comenzaron a husmear, hablando entre ellos. Hablaban cosas triviales (para ellos) como; Que uno anoche cenó esófago de adolescente y le sentó mal, que otro no vio el partido de futbol (futbol Phillip claro). Y otros dos hablaban de que ya era hora de comer, que estaban hambrientos... Les he visto comer, bocadillos de chorizo humano... Es algo desagradable, en un amago de vomito o una especie de arcada, oyeron algo... Y comenzaron a buscarme. Yo inclusive llevaba mis cascos puesto, lo que provocó que al subir deprisa a un árbol se quedasen enganchados en las ramas... Y provocó que me cagase en la maldita naturaleza que me puso a cuatro a patas y me dio fuerte.
¡Malditas ramas! Arrancaron mis cascos de mis orejas justo cuando sonaba el solo de Slash en November rain. De Guns & Roses. ¡Maldita sea! Debería haber nacido negro, por lo menos me camuflaría en los árboles... Sin ánimo de ofender a ningún negro. Ni mucho menos, esos tíos son mucho mas fuertes que nosotros los lechosos. Yo encima soy Inglés de parte de madre y Galés por parte de padre, de modo que este maldito sol del Mediterráneo me convierte en un guiri con piel tan roja como un cangrejo. Sí, soy un maldito crustáceo...
Volvamos a mis tocayos, y al asunto del sigilo, he de decir que me he ido por las ramas... ¡Vaya nunca mejor dicho! Nah en serio, estaba colgado de una maldita rama, abrazado a ella como un perro salido en la pierna de un capullo. Si llegan a haber mirado hacia arriba, probablemente sería el desayuno de unos cuantos Phillips. Les he burlado de la forma mas difícil, les tenía justo debajo, veía sus malditas cabezas y en cada movimiento sincopado de sus cuerpo se giraban y se les notaba a todos los dos famoso Suros de la cara... Ah si, toca explicar eso. Los Suros son unos puntos infectados en la cara... Son grandes, del tamaño de el tapón de una botella de agua, y son... Una especie de punto negro amplificado que se ve repugnantemente asqueroso... Todos tienen dos suros en la cara, efecto secundario supongo.
Si alguna vez tengo a uno de cerca le diré que se opere esa maldita cara que tiene.

Bueno, el hecho de que esté haciendo este vídeo significa que pasaron de largo, lo cual me beneficia bastante... He cenado Liebre asada y mañana continuaré mi camino hasta Santiago... Interminable... Jodidamente interminable.
Ahora toca reponer fuerzas y dormir con un ojo avizor. Hasta mañana humano, que no te coman los Zombies.

Continuará...