-¡¡WOONDERHOY TSUKASA!!- mi amiga pelirosa grito para seguidamente tirarse y abrazarme haciendo que caiga al suelo.
-E-emu eso dolió, pero un gusto verte por aquí- conteste abrazándola también aunque era un poco molesto estar en el piso.
-¡¡Estuvieron fantasticos gran actuación Tsukasa, igualmente a ti Rui!!- Emu me abrazo más fuerte ya casi asfixiandome.
-O-oye E-emu suéltame...-la mencionada salto de un susto y se alejo siendo sermoneada por Nene.
-Cielos Emu controlate que vas a asfixiar al niño- comento Nene mientras suspiraba y golpeaba con poca fuerza su cabeza.
-Oh Emu, ¿no me abrazaras? Ya veo.. ¿tienes un ligero favoritismo hacia Tsukasa?- la chica levanto su mirada con preocupación y se puso de pie para ir a abrazar a Rui con más delicadeza que cuando tiro al chico rubio...persona que sigue tirada.
-Rayos.. déjame ayudarte Tsukasa- Nene me ofreció su mano para ayudarme a levantarme y con gusto acepte.
-¡Gracias Nene! Muy amable por acordarte de una estrella tirada..- sonreí a esta, sería muy callada en algunas ocasiones, pero una muy buena amiga.
-Gracias Emu~ ¿vieron al fan de Tsukasa? Seguro estaría muerto por verlo- dijo mientras se separaba del abrazo de la chica pelirosa.
-Oh sí, pero cuando apenas terminaron Akito se lo llevó a las fuerzas- la amiga de Emu respondió a la pregunta del más alto.
-Vaya una lastima~ bueno tenemos que sacarnos estos trajes..¿vámonos Tsukasa?- el pelimorado se acercó al joven.
-¿Ya se van? Una lastima... Pero ¡¡estuvieron grandiosos!!- la más baja hablo teniendo un asentimiento de Nene de que era cierto.
-Muchas gracias a las dos~ ahora nos retiramos- y así Rui se acercó a Tsukasa agarrándolo por su cintura llevándolo alzado. -¡¡Hasta luego!!-las dos chicas quedaron atónitas por la acción mientras veían como el rubio reaccionaba.
-¿¡¡¡R-RUI!!!? ¿¿¿ESTAS LOCO??? SUÉLTAME, DEJAME AHGGG- Y ahí estaba yo humillandome en los pasillos mientras gritaba como un loco...
-Que lindo eres estrellita, ya llegaremos a nuestro destino se paciente- para consolarme me dió una ligeras palmaditas en la espalda pero aún así seguí quejándome gran parte del camino.
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Ahora nos encontramos en unos de los cursos, no había nadie debido a que todos estaban en otros lugares por el festival, no había ni un solo ruido. Donde estabamos era uno de los lugares que casi nunca se ocupaban y por eso ahora estábamos apoyados los dos juntos en una de las paredes
-Por lo que veo se puso a llover, Tsukasa-
Cierto pelimorado se encontraba aún conmigo teníamos el día libre debido al festival, ahora terminada la obra podríamos hacer lo que queramos hasta el final de este.
