Lo Mejor Ha Sido Conocerte (VerAna)

capítulo 21 (epilogo)

"Veronica, vamos, ¡vamos a llegar tarde!" Grito escaleras arriba.
"¡Ya voy, ya voy!" Ella grita de vuelta, el sonido de sus pisadas bajan por las escaleras. Ella aparece en el vestíbulo con una sonrisa. "Estaba tratando de encontrar el suéter que Silvina me tejió para la Navidad pasada". Su cabello oscuro cae en ondas perfectamente rizadas sobre sus hombros. El suéter de color melocotón hace que su cabello se vea más oscuro, sus jeans ajustados están metidos en unas botas que le encanta robar de mi armario.

"Al menos es una buena excusa para Dani", me río y le doy un beso en la mejilla. "Tal vez alivie la ira que tendrá por llegar tarde".

Volvimos a la ciudad; nuestros trabajos estaban esperando después de todo. Pero algo se sintió apagado. No pudimos colocarlo por un tiempo. Veronica volvió a la cafetería y yo volví a la universidad. Sonreí más, me reí más, salí más. Y esta vez fue real. Me hice amiga de mis compañeros de trabajo. Vimos a Camilo en el bar arcade mucho y me dijo que siempre andaba con gente ruidosa.

Traje a mi antiguo grupo de amigos de vuelta de nuestros días universitarios. Les presenté a Veronica. Hicimos nuestra propia pequeña familia en la ciudad, y aún así no se sentía bien. No se sentía como si fuera nuestro. Como nuestras vidas no eran las nuestras; No era solo Veronica y yo. Fueron Veronica y Omar y Vicky y yo.

Entonces decidimos mudarnos hasta el pueblo donde vive mi padre y mis hermanos y se siente tan bien, tan cómodo, tan en casa, incluso Veronica consiguió un trabajo en una escuela que le paga muy bien.

"Hey", dice Veronica, su mano acariciando suavemente mi mejilla, "¿estás lista?"
"Sí", le digo de vuelta, con una sonrisa creciendo en mi cara.
"¿Estás segura? No creo que Lola te deje entrar a la casa con calcetines empapados ". Su risa se convierte en una sonrisa y en un tentador cosquilleo de su ceja. Me sonrojo tirando de mi labio inferior entre mis dientes. Mis ojos caen sobre mis pies descalzos.

"Oops?" Me encogí de hombros. Una risa melódica cae de sus labios. Ella coloca un beso casto en mis labios antes de inclinarse y lanzarme un par de botas.

"Vamos, ya llegamos tarde", dice Veronica abriendo la puerta de entrada y sacándome. Ella la cierra detrás de nosotras, y caminamos no muy lejos por la ciudad hasta la casa de mis padres. Sostengo la mano de Veronica con fuerza en la mía mientras caminamos por la ciudad y subimos la carretera hacia la casa. Nos saludan amigos y algunos de los estudiantes de Veronica nos desean una Feliz Navidad.

Cuando llegamos a la casa, el camino de entrada está lleno de autos, y podemos ver a todos moviéndose en la sala desde la ventana delantera. Veronica me lleva a la puerta del frente y la abre.

"¿Dónde está mi chica Bella?" Ella grita en la casa. Subo detrás de ella cerrando la puerta y sonriendo cuando Bella viene corriendo.
"¡Tía Veronica!" Bella chilla lanzándose a los brazos de Veronica.
"Hey, pequeña", Veronica la abraza con fuerza, dándole un beso en la cabeza. "¿Cómo estás?"
"¡Estoy genial! ¡Quiero mostrarte a ti y a mi tía Ana mis dibujos! "Bella comienza a tirar de Veronica hacia la sala de estar. Es mucho más alta que la última vez que la vimos. Ella acaba de cumplir ocho años; su personalidad ha crecido tanto como ella. Y su capacidad artística ha superado con creces la mía cuando tenía su edad.

Ni siquiera puedo entender el talento que ella tiene. Nos dirigimos a la sala donde está el resto de la familia. Tiberio, Silvina, Lola y mi papá están sentados en los sillones hablando entre ellos.

Alberto entra caminando a la habitación con bocadillos en la mano y una mega sonrisa, un Sebastian que lo mira con orgullo.  Dani y Tina junto a su nuevo hijo recién nacido, Alex, durmiendo profundamente en los brazos de Daniela.
"¡Aquí están nuestras chicas!", Dice Dani cuando nos nota. "Y pensamos que Alberto siempre fue el último".
"Sabes que no aprecio las llegadas tarde, Ana", mi padre reprende.

"Solo quería usar el suéter que Silvina me había hecho", explica Veronica. Ella le susurra algo a Bella y va a saludar a mi familia. Ella coloca besos rápidos en cada una de sus mejillas, abrazos donde es más apropiado, y algunos toques de nudillos. "Ana es la que no estaba completamente vestida cuando bajé las escaleras".

Levanto mis manos, "Veronica!"

"¡No necesitamos conocer esos detalles!" Grita Dani cubriéndose las orejas.

"Simplemente no tenía zapatos, muchachos, vamos", trato de explicar.

"Oh, Dios, por favor, haz que esto se detenga", murmura Dani.

"No seas tan grosera, querida", dice Silvina caminando hacia Veronica y yo. "Hola, chicas, ¿cómo están?"

"Estamos bien, muy bien", le digo con una sonrisa, envolviendo mis brazos alrededor de la cintura de Veronica.

"¿Hay campanas de boda en el futuro? Sabes, la boda de Alberto y Sebastian fue tan hermosa, me encantaría tener otra de esas ", Silvina nos mira expectante.

"Silvina..." digo, sonrojándome. Veronica se desconecta de mis brazos y me quedo hablando sola con Silvina sobre esto. Puedo escuchar las voces de mi familia caer en un murmullo silencioso.

En un momento Veronica se arrodilla ahí enfrente de mí familia y dice "yo nunca pensé que iba a casarme y formar una familia pero contigo en mi vida todo fue diferente, cambiaste mi mundo desde el día uno y quiero que lo sigas cambiando así que Ana Gabriel ¿me harías el honor de ser mi esposa?

"Sí", le susurro, y luego otra vez, más fuerte. "¡Sí, sí, me casaré contigo!" Mi familia grita detrás mío cuando Veronica desliza el anillo en mi dedo. Le pongo los brazos alrededor del cuello y la atraigo con fuerza hacia mi cuerpo, enterrando mi cara en su cuello. Los brazos de Veronica se envuelven alrededor de mi torso, aferrándose a mí con la misma fuerza.

"Te amo", le digo a Veronica con una sonrisa y un guiño juguetón. Ella se ríe y me lanza un beso mientras está rodeada de mis hermanos.

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Un pequeño epilogo hoy si este es el final espero que les haya gustado.