Redención (Narusasu¿)(M-preg)

Capítulo 14

Sakura toma aire, cómo médico necesita mantenerse calmada y dar la noticia con seriedad, pero en este caso es difícil hacerlo.

-Sasuke está bien, pero el bebé... No lo logró, quedó con graves traumatismos y falleció a las 8:15 am, prácticamente casi se le salió del golpe... Lo lamento mucho, yo... Tengo que retirarme.-

Todos en la sala se quedan congelados al oír la noticia, en especial Naruto, estaba inexpresivo con los ojos abiertos de par en par, no sabía cómo procesar el hecho de que había matado a su propio hijo.

La pelirrosa sube al techo apresuradamente para tomar un poco de aire fresco, se recarga en el barandal e inclina la cabeza mientras las lágrimas caen por sus ojos esmeralda, se siente culpable por no haber podido salvar a ese niño que era tan importante para Sasuke, y lo peor estaba por venir, ¿Cómo le iba a dar la noticia a Sasuke? Sabía que él iba a quedar destrozado al saberlo, pero no había manera de arreglar esto, el tiempo no se puede regresar y cosas como estas no tienen solución, sólo quedaba afrontar la realidad.

La vida da y quita, generalmente quita y no te da nada a cambio, cada quién recibe lo que cosecha, supuestamente, porque no necesariamente es cierto, todos son castigados a su tiempo, pero, ¿Será que Sasuke aún seguía pagando por lo que había hecho? ¿Por qué él si es juzgado y odiado, y otros no, a pesar de ya haberse redimido? ¿Por qué la vida le ha dado tan poco y lo poco que le ha dado se lo ha quitado? Hay personas que han hecho cosas peores y no son castigados así por la vida, ¿Por qué?

Es simple, y es que la vida no es justa, nunca lo ha sido, es azarosa. A cada quién lo que le toca.

Sakura secó sus lágrimas y bajó a la habitación en la que estaba Sasuke, se sentó en la silla que está al lado de la cama y esperó unos minutos a qué despertara.

Sasuke despierta, se siente adolorido y cansado, poco a poco se va despejando y ve a Sakura sentada al lado de él, inmóvil, inexpresiva.

-¿Cómo... Está mí bebé? ¿Se encuentra bien?- Lleva sus manos a su vientre para acariciarlo, pero ya no siente nada, está plano y vacío, sólo habían vísceras suyas, no había bebé. Abre sus ojos asustado, voltea a ver a la pelirrosa- ¿Sakura?...

-Hicimos todo lo que pudimos, Sasuke, pasamos horas intentando salvarlo... Pero falleció, su pequeño cuerpo estaba en muy mal estado, no lo pudimos salvar. Lo siento tanto, perdóname, Sasuke.-

La expresión en la cara de Sasuke era indescriptible, no recordaba haber sentido tanto dolor desde la masacre de su clan. Su corazón palpitaba con fuerza, sentía que le iba a explotar, su respiración era pesada y el dolor no le dejaba ni siquiera llorar.

-No es cierto, Sakura, esto es una broma-

-No, Sasuke... No es ninguna broma, en verdad lo lamento...- Muerde su labio internamente, intentando mantenerse serena, mira fijamente al frente, no puede verle a los ojos.

-No... ¡No!- Se arranca los cables que tiene pegados al cuerpo y sale de la habitación -¡Lo voy a matar! ¡Ésta vez juro que lo voy a matar así sea lo último que haga!- Busca desesperadamente a Naruto por los pasillos, tirando a todo aquel que se cruza en su camino, hasta que finalmente lo encuentra en la sala de espera, aún asimilando la situación.

Todos sienten el chakra que está emanando el cuerpo de Sasuke, saben que es hostil, tanto que estar cerca hace difícil poder respirar.

-¡Te voy a matar, maldito! ¡¿Cómo pudiste hacerme esto?!- El azabache se aproxima al rubio con intenciones de asesinarlo.

-Perdón... Perdóname Sasuke, yo no quería que esto pasara...- Sin voltear a verlo, sale rápidamente del hospital, mientras es seguido por el azabache que apenas se puede mantener en pie.