Ojos Esmeraldas

Capítulo 2

Elizabeth Miller

—¿Y que tal? Cuéntamelo todo—hablo entusiasmado Alex

—¿Que todo?—me hice la desentendida

—Ash, no te hagas la tonta—dijo—Bueno empieza por la parte de que no te caía bien y ahora si.

—No es que me caía mal, simplemente su forma de actuar no me gustaba y sabes cómo soy—le explique—Ya después lo conocí y pues ya ves.

—Se conocieron mucho eh—murmuro

—Y... ¡mis clases de patinaje empiezan en una semana! Tuvo un inconveniente y no me las pudo dar antes, re mal.

—Solo te digo que vallas a tener cuidado y no vaya a ser que pierdas un diente.

—Ja, ja, ja, que gracioso-me reí con ironía—Bueno tu hermosa mejor amiga se marcha. Te quiero mister músculos.

—Yo igual, debilucha—le sonreí y me marché.

En el camino a mi casa estaba pensando en mi vida y el cambio que ha hecho desde que me mudé a vivir sola. Creo que me he vuelto más responsable. Claro, claro.

Por estar tan metida en mis pensamientos choque con alguien y antes de ir a darle un buen beso al suelo unos brazos fuertes me sujetaron de la cintura e impidieron que me fuese a abrazar a mi querido amigo el suelo. Gire la cabeza para ver quién había sido y allí me encontré a mi querido nuevo amigo "Jackson Dark" con una sonrisa digna de moja las bragas -ay estás hormonas-Contemple su rostro cuidadosamente unos segundos. Dejé de quedarme embobada de verlo y hablé.

—Em... Em... Gracias—llegue a decir entre tartamudeos ¿en serio estoy nerviosa?

—No hay de qué, además si no fuese por mí no hubieses tropezado, lo siento—se disculpó, esperen, Jackson, se disculpó conmigo, sin decir ni una broma, ¿que esta pasando?

—¿Todo bien, Jackie?—pronuncio una chica con una voz chillona tras de él

Ash, esa voz. Me trae recuerdos la verdad.

—Todo bien, Lara. Ahora voy con ustedes ¿Me das un momento?

—Pero solo un momento, Jackie. No te demores—dijo esa voz chillona que me daban ganas de sacareme los tímpanos para no oírla

Oh, el Jackie se veía muy lindo hoy, lo veo sexy pues. Vio como lo estaba devorando con la mirada y habló.

—Se que soy bien lindo y todo pero deja de comerme con la mirada que se te cae la baba—dijo creído

—Solo un momento más—dije, hice con mis manos una mueca de 5 segundos, lo volví a mirar de arriba abajo y aparte la vista—Ya.

—¿Disfrutaste lo que vistes?

-Con esto aumento tu ego—exprese—Aunque más es imposible

—No me has contestado—rei nerviosa—Bonita risa.

Joder, es que es irresistible.

Que ganas de despertar a su lado y lo primero que vea sea ese pelo despeinado.

¡Conciencia!

Y digo eso, para no sacar pensamiento cochinos, degenerada.

Para.

Al final solo soy tus pensamientos tu sabrás.

Cuando deje de discutir mentalmente con mi conciencia pareciendo una loca lo mire, me observaba atento, pendiente a cada movimiento que daba.