Recuerden que los personajes no me pertenecen son del gran Kōhei Horikoshi, yo solo hago que se amen y tengan hijos.
A mi linda beta gracias por tu ayuda y apoyo incondicional, te quiero mucho!
*w*
Llevaba tres años desde que lo sacaron de su casa, lo arrancaron de los brazos de su madre, lo pusieron a trabajar en esa horrible casa de citas nocturnas, era desagradable porque debía limpiar las habitaciones, era constantemente golpeado por su marca en el vientre.
Pero él no se avergonzaba de ella, su madre le había dicho que era especial él creía plenamente en ella, asi que solo debía ser paciente, en cualquier momento alguien iría a buscarlo, pero rogaba que fuera pronto porque en verdad le dolía mucho cuando lo golpeaban.
—Deberías apúrate – dijo una de las mujeres, olía muy desagradable – mi próximo cliente está por llegar.
—Lo siento mucho me daré prisa – ella lo golpeó su rostro impacto el suelo.
—Deberías odiar a ese niño que te delató – no podía hacer eso, odiar no era algo que su madre le enseñó – solo eres el hijo de un demonio.
La vio retirarse, solo pudo dejar salir sus lágrimas, se había acostumbrado a hacerlo en silencio, porque cada vez que lloraba iban a castigarlo; al terminar de limpiar salió del cuarto de ese asqueroso lugar, tenía hambre asi que iría por ese pedazo de pan que había guardado.
Se dirigió al jardín donde se sentó, miraba el cielo estrellado en verdad le gustaba, se veía tan alegre que a veces sentía envidia, porque eso quería decir que los dioses estaban divirtiéndose.
—¿El señor zorro estará ahí? – preguntó al silencio de la noche – espero que sí y le pido amablemente que cuide a mi madre, ella debe estar muy preocupada.
Y sintió como algo se subía a su rodilla, lo veía intensamente, era un pequeño dragón dorado, o eso parecía, la verdad parecía más un gusano super desarrollado.
—¿Tienes hambre? – le extendió un poco de su pan, lo vio comer – pienso que eres como un gusano, pero por respeto diré que eres un pequeño dragón de bolsillo.
Lo vio "sonreír" dándole tranquilidad causándole gracia, lo acarició suavemente, viendo como él se enrollaba en su mano.
—Me llamo Midoriya Izuku – él prestaba atención, eso le agradaba – llevo aquí muchos años y la verdad no me agrada, pero si con eso ayudo a que dejen a mamá tranquila resistiré.
—Oye tu mocoso – la voz de su dueño hizo presencia, le erizo la piel – a partir del siguiente mes empezarás a tener clientela.
—Pero soy hombre – no quería, en verdad todo menos eso – no seré un buen producto.
—Muchos de los que han venido te han visto y quieren probarte – sus ojos se abrieron, de verdad que la humanidad estaba podrida – y si dices que no, iremos por tu madre.
Y ahí la asquerosa actitud de las personas, tratando de manipular con lo único que en verdad le importaba, la avaricia y el cero sentido de empatía; que alguien le explicara que podía contestarle a ese asqueroso ser, que compraba niños, niñas, mujeres para saldar deudas y los ponía a vender sus cuerpos como si de cosas se tratara.
La humanidad era despreciable, solo buscaban la satisfacción propia, él era parte de ese mundo de trueque y beneficios ajenos, porque su cuerpo recordaba cada azote que se le dio, cada día que duró con hambre, que ha tenido que dormir sobre una pila de paja para no morir de frio.
Se levantó, fue directo al cuarto del almacén, quería odiar todo lo que lo rodeaba, quería odiar a Kacchan, pero el hermoso rostro de su madre siempre llegaba a su mente y su corazón se tranquilizaba.
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El dios Zorro y el Aldeano
RomanceEn la era de los dioses, Todoroki Shouto nació como un kitsune privilegiado, pero ha perdido todo deseo frente a la protección de la vida humana; ¿Qué pasara cuando conozca a un pequeño con una extraña marca en su vientre? AU/Mpreg/TodoDeku