JUICIO. (2)

135 13 0
                                    

Adam ya estaba empezando a desesperarse. Esto era una tontería, no serviría de nada si se quedará ahí. De igual manera lo matarían, son alternos después de todo. Solo son monstruos sin piedad a la vida humana. Ellos ni siquiera sabían manejar una biblia, seguramente.

-Adam, ¿puedes decir algo contra este testimonio?-
Adam fue interrumpido por el mismísimo hombre, que ahora en ves de dar miedo estaba como antes. De igual manera seguía siendo inquietante, aunque se vea hermoso con una belleza única daba mal morbo.

-Yo, no recuerdo eso. Entiéndame, yo soy inocente.-
Adam, fue interrumpido por el mismo hombre que había dado un testimonio. Sin duda, no había prestado atención a el. El tipo también era escalofriante, tenía una piel pálida, la barba estaba desprolija y su ropa estaba vieja,era de esperarse. Ahí todos eran iguales.¿Cómo podían vivir así?

-Señor, al igual que ese testimonio hay millones de testimonios de nuestros queridos compañeros e familiares.-

-Muchas gracias, Six. Pero el señor Gabriel no quiere oír más.-

Adam no tenía que hacer, ellos se lo estaban tomando en serio. Solo había pasado 3 horas y ya habían sacado testimonio. ¿Qué demonios era esto? Ellos ni siquiera sabían como hacer un juicio, se estaban guiando por una biblia dada vuelta y lo quieren condenar por algo estupido. ¿Solo lo estaban torturando? Eso debía ser. Adam quería morir de los nervios. Adam se sentía culpable.

-No, si quiero oír otro testimonio. Pero solo uno.-

-Señor Gabriel, ¿está seguro? Hay demasiados.-

-Preacher, dije UN testimonio. Por favor, siga contando.-

Adam estaba asustado. ¿Cuánto duraría esto? Seguramente después de esto muera. Quería que esto terminara pronto, pero a la vez no. No quería morir, pero la culpa le estaba cargando. En el fondo sabía que se merecía esto. Había sido un malcriado con Jonah esa noche y todos los que le rodeaban.

-el otro testimonio que tengo es de hace unas horas, ya sabe donde. Este pecador y su acompañante nos faltaron el respeto e hicieron chistes fuera de lugar. Todo fue una falta de respeto, mi señor. Eso fue furioso para Dios.-

-El no merece el perdón de Dios, no merece el perdón de Gabriel.-

Todos los espectadores empezaron a susurrar otra ves entre ellos. Era desesperante, sus simples susurros eran agobiantes, se parecían a una pesadilla, y Adam podía descifrar que estaban de acuerdo con el hombre de capucha. ¿En serio ellos pensaban que ese "ángel" era Dios? ¿Cómo llegaron a esa conclusión? Ese tipo da miedo, no podía ser tal Dios. Adam quería vivir en el fondo, el tenía esperanzas aunque se sienta culpable.

-Señor Gabriel, me encantaría decir algo contra mi defensa.-

Todos se quedaron callados, llenos de curiosidad, y deseo. La mirada de todos daba miedo, podía ver a través de sus escasos ojos lo que pensaban, ellos querían la muerte de Adam. El sabía que era mala idea interferir, se estaba arrepintiendo un buen. El sabía que era mala idea.

-Digame, y tendrá el perdón de Dios. Dios perdona a todo el que se arrepienta.-

Adam no sabía que decir, había hablado sin pensar. No tenía ni idea sobre que argumentar. Obviamente que tenía razón, pero no le iban a creer.

-U-umh, usted verá. Yo soy alguien inocente, un simple joven inocente. Merezco el perdón de Dios. Estoy totalmente arrepentido, en serio.-

Todos allí empezaron a reír, era una risa inquietante. Adam estaba aterrorizado, más que antes. El único que no se reía era Gabriel, pero también era el que más miedo daba. Sabía que Gabriel aunque no se este riendo, se estaba burlando de él.

-Adam, tu no mereces el perdón de Dios. Eres un pecador muy mentiroso.-

-La biblia dice que todo aquel pecador que se arrepienta tendrá el perdón de Dios. ¡LE JURO QUE ESTOY ARREPENTIDO!-

-¡CONDENENLO AL INFIERNO!-

"El Juicio De Adam"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora