"El Juicio De Adam"

Carne especial

Uuu TW: faltas de ortografía mal escritas qqaaaa

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En el camino, Sarah no sabía por que había sugerido en llevarlo. El tipo no solo era raro físicamente, si no que también era raro en personalidad. Posiblemente era un frikki, pero era bastante raro. Era distinto a los demás, no se comportaba como humano. En el camino decía cosas como "me gusta tu ropa de mujer" o simplemente se quedaba callado. Bueno, era mejor que el tipo este callado a que diga algo más raro.

-Umh, es aquí.-

Sarah tuvo la vista a un lugar abandonado, como una casa bastante grande en las profundidades de un campo. Estaba muy vieja, llena de grafitis de adolescentes y con un "poco" de suciedad.

-Espero no le moleste, pero... ¿usted que vende aquí?-

-Oh, vendo carne. Carne especial para gente especial.-

-¿gente especial?-

-Si, ya sabe. Gente que no se conforma con carne de res, cerdo o alguna otra cosa.-

De pronto, a Sarah se le vino a la mente Adam. Hace unos minutos, como 30 o 40 Adam había dicho que no le gustaba esa carne, y que quería una especial. Posiblemente el criminal raro venda drogas en ella, o carne de caballo. Pero, no podía perder el tiempo.

-Yo... ¿podría venderme de su CARNE especial?-

-¡Claro! Justo te iba a invitar a pasar.-
Sarah estaba desconfiada, pero no podía hacer otra cosa. En realidad, era su mejor opción.

Mientras bajaban del auto camino a unos pasos al lugar abandonado, podía jurar de que se sentía observada, y no solo del vendedor raro. Mayormente, sentía miradas del bosque. Lugares donde estaban llenos de oscuridad aunque sea de día, sentía millones de ojos mirándola.

-D-Disculpe, ¿podría darme la carne aquí?-

-¿aquí?-

-Si, realmente no tengo mucho tiempo y- -

-No.-

Si antes Sarah tenía sospechas, ahora las podía comprobar. El vendedor tenía una cara de odio, y un tono seco que le recordaba a Adam. De echo, le recordaba mucho a Adam. Cuando Sarah estuvo a punto de correr, sintió un apretón en el brazo. Estaba sudando, sudor frío, y sabía que estaba por morir a manos de un frikki carnicero. Cuando estuvo a punto de gritar, fue interrumpida por ahora una dulce voz proveniente de atrás de ella.-

-¡Él solo está bromeando! Si te va a dar la mercancía. ¿Verdad?-

Era una chica un poco más baja, de la altura de Sarah, y era bastante joven. Tenía un rostro bastante lindo, y unos ojos grandes, junto a un pelo marrón bastante alborotado y despeinado.

-Lo siento, soy Eva. Nuestro amigo, Six... tiene problemitas.-

-¿p-problemas?-

-Si... hace poco se le murió un familiar cercano, y está bastante deprimido. Espero no estes muy asustada.-

Sarah SI estaba asustada, y bastante. ¿Reprimido? Con razón tenía cara de drogadicto.
Cuando se dió la vuelta, noto la veroz mirada del hombre más alto hacia la joven, tenía una mirada de desagrado sin disimular bastante obvia.

-Ten tu carne. Aunque, de todos modos vamos a necesitar que nos pagues adentro, Sarah.-

Cuando Sarah recogió la carne, no venía en bolsa ni nada. Estaba cruda, llena de sangre, y sucia como si lo la hubieran limpiado, y se notaba que estaba recién cortada. Sentía que se le resbalaba de sus manos, y era bastante roja que desprendía un olor particularmente diferente.