A Nascent Kaleidoscope.

capitulo 134

tórum POV

"Esto debería ser lo suficientemente lejos". Eché un vistazo a nuestro entorno. Estaba bastante lejos de los muros de Whiterun, pero también lo suficientemente lejos de las tierras de cultivo que se pueden volver a sembrar cuando esta crisis haya terminado.

"Toda esta área solía ser llanuras vírgenes". Wilhelm miró a su alrededor también. "En realidad, era bastante hermoso. Ahora se ha reducido a cenizas y cráteres".

"Sí, echo de menos la vista antes de que vinieran los dragones. Ahora, cuando miro desde lo alto de las paredes, todo lo que veo es destrucción".

Parecía triste mientras miraba a lo lejos. No sabía que le importaba tanto que esta tierra viniera de muy lejos. "Casi lo olvido, ¿cómo está Sir Wiggles?"

"Se le ha visto corriendo por Whiterun, en este momento la mayoría de la gente sabe que no deben hacerle daño, incluso si pudieran hacerlo". Solté una carcajada. "Estaba jugando con los niños el otro día, dejando que lo persiguieran por las calles".

"Eso es bueno, me alegro de que esté saliendo y divirtiéndose". Wilhelm tenía una sonrisa de contenido en su rostro. "Entonces, ¿cómo quieres hacer esto?"

"Bien...." Me rasqué la cabeza. "No sé." Me reí.

"Eso es justo, no creo que hayas tenido que pensar en enseñarle a alguien antes". Wilhelm no envidiaba mi ignorancia. "Para ser honesto, no creo que nunca llegue a dominar este Thu'um como lo harás tú. Solo espero volverme hábil con algunos gritos".

Los Greybeards me dijeron que era muy difícil para otras personas aprender el camino de la voz. Incluso para ellos, se habían mantenido alejados del mundo y habían pasado toda su vida aprendiendo en la cima de esa montaña. Y todavía no eran muy buenos en comparación con el dragón promedio, al menos en comprensión.

"¿Algún grito que quieras practicar?" Yo pregunté.

"Bueno... hubo uno que usaste contra ese dragón donde tuviste una gran explosión de velocidad". Respondió.

"Ah, el torbellino de carrera. Ese fue uno de los primeros gritos que aprendí con los Greybeards".

"Sí, no me importaría poder tener ese tipo de velocidad. Pero tengo curiosidad acerca de las limitaciones, ¿es un efecto constante, hay una duración limitada?"

"Depende de cuánto poder se ponga en el Grito". Hice mi mejor esfuerzo para explicar, pero este tipo de cosas no eran mi punto fuerte. "Es... err... los gritos no usan Magicka, pero extraen poder del alma". Suspiré, esto era difícil de poner en palabras.

"Entiendo." Guillermo habló. "Todas las variables, desde la duración hasta el poder, dependen de cuánta 'fuerza' se ponga en cada grito, junto con otras cosas como entender las palabras y demás. Lo que explicaría por qué esta habilidad no está tan extendida como la magia. Requiere un alma muy poderosa para llevar la carga, o años y años de práctica y meditación".

Parpadeé ante sus repentinas palabras, cómo fue capaz de explicar todo lo que sabía instintivamente. Brevemente me dio envidia de él antes de rechazar esos pensamientos. "Sí, eso suena correcto". Asentí ante su explicación. "¿Hay alguna forma en que quieras hacer esto, o debo decirte las palabras?"

"Empecemos con las palabras". Guillermo asintió.

"El primero es 'Wuld', que significa Torbellino. El segundo es 'Nah', que significa furia. El tercero es 'Kest', que significa tempestad".

"Eh, eso es diferente de lo que pensaba". Wilhelm se frotó la barbilla.

"¿Es malo?" Inclino mi cabeza ante su pregunta, tratando de adivinar sus pensamientos.