Instinto (En proceso)

Capítulo 10

La prueba ya acabado

5 meses después

10 de septiembre de 2020

Michelle

Han pasado cinco meses es decir que mi tiempo de prueba ya ha terminado y hoy Alessandro me dirá que me pasará

Me encuentro con Salya en su habitación, está cambiándome como siempre, dice que le gusta cambiarme como su muñeca

-ESTEEE- sale corriendo del closet con un vestido rojo en sus manos

Tomo el vestido y lo miro

-¿Segura que es un vestido? Creo que le falta una parte- es lindo pero corto

-Tu pruébatelo- gira sus grandes ojos verdes

Me lo pongo y tardo un poco porque batallo en subirlo

-Dioos, te queda perfecto, mira ese traserooo que envidia- me da una palma en el trasero y brinca de emoción

-Se me hace demasiado- veo mi reflejo en el espejo

-No no no no- niega con la cabeza- te lo dejas sino te haré la vida imposible, toma los tacones negros se verán perfectos

Me pongo los tacones y me elevo cinco centímetros quedando del mismo tamaño que Salya que en este momento está utilizando sandalias así mide 1.70, estoy nerviosa y ella puede notarlo porque aprieta mis hombros dándome una sonrisa

-No estes nerviosa, te quedarás- me abraza- lo presiento

Salya sale diciendo que estará en la sala dejándome sola, arreglo mis rizos y me siento en el columpio para pensar unos momentos en mi familia y mi novio, las únicas personas que tenía en mi vida y que extraño muchísimo, siento mis ojos húmedos trato de controlarlo ya que no quiero que se den cuenta, pero mi corazón duele mucho

Tomo mi tiempo y salgo yendo a la sala para encontrarme con Salya, pero cuando entró no está así que pienso que tuvo algo que hacer y tomo un libro para sentarme en el sofá para esperarla

Estoy leyendo cuando escucho el ruido de la puerta y levanto mi vista encontrándome con Salya acomodándose la ropa, aguanto la risa cuando ella me mira entrecerrando sus ojos

-Ni te rías- me señala- Alessandro quería un rato, quiero ver la cara de Camille cuando se entere- reímos

-Enterarme ¿de qué?- entra la rubia

Salya y yo nos vemos y yo trato de aguantar una sonrisa

-Oh ¿no supiste? Alessandro me solicitó a mi para pasar el rato- ríe Salya sentándose a mi lado

Camille le da una mirada asesina antes de salir a zancadas

-Como te gusta hacerla enojar- rio volviendo a mi lectura

-Es mi razón para seguir aquí- bromea

Pasamos el rato juntas hasta que la puerta se abre dándole paso a Leonardo

-Alessandro quiere verte- me habla Leonardo

Salya se levanta y me abraza

-Nos volveremos a ver en unos minutos- me susurra "eso espero"

Salgo dejando a Leonardo y a Salya, voy en camino a su despacho estoy muy nerviosa y tengo miedo, temo a que no haya pasado la prueba y lo que puede pasarme

Toco la puerta y escucho un "Pase" del otro lado de la puerta, entro y Alessandro ya está esperándome en su sofá

-Siéntate- me ordena

Tomo asiento a su lado y lo miro a los ojos, es difícil saber que piensa es muy bueno ocultando todo

-Veo que estas nerviosa querida- puede ver mis manos temblando

Acaricia mi rostro alzando mi mentón para que lo mire a los ojos, nos quedamos un momento mirándonos y me da una sonrisa ladeada

-No tienes por qué estarlo- pasa su pulgar por mis labios

-¿Qué?- abro mis ojos sorprendida

-Significa que haz pasado la prueba cariño- me sonríe

¿Escuché bien?¿Pase? Seguiré viviendo, eso me hace dar una pequeña sonrisa

-Oficialmente eres igual que Salya y Camille- se levanta yendo a su escritorio y regresa con un sobre amarillo en sus manos- toma- me tiende el sobre lo tomo y él vuelve a sentarse a mi lado

Lo miro y me hace una seña con los ojos para que lo abra, asiento y voy abriendo el sobre hasta revelar lo que hay dentro, abro mis ojos porque hay una foto mía que fue tomada hace unos día, no solo me la tomé yo también Salya y Camille, no sospeché de nada, los datos que vienen no son los mismo que mi identificación oficial

-No creías que te que quedarías con tu identidad pasada- se ríe de mi cara de confusión- no podrías viajar conmigo con tu vieja identidad

-¿Es falso?- tengo duda porque esto luce muy real

-Es una identidad real- ¿Qué? Pero- Ahora te llamas Antonella Ricci nacida en Italia, huérfana, tus padres te abandonaron en una iglesia- me explica lo que veo- Tu vida pasada no existió- nuestros ojos se encuentran- Michelle Torres ya no está, no existe y espero que lo tengas claro

Me paralizo y las palabras se me atoran en la garganta ¿Salya y Camille pasaron por lo mismo? Quiere decir que ¿sus verdaderos nombres no son esos?

-¿Lo tienes claro?- toma mi mentón apretándolo

-Si, lo tengo claro- asiento

Se acerca a mi posando sus labios en los míos con un beso con deseo, se inclina acostándome en el sofá con él encima de mi pasando su mano por mi pierna y recorriendo mi cuerpo

"vamos de nuevo"

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Nos levantamos poniéndonos la ropa, ya que estamos vestidos se me acerca

-Así que dime Antonella- se me hace raro que me llame por ese nombre creo que puedo tardarme en acostumbrarme a ello, toma mi cintura- ¿Qué es lo que quieres?

Me enfoco en un punto fijo pensando un momento volviendo mis ojos a los suyos

-Quiero aprender- digo

-¿Y qué quieres aprender?- me sonríe

-Todo