Formas de amar.

Por fases Parte I

18 de octubre de 2010

¡Dios mío es tan guapo! Hoy me he permitido mirarle un poco más de los 10 segundos que hasta ahora me he permitido en la clase de mate. Adoro cada parte de él, su pelo dorado en esa melenita tipo surfero, esas pantorillas de futbolista y ¿qué decir de su sonrisa de anuncio? Todo él es tan maravilloso que muero de amor cada vez que lo veo y lo digo en serio, las clases de historia son para mí un tormento, es tan inteligente que todavía no sé cómo toda la clase no se ha dado cuenta de que se me cae la baba cada vez que lee sus disertaciones.

Ains, no dejo de estar en una nube cada vez que pienso en él pero lo peor es que no estoy en su radar; dudo que sepa que existo y no dejo de pensar en cómo lo puedo hacer para que se entere de que Marta simplemente está.

21 de octubre de 2010

¡Tengo un plan! Parece que aunque va a llevar tiempo y que será un poco complicado pero por lo menos servirá para que sepa de mi existencia. Da la casualidad de que hoy cuando he quedado con Mireia en la plazoleta de debajo de mi casa he visto salir a Marcos del portal de enfrente con una guitarra a la espalda ( ¡Sabe tocar la guitarra¡ Lo que me faltaba para terminar de babear por él), por lo que deduzco que o bien toca en un grupo lo cual le suma un plus de babeo o va a clases lo que tampoco está nada mal. Así que he pensado que el próximo jueves miraré desde mi ventana a la misma hora para confirmar que sale de su casa tal y como ha pasado hoy, si lo hace es que tiene clases todos los jueves a la misma hora. Entramos en la fase uno de mi plan: confirmar que pasa por la plazoleta todos los jueves a la misma hora.

28 de octubre de 2010

¡CONFIRMADO! Hoy he vuelto a ver a Marcos saliendo a la misma hora que la semana pasada de su portal por lo que además de alegrarme la vista y protagonizar mi propio papel a lo James Stewart en "La ventana indiscreta" (incluyamos catalejos que una es miope y no quiere llevar gafas) pasamos a la segunda fase de mi plan.

Segunda fase: que me vea cada vez que vaya a sus clases. Cada semana pasaré por su lado con un pretexto, una vez con la bolsa de haber hecho recados, otra con una amiga (no más guapa que yo, no vayamos a tener algún disgusto...), con la mochila como si fuera a algún lado... Vamos que me faltará ir vestida de naranja fosforito para ser más visible.

4 de noviembre de 2010

Puf que nervios...Ya he empezado con la fase dos y madre de Dios ¡he subido a casa temblando! ¡Ha sido tan intenso! Voy a empezar por el principio porque si no, va a ser imposible entenderme a mí misma.

A eso de las cuatro y media he abierto el armario y me he cambiado ochenta millones de veces de ropa porque por supuesto tenía que bajar de punta en blanco, si quiero que se fije en mí tendré que ir un poco llamativa ¿No? Pues nada misión imposible... Hoy no he encontrado nada suficientemente bueno que ponerme y he bajado con lo que más me convencía dentro del desastre de fondo de armario que tengo. Después, le he dicho a mi madre que si quería que hiciera algún recado y maldita sea mi suerte que me ha dicho que no... así que he tenido que ir a la papelería de mi barrio con la excusa de que necesitaba algunas cosillas (ahora tengo grapas para 3 años y un cuaderno que no tengo ni idea de cuando lo utilizaré). He salido de la papelería justo a la hora a la que vi pasar a Marcos y al girar la esquina lo he visto venir hacia mí. Nunca se me había acelerado el pulso de esta forma, el corazón casi se me escapa por la boca y he tenido miedo de llegar a escupirlo. Pero por fin ha pasado, han sido solo unos segundos pero han sido los segundos más maravillosos de mi vida simplemente porque le he mirado a los ojos y le he sonreído. Espero no haber puesto una sonrisa desmedida o de bobalicona, por favor deseo con toda mi alma que haya surtido efecto y que se haya fijado en que existo.

18 de noviembre de 2010

Después de tres jueves "coincidiendo" con él he pensado en dar un paso más en la segunda fase del plan y pasar a la tercera fase. La tercera fase consistirá en lograr hablar con él y ¿Cómo lo haré? Llevaré una carpeta con papeles (apuntes de cursos pasados) y la dejaré caer justo cuando vaya a pasar a mi lado por lo que él se agachará caballerosamente para ayudarme a recoger mis papeles y yo le diré lo torpe que soy además de darle las gracias y decirle que como agradecimiento otro día podemos quedar a tomar algo. Tengo una semana entera para llenarme de valor y poder llevar a cabo la tercera fase.

25 de noviembre de 2010

Ahí iba yo muy segura de mí misma, ha sido digno de ver la seguridad con la que iba andando con la carpeta contra mi pecho y el andar derechito hacia él. He controlado cada parte de la situación, que las madres de la plazoleta no nos viesen, que el chico de la acera de enfrente tampoco nos viera para que no se pusiera a ayudar...Pero en el último segundo me he acobardado y he pasado junto a él con la carpeta bien pegada a mí y con la cabeza gacha. A la mierda la tercera fase del plan. Tiene que haber otro modo de hablar con él, me siento fatal, estoy en mi cama escuchando música y con ganas de meter la cabeza debajo de la almohada para gritar.

1 de diciembre de 2010

¡Soy súper feliz! El sábado mientras bebía muchísimo para ahogar las penas me sinceré con Jaime y le conté lo coladita que estoy por Marcos y las tonterías que he hecho las últimas semanas para llamar su atención. Tras reírse de mí por lo babalicona que soy y después de aplacar mi furia alcoholizada ha logrado explicarme que todo podría haber sido muchísimo más fácil que haber montado la fase dos. Resulta que no había caído en que Jaime y Marcos juegan en el mismo equipo de futbol. Ha sido Jaime el que me ha dado hoy una gran idea y lo que va a ser la fase cuatro; voy a ir a todos los partidos que jueguen aquí así me irá viendo en más sitios que en clase o en la plazoleta. Este sábado comienza la cuarta fase.

¿Cómo creéis que le irá a Marta con la siguiente fase? ¿Hará el ridículo? ¿Le podrá la vergüenza?