Vampire Blood [Jerza, Grayza] - Fairy Tail (EN EDICIÓN)

CAPÍTULO 5

ENTRADA:

"No sabía dónde estaba, era una especie de bosque oscuro a las afueras de Magnolia, o eso es lo que los estándares me hacían ver. Estaba sola ¿por qué? No lo sabía, solo sabía que estaba tirada en el pasto de ese bosque y que no había nadie. Impulsé mis manos en el suelo dispuesta a irme, pero justo cuando estuve de pie, ella apareció frente a mí.

Ultear: ¿Piensas escapar? -dijo burlesca y con fuerza me empujó hasta un tronco de árbol- No me hagas recordarte quién es la más fuerte de nosotras -susurró apretando su mano en mi cuello- No te pases de lista, cariño -apretó más mi cuello, a lo que solté un quejido grave- Lamentablemente aún no me puedo deshacer de ti -retiró su mano y froté mi cuello a causa del dolor que ella había provocado- Eres una pequeña débil -dijo burlona-
Erza: Estás loca -le escupí-
Ultear: No, no, no -hizo una seña con su pulgar- No se le trata así a una pariente mucho menos a una que es mayor que tú -sonrió de lado- Ahora quiero que me pongas mucha atención -me miró con esa cara de loca- Te haré algo que te va a doler, pero que te hará despertar de esto -se estaba acercando a mí y por instinto, retrocedo- No me hagas perder el tiempo -dijo en voz baja y sus ojos se conectaron con los míos, sus pupilas se dilataron y mi mente se quedó en trance- No me recuerdas, ni ahora ni la pequeña visita que te hice en el baño esta mañana -asentí- Ahora si me permites -estiró sus manos haciendo que sus dedos traquearan- Adiós, Erza. Te veo luego -sonrió-

Me tomó de ambos lados de mi cabeza, presionó con fuerza y tiró de ella hacía un lado, haciendo que mis sentidos se desconectaran completamente".

Abrí mis ojos mientras respiraba agitada, con lo único que me topé fue con un techo blanco iluminado por luces blancas. Recorrí todo el lugar con la mirada, desde las máquinas hasta la puerta, estaba en el hospital. No recordaba por qué estaba aquí, lo último que mi mente procesaba era el recuerdo de haber estado en el baño lavándome las manos, después de eso, todo es nulo. La puerta se abrió de repente y Lucy se me quedó mirando, para luego casi lanzarse sobre la camilla.

Lucy: ¡Erza Scarlet, gracias al cielo que despertaste! -dijo casi llorando- pequeña idiota – pude sentir su sonrisa mientras me abrazaba
Erza: ¡Hey! Heartfilia, me estás aplastando -ella se quitó de inmediato-
Lucy: Lo siento -sonrió- Gracias a Dios que despertaste
Erza: ¿Qué rayos me pasó? -ella alzó la ceja-
Lucy: ¿No te acuerdas? -dijo haciendo la misma expresión-
Erza: Estaba inconsciente, Lucy -dije obvia-
Lucy: ¡Oh! Sí, tienes razón -a veces podía ser tan no inteligente- Bueno, cuando fuiste al baño te esperamos en la clase de ciencia, pero como no llegaste luego de 20 minutos Wendy y yo nos comenzamos a preocupar y le pedimos al profesor permiso para ir a buscarte, cuando fuimos al baño te encontramos ahí tirada, Wendy corrió por ayuda y Jellal nos ayudó a llevarte al hospital, ya sabes te alzó y todo eso, es un chico muy tierno y fuerte y sus ojos so...
Erza: No te vayas del tema -la regañé-
Lucy: ¡Oh! ¡sí, claro! -asintió- Bueno, entonces te llevamos al hospital y llamamos a tu mamá, el doctor dijo que tenías las defensas un poco bajas y que por eso te habías desmayado y como no despertabas te dejaron aquí y ahora despertaste -finalizó-
Erza: No recuerdo nada -froté mi cabeza-
Lucy: Vas a estar bien -sonrió-
Erza: ¿Y mamá? -le pregunté-
Lucy: En la cafetería -dijo señalando la puerta-

Tenía que hacer algo para poder recordar, aunque sea un poco, algo me estaba pasando y no era normal. Observé como Lucy se sentaba en la silla que estaba en una esquina de la habitación y sacaba su teléfono, tal vez le estaba avisando a Wendy que yo ya había despertado. Me quedé mirando hacia el techo; algo no estaba bien, me sentía extraña y algo dentro de mi mente me impulsaba a esforzarme por recordar lo que había pasado en ese baño. Cerré los ojos y unos leves golpes se escucharon en la puerta para luego escucharse el rechinido de esta y al abrirse, abrí mis ojos.

Jellal: Hola -dijo asomando su cabeza por la puerta- ¿Puedo pasar?
Lucy: Adelante -sonrió-

Jellal abrió toda la puerta y se dio paso, pero no venía solo, el chico moreno y de cabello negro que estaba con él aquel día lo acompañaba. El chico moreno me miró por un momento y volví a sentir lo que había sentido la primera vez que había conocido a Jellal.

Jellal traía un globo de helio en sus manos que tenía una carita feliz y una especie de mensaje de apoyo.

Jellal: Él es mi hermano Gray -dijo- Gray, ellas son Lucy -señaló a la rubia, que le sonrió coqueta, nada que no me sorprendiera- Y ella es Erza -otra vez el chico me observó con esa extraña mirada-
Gray: Un placer, chicas -sonrió-
Jellal: Te hemos traído un globo, fue lo único que se nos ocurrió -sonrió y me miró a los ojos haciéndome sonreír de igual forma-
Lucy: Eh, Gray -llamó la atención del moreno- Nos acabamos de conocer pero ¿quieres ir a la cafetería?
Gray: Sería un placer -le sonrió- Nos vemos afuera, Jellal -ambos se miraron a los ojos, eran un par de hermanos muy extraños- Fue un placer conocerte, Erza -me sonrió-
Erza: Lo mismo digo, Gray -le devolví el gesto-

Lucy y Gray salieron de la habitación, Jellal me miró y sonrió. Era tan misterioso y adorable que algo dentro de mí me pedía a gritos que no me separara de él y extrañamente ahora ese algo me decía que tampoco me separara de Gray. Jellal se acercó a mi camilla y se sentó a un lado de esta, yo me corrí un poco y dejé un espacio de mayor tamaño para que pudiera acomodarse bien.

Jellal: ¿Cómo te sientes? -preguntó-
Erza: Bueno, me desmayé en un baño de escuela y no recuerdo nada -dije divertida, él solo frunció el ceño-
Jellal: ¿No recuerdas nada? -dijo serio-
Erza: No, lo último que recuerdo es estar lavándome las manos; después, todo queda nulo -me encogí de hombros-
Jellal: Erza -me miró a los ojos-

Sentí un trance y sus pupilas se dilataron, mis sentidos se desconectaron de mi cerebro y toda mi atención se puso en él. Había sentido algo parecido antes pero, ¿dónde?

Jellal: Vas a recordar lo que pasó en el baño -afirmó y mi trance desapareció- ¿Segura que no recuerdas nada? -insistió-
Erza: No recuerdo nada, Jellal -se sorprendió ante mi respuesta y frunció el ceño- ¿Podrías encender el televisor?
Jellal: Claro -fingió una sonrisa-

"-Hola, soy Rufus Lohr reportando desde el Bosque de Magnolia -Jellal y yo nos quedamos observando la pantalla- Desde este lugar se reporta el ataque de lo que parece ser un león de montaña a un cazador de la zona -la horrible imagen de un hombre con una herida en su cuello apareció en la pantalla, los ojos de Jellal se abrieron como dos balones- Aún control de animales no ha logrado capturar a la criatura pero ya están trabajando en ello". -Jellal apagó el televisor de pronto-

Erza: ¿Estás bien? -dije con el ceño fruncido-
Jellal: ¡Eh, sí!, Me tengo que ir -dijo rápido- Pero antes quiero decirte algo y no hagas preguntas, Erza porque no te las voy a responder -esto me estaba asustando-
Erza: Está bien, creo -dije poco convencida-
Jellal: No dejes que nadie que no conozcas entre en esta habitación -me advirtió- ¿Entendido?
Erza: Creo -ahora sí me estaba asustando-
Jellal: Erza... -me regañó- Si no somos Gray, Wendy, Lucy, tu madre o yo, no permitas que pongan un pie en esta habitación -dijo realmente serio-
Erza: Entendido -asentí-
Jellal: Pídele a Lucy que cierre todas las ventanas y no te atrevas a salir -me apuntó-
Erza: Entendido, Jellal -esto era tan raro-
Jellal: Te veo luego -dijo antes de echarme una mirada-

Salió de la habitación azotando la puerta, ya había despejado todos los pensamientos raros pero Jellal hacía que mis pensamientos volvieran a aparecer.
Observé toda la habitación buscando algo interesante que hacer pero nada. La ventana estaba abierta, tendría que esperar a que Lucy apareciera para que cerrara mi ventana. Me quedé observando la ventana como una tonta. Me sobresalté cuando un cuervo se puso en el marco de esta, me quedé mirando a aquel animal hasta que este dilató su pupila, justo como lo habían hecho Gray y Jellal hace unos minutos.