Takemichi Kokonoi

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La familia Kokonoi era muy reconocida por ser millonarios, desdelos mas pequeños de la familia hasta el abuelo, eran grandes emprendedores y generaban mucho dinero en menos de una hora.

El primogénito de la familia era muy excéntrico, y algo ausente con su hermano menor, aunque eso no quitara el hecho de que no lo quisiera.

Si se lo preguntaran, respondería algo como "daría todo el dinero que tengo y el que no tuviera por el".

Sus padres y abuelos siempre supieron eso, pero el menor parecía desconocerlo. Creía que Hajime lo odiaba. Claro que tuvo bases para basar y confirmar su teoría.

Prueba numero 1:

Hajime siempre ponía sus "negocios" antes que a el. 

Prueba numero 2:

Hajime siempre lo evitaba o lo ignoraba, o de lo contrario, lo molestaba con apodos que no le gustaban.

Prueba numero 3:

Hajime prefería pasar el día contando su dinero que salir a jugar con el, incluso prefería compartir la cama con sus billetes y taparlo con la manta completa dejándolo así a Takemichi en el frio y duro piso.

Conclusión . . . Hajime no quiere a Takemichi.

O eso creía el azabache hasta que su hermano mayor se comenzó a comportar extraño cuando el dejo de insistir por su atención ya que había hecho un amigo en el instituto.

Su nombre era Inui Seishu, lo debía admitir, era alguien muy atractivo, pero muy serio, o al menos solo con los demás por que a el lo seguía como un cachorrito sin dueño.

. . .

A Hjime se le hacía muy raro que la mini copia de su padre, por que si Takemichi era muy parecido a su padre y Hajime a su madre, no lo estuviera siguiendo y buscando su atención como usualmente era su costumbre.

Bueno no se debía preocupar , seguramente se había quedado a hacer el reporte de clase ese día y no tardaría en llegar. Mejor fue a ver las graficas y mas números que tenia que revisar para e nuevo negocio que emprenderían sus padres.

Hajime se dirigió al despacho y paso varias horas ahí, aunque para el fueron minutos al checar el reloj que estaba colgado en la pared se percato de algo muy importante.

El estúpido reloj estaba sucio, les diría a sus padres que cambiaran de criada por que la que tenían no limpiaba bien las cosas.

Oh y tambien que habían pasado 5 horas desde que su hermano no llegaba aun. Lo supo por que hasta el momento no estuvo tratando de llamar su atención y no oyó el tintineo del pequeño cascabel que puso en la mochila del menor.

Eran las ocho de la noche, ya estaba obscuro, y el azabache oji azul aun no llegaba a su residencia ¿Le habría pasado algo?

Las preocupación se adueño  de su cuerpo. 

Rápidamente se dispuso a revisar cada habitación de la mansión en la que vivían para ver si el tintineo había pasado desapercibido y Takemichi ya había llegado.

Su esfuerzo fue en vano. 

Se dirigió al teléfono que había en la sala para ver si había un mensaje de voz que pidiera un rescate por su Take, pero no hubo ninguno, su sangre de a poco dejaba de llegarle al cerebro y sus neuronas por consecuencia dejaron de funcionar.

Comenzó a llamar todos los números de hospitales y estaciones de policía para que comenzaran la búsqueda del pequeño Takemichi Kokonoi. 

Fácilmente pudo llamar al teléfono móvil de Takemichi pero al no llegarle la suficiente sangre al cerebro esa opción no fue presentada a su lista de soluciones.

Takemichi, hermano de... [En Pausa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora